Sombras de Venganza

El Juego de la Venganza

Capítulo 21: El Juego de la Venganza

Jungkook se detuvo frente a la puerta de la sala donde tenía a Taehyung cautivo, la sonrisa burlona aún en su rostro. El eco de sus pasos resonaba en la oscuridad mientras se acercaba, cada paso alimentando la rabia y el deseo de venganza que ardían en su interior. Era hora de hacer que Taehyung pagara por todo.

Empujó la puerta con fuerza, el sonido reverberante anunciando su llegada. La habitación estaba oscura, iluminada solo por una tenue luz que se filtraba por una ventana. Taehyung estaba sentado en una silla, todavía atado, con una mirada desafiante que parecía decir que no se dejaría doblegar tan fácilmente.

-¿Ya has pensado en lo que te espera, Taehyung?

Preguntó Jungkook, su voz un susurro lleno de veneno.

-Lo que hagas no importa

Respondió Taehyung, aunque su voz traicionaba un leve temblor

-No puedes romperme.

Jungkook avanzó, acercándose lentamente, disfrutando del temor que comenzaba a filtrarse en los ojos de Taehyung. Sin previo aviso, levantó la mano y abofeteó a Taehyung con toda su fuerza. El sonido resonó en la habitación como un trueno, y Taehyung se sacudió, sorprendido por la brutalidad del golpe.

-¿No puedes romperte? Vamos a ver

Dijo Jungkook, su voz transformándose en un tono amenazante

-Estoy aquí para hacerte sufrir. Para que sientas lo que es estar completamente a merced de alguien más.

Con un movimiento rápido, Jungkook se agachó y recogió un trozo de metal afilado del suelo. La luz reflejaba en el acero, revelando su intención. Taehyung lo observó con los ojos muy abiertos, sintiendo el escalofrío recorrer su espalda.

-¿Tienes miedo, Taehyung?

Preguntó Jungkook, acercándose aún más, disfrutando de la tensión en el aire.

-No

Respondió Taehyung, aunque su tono era menos seguro esta vez.

Jungkook sonrió, saboreando la mezcla de desafío y temor en la expresión de Taehyung. Con movimientos precisos, se acercó a él, dejando que el filo del metal roza su piel. Taehyung inhaló bruscamente, pero mantuvo la mirada fija en Jungkook, como si su vida dependiera de no mostrar debilidad.

-Esto es solo el principio

Murmuró Jungkook, deslizando el metal por el brazo de Taehyung, dejando una línea roja que comenzaba a sangrar.

—-Eres un monstruo

Dijo Taehyung, su voz temblando, pero la rabia brillaba en sus ojos.

-Soy lo que tú hiciste de mí

Replicó Jungkook, sintiendo cómo la adrenalina se acumulaba en su interior. La violencia era una forma de catarsis para él; cada corte, cada golpe, era un paso hacia la liberación de su rabia acumulada.

Jungkook se alejó un poco, disfrutando del espectáculo de su propia creación. Taehyung, atado y vulnerable, no podía hacer nada más que mirar mientras Jungkook se movía a su alrededor, preparándose para el siguiente golpe.

-¿Sabes?

Dijo  Jungkook, deteniéndose a su lado

-He pensado mucho en lo que haré contigo. Quiero que entiendas cada momento de este sufrimiento. Quiero que sientas que no hay escape, que no hay redención.