Era un sábado soleado cuando Eddie y Buck decidieron que era hora de salir de la rutina. Después de una larga semana de trabajo, ambos sintieron que necesitaban algo diferente, algo que los conectara con el mundo exterior. Fue entonces cuando Buck propuso la idea de la fotografía de naturaleza.
“¡Vamos a capturar la belleza que nos rodea!” dijo Buck, iluminado por su entusiasmo contagioso. Eddie sonrió, sabiendo que cualquier aventura con Buck sería divertida, y aceptó sin dudarlo.
Prepararon sus mochilas con cámaras, lentes, agua y algunos bocadillos, y partieron hacia un parque cercano conocido por sus paisajes impresionantes. Al llegar, el aire fresco y el canto de los pájaros les dieron la bienvenida.
Buck comenzó a explorar, acercándose a cada árbol y flor como si fueran obras maestras esperando ser fotografiadas. “Mira esto, Eddie”, exclamó mientras apuntaba su cámara hacia una mariposa posada en una flor. “¡Es perfecta!”
Eddie observó cómo Buck se sumergía en su nuevo hobby, disfrutando cada momento. Se echó a reír cuando Buck intentó acercarse sigilosamente a la mariposa pero terminó tropezando con una rama. “¡Cuidado! No queremos asustar a las criaturas”, bromeó Eddie.
A medida que avanzaban por el parque, comenzaron a encontrar lugares impresionantes: un lago tranquilo rodeado de árboles dorados en otoño, una colina con vistas panorámicas del paisaje y un pequeño arroyo que murmuraba suavemente. Con cada nueva ubicación, su emoción crecía.
“Deberíamos hacer esto más seguido”, sugirió Eddie mientras tomaba una foto del reflejo del sol en el agua. Buck asintió con entusiasmo, haciendo clic en su cámara para capturar el momento.
Al caer la tarde, decidieron sentarse en un banco para revisar sus fotos. Rieron juntos al ver las imágenes borrosas que habían tomado mientras intentaban moverse rápidamente para capturar algo fugaz. Pero también se sorprendieron al ver algunas tomas realmente hermosas: Buck abrazando un árbol enorme o Eddie riendo mientras trataba de atrapar una hoja que caía.
“Esto es solo el comienzo”, dijo Buck con una sonrisa traviesa. “La próxima vez deberíamos ir a esa montaña que mencionaste.”
Eddie sintió una chispa de emoción ante la idea. No solo estaban explorando un nuevo hobby; estaban creando recuerdos juntos. Y eso era lo más importante.
Mientras el sol se ponía en el horizonte, pintando el cielo de tonos naranjas y púrpuras, ambos supieron que este día sería uno para recordar. Se miraron y sonrieron, sabiendo que juntos podían hacer cualquier cosa.
No puede ser, ya llegamos a 1.1k que emoción
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un Dulce beso (Buddie )
Fiksi Penggemarflufftober Evan y Eddie ¡Este mes me lanzo a dos retos creativos! Espero que mis ideas no se quemen como las galletas que hice la última vez. ¡Acompáñenme en esta aventura!"
