Capítulo 115.

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El semblante de los enamorados sin ser interrumpidos, los llevaban de regreso a la cabaña, pasando un tiempo de calidad juntos como el resto en su mundo no existieran. Siendo especialmente las mañanas en las que Namjoon quien con libertad no se ha separado de su majestad, completamente atento a cualquier irregular del otro maravilloso día, con ello conociendo más de su amado rey, el demonio quien ha pasado lo largo de la mañana.

− ¿Habrá una posibilidad que su majestad este libre el día de mañana?

−Me temo que el aumento de trabajo con estos días libres traiga todo menos mi libertad, puedes disfrutarme en lo que queda en este día.

−Sí tan solo el día de hoy fuera eterno.

−No digas eso, Namjoon. Existirá futuro con días igual a este, después de la tragedia viene la paz, una que espero compartir el resto de mi inmortalidad contigo.

− ¿Es una declaración en contra del destino, mi rey? Que rebelde de su parte.

−Es un deseo, no quiero enfurecer el Destino, aunque no hay forma que o haga ahora −Dice Jin recolectando unas bonitas flores de su jardín, para llevar adentro−. Me siento feliz junto a mi vinculo, y mi reino se encuentra en jubilo con la última alianza.

−Te entiendo, cuando ahora eres parte de la razón de mi felicidad. −Namjoon acerca su mano a la cintura pequeña, aunque antes de sostenerlo siente un escalofrió del rey− ¿Qué pasa Jin? ¿No te as recuperado? Usare de nuevo mi magia.

−No es eso, me tomaste un poco desapercibido. Me acostumbro a esta cercanía...

−Oh era eso...

−Sí, perdóname.

Pensando Jin que ha arruinado el momento por un simple rose, el empuje que siente por parte de Namjoon lo hace caer sobre la cuesta del pastizal, cayendo en un suelo suave quien cae encima suyo es Namjoon abrazando a Jin y moviéndolo en todas partes, con una sonrisa que vale oro y el arcoíris en sus ojos, en el que Jin es testigo.

− ¡No hay nada que perdonar! Te acostumbraras de lo más rápido de lo que piensas, no dudes porque es también nuevo para mí. ¿Está bien? Confiemos en nuestro vinculo, todo a su tiempo.

−Lo dices. ¿A pesar de lo que sucedió el otro día? –Discrimina Jin, viendo al menor− A pesar del tiempo y tus títulos, sigues siendo una criatura de menor inmortalidad Namjoon, no pareces cambiar.

−Es inevitable, estando contigo.

−Namjoon, por favor...

−Amor mio, mi rey. Eres mi inmortalidad, todas las criaturas a tu alrededor hablan de tu belleza, de tu poder y el encanto que llevas dentro. Siempre será un misterio como el Destino termino uniéndote a mí. Estaremos toda nuestra inmortalidad juntos, yo te lo prometo.

Con la ternura que podría expresar a Namjoon, deja a Jin con unos ojos cristalinos por el amor hacia su cazador arcoíris, un beso que se dan estando reincorporados sobre el pasto, es un incentivo de nuevo Namjoon al manipular sin querer la magia, con ello el pasto debajo suyo que crece tan suave y en un verde vivió, y las flores que no han dejado de florecer, tales y como le gusta a Jin.

−No puedo vivir sin tu presencia, está en la magia que emerge en mi corazón, eres mi alegría y mi amor. ¿Qué le has hecho al rey de Cromática, Namjoon? El es feliz, de tanto amarte por el resto de mi inmortalidad.

Besando ahora las palmas de sus manos del moreno, Namjoon lo único que hacía es suspirar con sus palabras, levantando la comisura de Jin para ver su tranquilo semblante, se sentía encantado en alegría. Es como la que ha duraría muy poco sin el destino dejar de concluir su profecía, es por eso que la sonrisa se vuelve un poco cruda, besando solo la frente de Jin.

Vinculados [🌈] Namjin. ¡TERMINADA!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora