Dicen que llorar sana, que sacar a través de tus lágrimas
todo ese dolor que tienes reprimido te libera el alma.
Lloro. Lloro. Lloro.
Paso noches enteras llorándote, y nada cambia. Nada mejora. Todo sigue igual, porque llorar ni me ha sanado ni te ha traído de vuelta.
Quizá solo debo aprender a vivir con el dolor que dejó tu ausencia.
Quizá algún día, mis lágrimas encuentren su propósito, y se conviertan en el agua que nutre el jardín de mi alma, permitiéndome florecer de nuevo, aunque no sea a tu lado.
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Postdata DEJARÁS DE DOLER
SpiritualESTE LIBRO ES PARA TI SI... * Sientes que no podrás seguir adelante sin esa persona. * Te rompieron el corazón y no sabes cómo unir las piezas. * Tuviste que irte, cuando lo que más querías era quedarte. * Te cuesta respirar y no haces más que llora...