ᥫ᭡. 𝗷𝗶𝗵𝗮𝗻 ᵎ
⋆.˚🦋༘⋆ ❝Jeonghan es un principe tritón condenado a casarse con una princesa sirena, pero no desea eso, él quiere salir del mar, quiere andar y correr como un humano, quiere enamorarse de un humano y cuando menos se lo...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— Lo sé — fueron las palabras del mayor al escucharlo, y llevó su mano al vientre ajeno para acariciarlo con suavidad.
Jeonghan, al escucharlo, se sorprendió muchísimo. No se imaginó en ningún momento que Joshua lo supiera. Quizás Mingyu se lo había contado todo, o quizás él siempre supo que Jeonghan y Cheonsa eran la misma persona. Había muchas ideas pasando por su mente, pero sin duda había una clara: quería estar con Joshua. Estaba completamente enamorado de él, y aún no le había confesado sus sentimientos. ¿A qué estaría esperando? Su amor por Joshua era un amor imposible. Tenían que seguir viéndose de aquella forma tan pura y sincera como lo hacían, viéndose por la mañana y por la noche, y pensando el uno en el otro durante todo el día. Ahora iba a tener un bebé, la cosa cambiaba. Joshua no iba a dejarlo solo bajo ningún concepto. Joshua quería cuidar de Jeonghan y de su bebé, y mientras tanto, Jeonghan no hacía más que estar estresado, pero Joshua le ayudaría y le protegería. No quería que le ocurriera nada malo.
— ¿Lo sabes? — preguntó, mirando al mayor.
— Sí. — asintió lentamente con su cabeza y dejó un beso en la frente ajena. — Recuerdo perfectamente la noche en la que te hice mío y yo pensando que eras alérgico a la lluvia. — rió divertido mirándolo con mucho cariño.
— Hyung... — murmuró, suspirando. — Somos de mundos diferentes. — agachó su cabeza preocupado.
— Eso no me impedirá cuidarte. — le levantó la cabeza con mucho cuidado. — Voy a cuidarte a ti y a nuestro bebé. Estaré aquí para ustedes. — dejó un tierno beso en los labios ajenos con suavidad.
Tras separarse del beso, Jeonghan abrazó con fuerza al mayor, apoyando su cabeza en el hombro ajeno, mientras movía su cola lentamente, disfrutando de la compañía mutua, quedando en completo silencio. Jeonghan sentía paz cuando estaba con Joshua, su corazón se aliviaba, se olvidaba de todo lo malo y disfrutaba al máximo. Disfrutaba cada segundo que estaba con él, porque cada segundo para él valía oro. Su corazón se enloquecía, sentía cómo golpeaba en su pecho con fuerza, de esa forma en la que solo late cuando ves al amor de tu vida. Jeonghan sentía eso con Joshua, sentía que era el amor de su vida, quería estar el resto de su vida al lado de Joshua.
Le costó mucho trabajo separarse del mayor, no quería hacerlo, quería quedarse así para el resto de su vida, pero, por desgracia, debía volver al palacio. Tenía que calmar la furia de su padre y estar con su madre. Su madre se estaba muriendo y le necesitaba.
— Tengo que cuidar de mi madre. — le dijo, totalmente dolido.
— Ve y cuídala, quédate con ella. — le dijo con cariño, besando la frente ajena. — Ella te necesita, pero ten cuidado con el bebé, por favor. — le miró atentamente, acariciando su cabello.
— Lo tendré. — asintió con la cabeza varias veces. — Volveré esta noche.
Se despidieron finalmente, y Jeonghan dio un pequeño saltito en el agua, perdiéndose en la profundidad del océano para volver al palacio. Lo tenía claro, iba a contarle todo a su madre. Ella se merecía saber la verdad más que nadie y sabía que le apoyaría, porque siempre le había protegido de su padre.