MISTER

Capítulo 4: ¿Dónde estás?

9:37 de la noche.

Jiang Tong rechazó la invitación del extraño muchacho por tercera vez. Se levantó y fue al baño por tercera vez esa noche.

Se paró frente al lavabo, se lavó las manos y pensó en irse. Era muy tarde y tenía miedo de que el metro dejara de funcionar más tarde.

Sacudió las manos y salió del baño para buscar su chaqueta de plumas. Después de ponérsela, pensó en ello y decidió despedirse del líder del escuadrón Yao.

Las luces principales se habían apagado hace dos horas, dejando solo unas pocas luces tenues. Miró a su alrededor, pero no vio dónde estaba el líder del escuadrón Yao. Suspirando, planeó enviarle un mensaje de WeChat.

Sacó el teléfono y, en cuanto se encendió la pantalla, vio un mensaje de texto y una llamada perdida. Todos eran de Fu Yucheng. Uno era de hace dos minutos y el otro de hace un momento.

[¿Dónde estás?]

Desbloqueó su teléfono y quiso llamarlo. Justo después de hacer clic en su información de contacto, recibió su llamada.

Ella contestó y se lo puso al oído. Después de eso, se dio cuenta de que había un poco de ruido allí. Tomó la bolsa que había traído consigo y bajó corriendo las escaleras.

"¿Dónde estás? Hay mucho ruido".

Jiang Tong bajó al primer piso. Cuando escuchó esas palabras de frustración en su teléfono celular, se paró en el primer piso, miró a su alrededor y respondió con sinceridad dónde estaba.

“¿Dónde estás?” ¿Me estás esperando?

No respondió a la pregunta: "¿Pasará un tiempo antes de que regreses?"

"Me voy ahora."

Hizo una pausa y pareció suspirar. "Le pediré a Xiao Zhao que te recoja, es muy tarde".

Jiang Tong dejó de hablar y simplemente estuvo de acuerdo.

Espera un momento, le pediré que te recoja.

Jiang Tong estuvo de acuerdo nuevamente, y cuando dijo que iba a colgar el teléfono, ella dijo: "Lo siento".

Fu Yucheng se sorprendió al oírlo y dijo riéndose: "¿Por qué lo lamentas? Es mi culpa por no decírtelo antes".

Al oír el "sí" amortiguado de Jiang Tong, dijo: "Está bien, le pediré a Xiao Zhao que lo recoja. Vuelve pronto".

A las 9:53 de la noche, Xiao Zhao se dirigió al bar de juegos de mesa. El coche se detuvo frente a la puerta. Aparcó el coche cerca y se bajó para buscar a Jiang Tong.

Jiang Tong se encontraba en el primer piso. Cuando vio a Xiao Zhao, inmediatamente abrió la puerta y salió. Le sonrió a Xiao Zhao un poco avergonzada. "Lamento haberte molestado".

Xiao Zhao sonrió. “Señorita Jiang, no hay problema. La llevaré de regreso”.

Caminaron juntos hasta donde estaba estacionado el auto.

Al mismo tiempo, a Fu Siming le empezó a doler la cabeza por el ruido del segundo piso. Tomó el encendedor de la mesa, se levantó y se dirigió a la pequeña terraza del segundo piso.

Todavía había nieve en la pequeña terraza. Abrió la puerta y salió a la nieve. Se apoyó en la barandilla de hierro, sacó su pitillera y se echó un cigarrillo en la mano. Encendió el cigarrillo con la cabeza gacha. Miró el cielo nocturno y exhaló. Cuando bajó la cabeza, vio a Jiang Tong, que vestía una chaqueta de plumas de color leche. Estaba subiendo a un coche cerca de la carretera. El coche arrancó rápidamente, las luces de la calle estaban tenues y la matrícula no se podía ver con claridad. Sacudió las cenizas y observó cómo se alejaba el todoterreno negro.

A las 10:08 de la noche, el coche se detuvo en la puerta de la comunidad y Jiang Tong se bajó del coche. Dijo que iba a comprar algunas cosas en la tienda de conveniencia que había en la puerta de la comunidad, agradeció a Xiao Zhao y se despidió con la mano.

Cuando llegó a casa, Fu Yucheng estaba sentado en el sofá sosteniendo el control remoto para cambiar de canal. Ya se había duchado y el pijama azul oscuro lo hacía lucir aún más digno.

Cuando la vio entrar por la puerta, se quitó las gafas y le hizo un gesto con la cabeza: “¿Saliste a jugar con tus compañeros de clase?”

Jiang Tong se inclinó para cambiarse los zapatos y dijo que sí. Era la primera vez que lo veía con gafas.

Fu Yucheng apagó el televisor, se levantó y se acercó a ella. Le frotó la cara con el dorso de la mano. “¿Por qué no dices nada?” Su voz era suave, como una pluma que le rascaba suavemente el corazón, haciendo que su corazón se acelerara.

—Hace mucho frío. —Retiró la mano y le acarició el rostro con la palma de la mano. Luego levantó su rostro para que lo mirara a los ojos.

Jiang Tong lo miró. “Señor Fu…”

Fu Yucheng la vio abrir los ojos, sus párpados estaban pintados con sombra de ojos brillante y él era el único en sus pupilas.

Él bajó la mano, sonrió y apartó un mechón de su cabello.

Jiang Tong sonrió. “Voy a lavarme, por favor, espera un momento”. Antes de irse, dijo: “Primero déjame prepararte un vaso de agua con limón”.

Fu Yucheng negó con la cabeza y dijo que no. La observó mientras se apresuraba a entrar en el dormitorio con su bolso y luego en el baño con su pijama. Al cabo de un rato se oyó el sonido del agua corriendo. Se quedó allí, apretando ligeramente los puños con las manos que tenía a los costados, y luego se soltó. Después de repetirlo varias veces, se detuvo y entró en el dormitorio.