Capítulo 3: Una cara de zorro

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Fu Siming fue arrastrado por el líder del escuadrón Song y otro líder del escuadrón de la escuela cercana para ir al supermercado a comprar cosas para la reunión social de esta noche. No quería ir, pero fue arrastrado por el líder del escuadrón, quien dijo que tenía un auto y que era más conveniente usar un auto.

Los tres llegaron al supermercado, pero antes de entrar, el líder del escuadrón Yao de la escuela cercana se acercó a saludar a la pequeña.

La niña llevaba un pañuelo rojo que le cubría casi toda la cara, salvo los ojos. Los miró sin preguntar quiénes eran.

Cuando se bajó la bufanda y le sonrió al líder del escuadrón Yao, sus ojos se curvaron y sonrió como un zorro.

Fu Siming, junto con Song Qi, observaron desde lejos cómo el líder del escuadrón Yao la invitaba repetidamente a unirse a la reunión.

Jiang Tong regresó a casa con los ingredientes. Ya no pensaba demasiado y tal vez se debió a unas palabras con el líder del escuadrón. Su estado de ánimo también mejoró mucho.

Puso los ingredientes en el refrigerador y los organizó. Luego recibió un mensaje de WeChat del líder del escuadrón Yao. Alquilaron un bar de juegos de mesa cerca de la escuela y él dijo que llegarían alrededor de las 6:00 de la tarde.

A las seis en punto, Jiang Tong se vistió. Miró su teléfono antes de salir, pero no había ningún mensaje de texto.

El bar de juegos de mesa tenía dos pisos y habían alquilado todo el segundo piso. Cuando Jiang Tong llegó, casi todos los demás ya habían llegado. Había mucha gente que no conocía. Saludó a la representante de la clase, pero no vio a Song Jiajia, así que fue a sentarse con una chica que conocía en la misma clase.

Rara vez veían a Jiang Tong participar en este tipo de actividades grupales y era más raro que se maquillara. La miraban constantemente, la saludaban y la elogiaban por su hermoso maquillaje.

Jiang Tong los saludó con cierta timidez. No sabía qué hacer en medio de esa reunión y, como nadie le hablaba, se comió los bocadillos que había en la mesa.

En el segundo piso había micrófonos y televisores, y la persona a cargo estaba hablando con el dueño de la tienda para instalar el televisor. Jiang Tong sintió calor después de estar sentada un rato, así que se levantó y se quitó la chaqueta de plumas. Llevaba un suéter holgado de cuello redondo y un par de jeans ajustados. Era un poco conservador y también era su atuendo escolar habitual.

Después de instalar el televisor, los representantes de las dos clases comenzaron a organizar a todos para jugar juntos.

Jiang Tong siguió a sus compañeros de clase a su alrededor, aplaudiendo cuando debía aplaudir y riendo cuando debía reír. Pero no esperaba que, después de un rato, los chicos trajeran un montón de cerveza.

Todos los compañeros de clase que conocía levantaron sus latas para chocarlas. Ella no pudo negarse, así que se armó de valor y levantó la suya junto con ellos.

Al cabo de un rato, el segundo piso se volvió ruidoso por la bebida y los juegos.

Jiang Tong observó cómo los estudiantes se reunían lentamente en grupos más pequeños. La líder del escuadrón Yao incluso comenzó a cantar con el micrófono. Sonrió y se levantó para ir al baño. Bebía muy poco y, después de sentarse y beber dos latas de cerveza, quiso ir al baño.

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