Sombras de Venganza

Enredados en la Oscuridad

Capítulo 15: Enredados en la Oscuridad

Taehyung se había convertido en una constante en la vida de Jungkook, y mientras pasaban más tiempo juntos, era cada vez más difícil separar sus sentimientos de su misión. Lo que inicialmente había comenzado como una estrategia para ganarse la confianza del hijo del hombre que destruyó su vida se había convertido en algo más complicado, algo que él mismo no comprendía del todo.

Cada día que pasaba al lado de Jungkook, Taehyung se sentía más perdido en sus propias emociones. Su objetivo inicial se diluía con cada mirada, con cada roce, y aunque intentaba convencerse de que solo era parte de su plan, una pequeña chispa de duda comenzaba a arder en su interior.

Una noche, mientras ambos se encontraban en el ático de uno de los bares clandestinos de Jungkook, lejos de las miradas de sus hombres, la tensión entre ellos era palpable. Habían compartido una botella de whisky, pero la intensidad en el ambiente iba mucho más allá de la bebida. Jungkook miraba a Taehyung con una mezcla de curiosidad y algo más oscuro, algo que Taehyung no podía identificar, pero que lo hacía sentir vulnerable.

-¿Por qué siempre pareces tan... distante, Taehyung?

Preguntó Jungkook, rompiendo el silencio, sus ojos oscuros fijos en él.

Taehyung tomó un trago largo antes de responder, intentando ganar tiempo para calmar el torbellino en su mente. Sabía que cualquier respuesta errada podía poner su plan en riesgo, y que cualquier muestra de flaqueza podría hacerlo perder el control sobre la situación. Sin embargo, las palabras de Jungkook le habían golpeado de una forma inesperada, despertando algo en su interior que hasta entonces había intentado ignorar.

-No soy bueno mostrando mis emociones, eso es todo

Respondió  Taehyung, mirando hacia la ventana, evitando la intensidad en los ojos de Jungkook.

Pero Jungkook no se conformó con esa respuesta. Se acercó un paso más, acortando la distancia entre ambos, haciendo que Taehyung sintiera la presión de su presencia. Esa cercanía lo ponía nervioso, pero al mismo tiempo despertaba en él una atracción que lo aturdía, dejándolo al borde de romper su propio control.

-¿Entonces qué haces aquí?

Susurró Jungkook, inclinándose hasta que sus labios estaban apenas a unos centímetros de los de Taehyung

-¿Qué buscas realmente?

Taehyung tragó con dificultad, sintiendo cómo su corazón latía con fuerza. Sabía que no podía permitirse caer en esa trampa, no podía permitirse olvidar la razón por la que estaba allí, pero la atracción era demasiado intensa, y su determinación comenzaba a tambalearse.

-Quizás busco algo que ni siquiera yo entiendo...

Susurró , sin apartar la mirada de Jungkook.

Antes de que pudiera procesar lo que estaba haciendo, sintió los labios de Jungkook sobre los suyos, firmes y decididos, como si no hubiera marcha atrás. La intensidad del beso lo envolvió, borrando cualquier rastro de lógica o resistencia. Las manos de Jungkook recorrieron su espalda, acercándolo aún más, mientras Taehyung sentía cómo se iba perdiendo en la pasión, olvidando por un momento la misión que había jurado cumplir.

Sin decir una palabra, Jungkook lo guió hacia el sofá que había en el centro del ático. Los dos cayeron sobre él, y Taehyung sintió cómo las manos de Jungkook exploraban su piel con una intensidad abrumadora. Sus cuerpos se unieron en una danza de deseo y pasión, como si ambos buscaran algo más allá de ellos mismos, algo que los hacía sentir vivos.