Sombras de Venganza

En la Mira del Enemigo

Capitulo con escenas 🔞

Capítulo 13: En la Mira del Enemigo

La noche había caído sobre la ciudad, y con ella el silencio envolvía cada esquina del lujoso ático de Jungkook. Taehyung se encontraba sentado en la sala, absorto en sus pensamientos. Desde que Taeyang le había dado la orden de enamorar a Jungkook, algo en su interior había comenzado a tambalearse. La idea de manipular los sentimientos de alguien que, en el fondo, parecía tan vulnerable como peligroso, le provocaba una mezcla de confusión y culpa que no estaba preparado para enfrentar.

Apenas unos minutos después, Jungkook salió de su habitación, observándolo en silencio por unos instantes. Se le acercó con esa naturalidad que solo él podía mostrar, sin rastro de la frialdad habitual de un mafioso temido. Ese lado casi gentil era lo que hacía tambalear el plan de Taehyung; parecía mostrarle una parte de sí mismo que nadie más podía ver.

-¿Qué haces ahí tan pensativo?

Preguntó Jungkook, sentándose a su lado con una ligera sonrisa.

Taehyung lo miró de reojo, intentando poner en orden sus pensamientos. No podía darse el lujo de caer en una ilusión, pero al mismo tiempo, había algo magnético en la presencia de Jungkook que le hacía difícil recordar sus intenciones iniciales.

-Nada, solo... pensaba en cómo has cambiado en este tiempo

Dijo Taehyung suavemente, sin saber si hablaba solo para sí o para el mafioso junto a él.

Jungkook arqueó una ceja, intrigado por la insinuación. Se inclinó hacia él, sus ojos brillando con una intensidad oscura.

-¿Crees que he cambiado por ti, Taehyung?

La pregunta hizo que el corazón de Taehyung latiera descontrolado, pero no dejó que su expresión lo delatara. Sin embargo, ese leve titubeo fue suficiente para que Jungkook se diera cuenta de que había logrado tocar algo profundo en él.

Sin previo aviso, Jungkook lo tomó por la cintura y lo atrajo hacia él. Taehyung intentó controlar su respiración, pero el contacto de las manos firmes de Jungkook y su proximidad lo descolocaban más de lo que estaba dispuesto a admitir.

-Quizá... tú también has cambiado

Musitó Jungkook, apenas rozando los labios de Taehyung en un beso cargado de tensión, como si ambos estuvieran jugando con fuego.

Taehyung, atrapado en ese momento, se permitió por un instante olvidar sus intenciones. Cerró los ojos y dejó que el beso profundizara, sintiendo cómo el deseo y la pasión se mezclaban, nublando su mente. El plan de venganza y la frialdad que Taeyang le había inculcado parecían desvanecerse con cada roce, como si Jungkook tuviera el poder de desmantelar sus barreras una a una.

Cuando finalmente se separaron, ambos se miraron en silencio, respirando con dificultad. En la mirada de Jungkook había una mezcla de vulnerabilidad y deseo, una expresión que hizo que Taehyung se diera cuenta de lo mucho que le estaba afectando todo esto.

Jungkook, sin despegar la mirada de él, deslizó sus manos por el rostro de Taehyung, como si estuviera observando cada detalle, grabándolo en su memoria.

-Quiero que te quedes a mi lado

Dijo Jungkook con una voz apenas audible, pero cargada de intensidad.

Taehyung sintió que su pecho se comprimía. No podía permitirse esos sentimientos, pero la sinceridad en los ojos de Jungkook le hacía difícil resistirse. Desvió la mirada, recordando la promesa que le había hecho a Taeyang, el hombre que lo había criado y entrenado para esta venganza.