Cóseme ©

CAPITULO 15

ZAIDA

- Voy a por bebidas, ¿Quieres? - me levanto

- Claro, trae para todas

Asiento y entro a la cocina. Saco de la nevera una botella de Coca-Cola, abro el armario para coger los vasos. Pongo una cara de disgusto al ver el estante de arriba lleno de estos y tan lejos de mi. Alzó mi brazo para alcanzarlos sin resultado alguno, muero mi labio como muestra de poder conseguirlo al volver intentarlo pero siento unas manos sujetarme la cintura y alzarme hasta llegar al estante. Me sobresalto

- Siento asustarte - susurra en mi oído

Trago saliva

- Qu. . . ¿Qué haces? - me giro

Su mirada , dios

- Tenemos que hablar Zaida - sus ojos captan los míos

- S-sobre ¿Que? - intento apartar la mirada de la suya

- Sobre lo de ayer

Se acerca más a mi. El pulso se me acelera, mi respiración aumenta por segundos

- Dani. . . Yo - me corta

- Shh , escucha - acerca su dedo a mi boca en signo de silencio

- ¿El que? - hablo sin respiración

Joder, esta demasiado cerca

- Tu corazón - haze una pausa - late muy fuerte - se acerca más a mi

No me da tiempo a responder porque

Me besa

Me besa otra vez

Agarra mi cadera con sus manos mientras le sigo el beso

No puedo creerlo ¡Le estoy besando!

Pero ¿Que estoy haciendo?

Nos separamos por falta de oxígeno

Pega su frente a la mía

- ¿Que me estás haciendo Zaida? - siento que cierra los ojos

Tiene la respiración acelerada

¿Y ahora que hago?

- Dani. . . no podemos - aparto sus manos de mi cuerpo y me separo de el - No puedo - sus ojos no transmiten nada

Agarro las bebidas como puedo y salgo al jardín

- ¿Porque tardabas tanto mujer? - salta Lucía

- Lo siento - fuerzo una sonrisa - no encontraba la bandeja

- Anda ya - rieron todos

[...]

Las chicas se fueron a casa de Rebeca.
Estoy recogiendo las cosas del jardín y siento mi móvil sonar

Llamada Mamá

- Zaida cariño - tras su voz se escucha la voz de Lucas, lo cual me responde a mi incertidumbre - nos vamos a quedar a dormir en casa de unos amigos de tu padre - muerdo mi mejilla - llegaremos mañana por la tarde, hay dinero en la cocina os quiero

- Esta bien mamá, yo a ti también

Cuelga

Suspiro

- ¡Leire!

- ¡En el salón! - me responde

Voy al salón , esta sentada en el sofá con los gemelos

- Mamá ha llamado, dice que no viene a casa a dormir que llega mañana por la tarde

- Oh entonces os quedáis a dormir ¿verdad? - mira a los gemelos ilusionada

Abro los ojos como platos

- No. . . espera Leire - intento pararla
Aunque ya lo había dado por echo

Suspiro

- Bueno. . . yo no tengo hambre , hay dinero en la cocina - subo las escaleras sintiendo la mirada de Leire detrás de mi. Entro a mi baño, dirijo mi mirada al espejo, me quito la camiseta y apoyo los brazos en el lavabo. Miro mi cicatriz. Ocupa la mayoría de la trayectoria de mi pecho. Rozo la yema de mis dedos por ella. Suspiro con un sollozo y me pongo la camiseta rápido. Cierro los ojos ante mi reflejo. Ha pasado mucho tiempo. No llores Zaida , no lo hagas
Abro los ojos de nuevo. Me pongo el pijama y me meto en la cama a dormir.