XXI

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–Ah, cariño, no pensé que estarías aquí – dijo el mayor, saliendo de la ducha con apenas una toalla en la cintura.

–Explícate. – habló el menor, mostrando el chat con Suzi.

El multighoul sintió un escalofrió por su columna. No porque sea algo malo, sino porque el menor se notaba realmente serio. La situación no se pondría buena.

–S-son solo unas conversaciones, nada relevante, y, ¿cómo es que abriste mi celular?

–Eso no importa. Y, ¿por qué hablan de esto? Se conocen apenas dos días, recuerdo que tu tardaste un año en tenerme confianza. – recalcó.

–Uh...no lo sé, cariño, ¿a qué vamos con todo esto? – preguntó con un escalofrió recorriendo su espina dorsal, como esas veces en las que dices algo y unos momentos después procesas exactamente lo que dijiste.

–Acaso tuvimos esa relación de confianza dos días después de que nos conocimos? No. A eso voy con esto. – decía mientras se levantaba de la cama, junto con el cinturón.

–Cariño, no podemos regresar en el tiempo. – decía con un notable nerviosismo.

–Ya lo sé – hablo con autoridad – siéntate – demando, señalando con la mirada el sofá doble que se encontraba cerca del lugar.

El mayor acato la orden del menor – No sé qué vallas a hacer, pero por lo menos déjame cambiarme, amor.

–No necesitas cambiarte para esto – con cuidado, amarró las manos del mayor atrás de él.

El menor empezó a masajear lentamente el miembro del mayor sobre el bóxer, mientras este soltaba suspiros y jadeos por las acciones que realizaba su pareja.

Realmente, Sodo no sabía el por qué estaba haciendo esto. Solo eran unas cuantas conversaciones con una chica, a la que acababa de conocer, que estaban fuera de lugar...ok, probablemente, en la mente de Sodo tenía algo de sentido, pero en realidad fue solo un impulso que rápidamente escaló y del que se iba a aprovechar. Nunca supo bien lo que sucedió entre Aether y Swiss, valla, no sabe quién se la metió a quien, pero estaba casi seguro que a su pareja le había tocado ser el pasivo. Buen momento para averiguarlo.

–Dime, cariño, cuando te acostaste con Aether ¿A quién le tocó ser el pasivo? ¿A ti? - pregunto en un torno burlón, mientras su pareja desviaba la mirada y le contestaba afirmativamente.

El menor se sentó en su regazo, con una pierna de cada lado, posando su trasero en la formada erección de su mayor, haciendo círculos sobre esta, provocando al mayor.

–A que va esa pregunta? - soltó el mayor rápidamente.

–Prométeme que no hablaras así con nadie y no te meteré el vibrador. - hablo el contrario con un semblante serio.

–Lo prometo - dijo el moreno después de pasar saliva.

–Además, bloquéala.

–Que? Cariño, pero-

–Bloquéala, se dónde escondiste los juguetes, no me des razones para ir por ellos. - dijo, dándole el celular con el chat de la ghoullette, la cual apenas le había mandado un mensaje.

Esto hizo que Sodo tuviera una idea. Tomo el celular y saco el pene de Swiss de debajo de sus bóxeres, masajeando la punta con su pulgar fuertemente, lo que provoco un espasmo en el mayor, soltando varios gemidos y jadeos roncos, erizando la piel del causante de estos. De inmediato, presiono el botón de mandar audio, poniendo el celular entre él y su pareja.

–Dime cariño, ¿Qué le querías decir a Suzi? – sonrió el menor.

–Y-yo? Eras tú, ahh~ - soltó un gemido, pues su pareja había apretado su miembro. – S-sodo...no hagas eso – murmuro al mencionado.

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⏰ Última actualización: 5 days ago ⏰

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Todo por un "impulso".. [Swiss x Sodo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora