Sombras de Venganza

Entre Sombras y Susurros

Capítulo 11: Entre Sombras y Susurros

La relación entre Jungkook y Taehyung se volvía cada vez más complicada. Aunque Jungkook se había acostumbrado a mantener la distancia y la frialdad hacia cualquiera que intentara acercarse a él, había algo en Taehyung que lograba romper esas barreras. Sin embargo, Jungkook no sospechaba que detrás de esa amistad que florecía en medio del caos, se ocultaba una verdad devastadora.

Esa mañana, Jungkook decidió invitar a Taehyung a su gimnasio privado. La rutina de entrenar juntos era una excusa para pasar tiempo a solas, sin las miradas inquisitivas de sus amigos o los constantes recordatorios del mundo criminal que ambos habitaban. Aunque Jungkook era reservado, disfrutaba de la compañía de Taehyung, quien parecía entenderlo en formas que ni siquiera sus más cercanos lograban.

Cuando Taehyung llegó al gimnasio, lo encontró practicando con los puños en una bolsa de boxeo. La intensidad en los golpes de Jungkook mostraba algo más que un simple entrenamiento físico; parecía que cada golpe liberaba algo oscuro, una carga que llevaba dentro.

-No sabía que tenías tanto en la cabeza

Comentó Taehyung, intentando disimular su interés por los pensamientos de Jungkook.

-Hay muchas cosas que no sabes de mí, Taehyung

Respondió Jungkook, sin mirarlo, concentrado en el ritmo de sus golpes.

-Es mejor que así sea.

Taehyung tragó saliva. Aunque Jungkook no lo sabía, Taehyung estaba más familiarizado con sus secretos de lo que él podía imaginar. La misión de venganza que había aceptado desde que Taeyang le confesó la verdad de la muerte de su padre lo mantenía enfocado, pero cada vez que miraba a Jungkook, un nuevo sentimiento de duda lo embargaba.

A pesar de ello, Taehyung seguía determinado. Él mismo se había jurado que Jungkook pagaría por lo que su familia le había hecho, que lo vería caer. Pero las miradas de Jungkook y los momentos compartidos lo hacían replantearse sus sentimientos. ¿Era posible que se estuviera enamorando del hijo de su mayor enemigo?

Jungkook notó el cambio en la expresión de Taehyung y se acercó, bajando la intensidad de su entrenamiento.

-¿Estás bien? Hoy pareces... diferente

Comentó , limpiándose el sudor y observando a Taehyung con una mirada preocupada.

-Sí, solo... recordaba cosas

Respondió Taehyung, esquivando la pregunta con una sonrisa nerviosa.

Antes de que pudieran continuar la conversación, Namjoon y Yoongi entraron en el gimnasio. La presencia de los dos amigos rompió la tensión, y el ambiente volvió a volverse más relajado, casi casual. Namjoon sonrió al verlos juntos.

-Parece que alguien ha hecho nuevos amigos

Bromeó Namjoon, mirando a Taehyung con una mezcla de curiosidad y precaución.

-Pero no olvides que el mundo de Jungkook no es para cualquiera.

Taehyung mantuvo su compostura, consciente de la desconfianza que algunos amigos de Jungkook sentían hacia él. Yoongi, en particular, le lanzó una mirada fría y calculadora, como si intentara descifrarlo.

-No te preocupes, Namjoon. Estoy aquí porque quiero

Respondió Taehyung, manteniendo una expresión neutral. Pero en su interior, las palabras de Namjoon se sentían como una advertencia. Sabía que la mafia de Jungkook no perdonaba traiciones, y que acercarse demasiado a él lo ponía en riesgo.