sesenta y tres

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Los labios de Jisung aplastaron suavemente los de Chenle y los abrieron. Pronto, su lengua penetró y barrió suavemente el interior de la boca de Chenle.

Sus lenguas chocaron, se enredaron, recorrieron la boca del otro al máximo, se volvieron a enredar, aguantaron la respiración y se besaron durante mucho tiempo.

Chenle estaba fuera de sí. No fue hasta que todo su cuerpo se calentó que se dio cuenta, tardíamente, de que estaba besando a Park Jisung.

El movimiento de Jisung era lento pero persistente. Parecía estar perdiendo el aliento. Chenle estaba jadeando y la cabeza le latía con fuerza. Jisung despegó los labios.

“Haaa…”

¿Se suponía que besar fuera algo tan agitado?’ Le era difícil respirar rápidamente porque el olor a alfa de Jisung se impregnaba dentro de él con cada respiración, y se sentía morir.

Cuando sintió que su respiración se calmaba un poco, Jisung lo levantó.

“¡Espera…!”

Jisung, quien tomó a Chenle en sus brazos, salió del restaurante. Llegó frente al ascensor en un instante. La puerta del ascensor se abrió, y no fue hasta que entraron, que Jisung finalmente lo bajó. Y besó nuevamente. 

“Ummmhh…”

La espalda de Chenle estaba fuertemente apretada entre sus brazos mientras que sus manos luchaban en el aire. La lengua que penetraba de nuevo en su boca era mucho más atrevida y caliente que antes.

Entonces, recordó la vez pasada en la que Park Jisung pasó por su Rut. En ese momento este maldito loco había ido a su empresa para acosarlo. El loco de ese entonces y el de ahora eran el mismo, pero esta vez…

‘¿Por qué estoy tan impaciente…?’

En aquel momento, el cuerpo de Park Jisung estaba tan caliente que lo atacaba de tal manera como si no le importara en absoluto el omega frente a él, pero ahora era un poco diferente.

‘Desesperación’. Esa era la palabra con la que Chenle definió la desconocida sensación de los repetidos besos de Park Jisung.

Ni siquiera podía recordar cómo había llegado, pero antes de darse cuenta, Chenle ya estaba de vuelta en su habitación. Después de atravesar el pasillo hasta la puerta principal, el beso comenzó a bajar por su cuello hasta que llegaron a la cama.

Cada que los labios chocaban contra su piel provocaban sonidos junto con el toque de sus manos tratando de quitarle la ropa. Chenle, que estaba luchando bajo el cuerpo de Jisung, no pudo soportar la carga y apenas abrió la boca.

“Es-espera…”

A pesar de que ya habían hecho mucho más que esto, Park Jisung ahora era un alfa en celo. Chenle estaba asustado del hombre, cuya cosa estaba tan dura que podía sentirla claramente entre sus muslos. También recordó que la primeva vez que tuvo sexo con él fue triste y doloroso. No quería volver a pasar por algo así.

Pensó que ignoraría sus súplicas con voz rastrera, pero inesperadamente, Jisung dejó de moverse. Y se enfrentó a Chenle con toda la cara sonrojada.

“Yo, creo que deberíamos lavarnos primero”.

Era la mejor excusa para un hombre con tal sentido de la limpieza. ‘¿No fue él quien les dio un gran reproche a los pobres empleados sobre la higiene del complejo justo anoche?’ Sin embargo, la última expectativa de Chenle se rompió. Park Jisung volvió a chocar contra sus labios.

“Nggh…”

De seguro debía de tener mucho olor corporal, pero Jisung comenzó a morder y chupar todo el cuerpo de Chenle como si no le importara. Lo cual era algo que nunca haría aquel Park Jisung que él conocía. ¿Este tipo finalmente perdió la cabeza?

ㅤㅤㅤㅤ99.99% 𝗹𝘃𝘀ㅤㅤ! 罪 ¡ㅤㅤ𝗃𝗂𝖼𝗁𝖾𝗇ㅤDonde viven las historias. Descúbrelo ahora