Sienna Marlowe solía tenerlo todo, una vida como Kook, el respeto de los Cameron y un futuro asegurado.
Pero cuando su padre desaparece, llevándose consigo su prestigio y sus secretos, todo cambió.
Su mundo, antes lleno de lujos, se desmoronó, y Sie...
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REVELACIONES
𓇼 🌊 🐚
Sienna había pasado toda la tarde encerrada en su habitación, sin hacer nada en particular, dejando que las horas se desvanecieran sin rumbo. Mientras su madre rondaba en algún lugar de la casa.
Aprovechó ese tiempo para darse una ducha y cambiarse de ropa, y mientras el cielo fuera oscurecía, su teléfono vibró con una llamada de Kiara.
Al contestar, escuchó a su amiga insistir en que pasarían a buscarla para ir al Chateau. Sienna se negó de inmediato, con una desgana que Kiara no dejó pasar desapercibida.
Kiara insistió, asegurándole que JJ no estaría allí, lo cual dejaba en claro que sabía perfectamente que había algo entre Sienna y él.
Kiara le insistió una y otra vez, asegurándole que solo estarían ella y Pope, y que todo sería más tranquilo sin la tensión palpable que había quedado entre ella y JJ.
Aunque Sienna intentó resistirse, las persistentes palabras de Kiara, que además le prometió que hablarían del "plan" para extraer el oro restante, lograron que finalmente cediera, aunque de mala gana.
Con el cabello todavía húmedo, bajó las escaleras lentamente, sujetándose el abrigo. Salió al porche, vestida con unos shorts y sandalias, sintiendo el aire frío de la noche, acariciar su piel.
Cuando levantó la vista, vio el coche con Kiara y Pope acercándose por el camino.
Sin decir nada, subió al vehículo y se acomodó en el asiento trasero, mirando por la ventana mientras se preparaba mentalmente para lo que le esperara en el Chateau.
El plan definitivo de recoger el oro que faltaba, lo llevarían a cabo cuando John B regresara.
Al parecer, él había salido de pesca con Ward, y aunque la situación le parecía extraña a Sienna, decidió no darle demasiada importancia.
—Mañana tengo la entrevista para la beca —les comentaba Pope, con un tono mezcla de nerviosismo y emoción.
—Concentrémonos en lo que importa ahora —le interrumpió Kiara, sin ocultar la impaciencia en su voz.
—Está bien —respondió Pope, resignado, aunque Sienna notó que los nervios no se le habían ido del todo.
—Saldrá todo bien, Pope —le dijo ella, intentando tranquilizarlo. Pope asintió, agradecido por sus palabras de apoyo.
—Volviendo al plan —continuó Pope, tratando de centrarse—. John B y JJ bajarán al pozo, y yo estaré aquí arriba, vigilando. Sienna, tú y Sarah os quedaréis fuera, listas para cargar el oro en cuanto suba. ¿Lo tenéis claro?
