Cápsula de amor propio #8

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PUEDES MORIR MAÑANA.

A veces olvidamos lo efímero de nuestra existencia. Estamos tan inmersos en nuestras rutinas y preocupaciones que pasamos por alto una verdad fundamental: hoy estamos aquí, pero mañana es incierto. Si el mañana no llegara, ¿cómo desearías haber vivido tu último día en este mundo?

Imagina que el reloj marca el final de tu tiempo. ¿Qué recuerdos te gustaría que te acompañaran? ¿Te gustaría recordar un día lleno de tristeza y miedos, o uno en el que hayas celebrado cada momento y vivido plenamente? En momentos de dolor, puede ser fácil quedar atrapado en la tristeza, y más cuando alguien que alguna vez fue importante en nuestra vida decide irse, dejando un vacío.

Pero pregúntate: ¿Vale la pena gastar tus últimos segundos en alguien que ha elegido alejarse y vivir su vida sin pensar en ti? El tiempo es un recurso precioso, y cada minuto cuenta. En lugar de permitir que los recuerdos dolorosos y las personas que ya no están definan tu existencia, elige enfocarte en lo que te hace sentir verdaderamente viva.

La vida no es una garantía, es una serie de momentos fugaces que deben ser vividos al máximo. Cada día es una oportunidad para buscar la felicidad, para amar, para reír y para crear recuerdos que valgan la pena. No permitas que el miedo al futuro o el dolor del pasado te impidan disfrutar del presente.

Recuerda: si hoy es tu último día, haz que cuente, y no dejes que el tiempo se te escape en preocupaciones innecesarias o en la tristeza por aquellos que se han ido.

Postdata DEJARÁS DE DOLERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora