Sombras de Venganza

Sombras en la Oscuridad

Capítulo 5: Sombras en la Oscuridad

La gala continuaba en pleno apogeo, un desfile de elegancia y poder, mientras Jungkook y Taehyung intercambiaban palabras cargadas de tensión. A medida que la noche avanzaba, la atmósfera se tornaba cada vez más densa, como si las sombras en el salón se extendieran para atrapar a aquellos que se atrevían a cruzar la línea entre el bien y el mal.

Mientras la música suave resonaba en el fondo, Jungkook tomó un sorbo de su copa, su mirada fija en Taehyung, quien parecía ser un enigma en medio del bullicio. Taehyung no era el tipo de persona que simplemente desaparecía en la multitud; había algo en su porte, en su forma de hablar que lo hacía destacar, y Jungkook se encontraba intrigado, aunque sabía que debía mantenerse alerta. En su mundo, la curiosidad podía ser tanto una debilidad como una fortaleza.

-La curiosidad puede ser peligrosa, Taehyung

Djo Jungkook, su tono grave y calculador, mientras sus ojos se mantenían fijos en él

-Especialmente en un lugar como este.

Taehyung sonrió, pero su corazón latía con fuerza. Era consciente del riesgo que estaba asumiendo al acercarse tanto a Jungkook, el hombre que representaba todo lo que había perdido. Sin embargo, la venganza era un motor poderoso, y no podía dejar que el miedo lo detuviera.

-Lo sé, pero a veces, el peligro es lo que hace que la vida valga la pena

Respondió Taehyung, intentando sonar más confiado de lo que realmente se sentía.

La risa helada de Jungkook resonó en sus oídos, y una pequeña parte de él se preguntó si esa vida llena de sombras y secretos era realmente lo que quería. Pero cuando recordó la imagen de su padre, esa duda se desvaneció rápidamente.

-¿Qué te trae a la ciudad, realmente?

Preguntó Jungkook, acercándose un poco más, casi como si se acercara a un animal salvaje, listo para atacar o huir en un instante

-No creo que seas un simple curioso.

Taehyung sabía que la respuesta debía ser convincente. Después de todo, Jungkook no era un hombre que confiara fácilmente. Había aprendido a leer a las personas, a descifrar sus intenciones antes de que ellas mismas lo hicieran.

-Vine por negocios, pero estoy aprendiendo que en este mundo, los negocios y las conexiones son inseparables

Dijo Taehyung, manteniendo la mirada de Jungkook sin titubear

-Y parece que tú eres un hombre que tiene mucho que ofrecer.

La observación no pasó desapercibida para Jungkook. Sus labios se curvaron en una sonrisa sardónica, como si se divirtiera con el juego que ambos estaban jugando.

-Interesante forma de verlo. La mayoría de la gente aquí viene buscando una oportunidad, pero tú... tú pareces tener un plan.

Jungkook disfrutaba del desafío que representaba Taehyung. Había algo audaz en su postura, una chispa que le recordaba a él mismo en su juventud, cuando también soñaba con derribar a aquellos que le habían hecho daño. Pero a medida que se adentraba en el mundo del crimen, esos sueños se transformaron en una fría realidad de ambición y sacrificio.

-Mi vida ha estado marcada por la pérdida. No tengo tiempo para juegos, Jungkook

Respondió Taehyung, apretando los dientes mientras las memorias de su padre lo abrumaban

-Y no voy a dejar que la oportunidad se me escape.

-¿Qué tipo de oportunidad?

Inquirió Jungkook, aunque sabía que la respuesta no sería simple. Los hombres como él nunca se conformaban con nada menos que el control total.