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—Lo siento, ¿podrías repetir eso? —pregunta Mitsuya, tratando de darle sentido a la situación, suspiraste antes de mirarlo con una expresión tímida en tu rostro.
—¿Sabes qué tipo de chocolate le gusta a Draken? Ah, eso es lo que dijiste. Genial. Genial. Mitsuya finge que su corazón no se le hundió en el estómago.
¿Por qué tú , de entre todas las personas, preguntas por Draken? Mitsuya no está seguro de querer saber la respuesta.
—¿Hola? ¿Tierra a Taka? ¿Sigues ahí? —reíste, agitando una mano frente a su rostro, Mitsuya parece salir de su trance mientras parpadea con los labios fruncidos.
—Sí, prefiere el chocolate más oscuro —responde Mitsuya, intentando calcular cómo reaccionarías, pero tu expresión era difícil de interpretar—. Ya veo.
—Muy bien, ¡gracias, Takashi! —Y con eso, te giraste sobre tus talones y te fuiste, dejando a Mitsuya preguntándose de qué se trataba todo eso.
—
Si le preguntaras a Mitsuya cuándo empezó a gustarle, no tendría una respuesta definitiva, ya que para él, gustarle era algo de lo que se dio cuenta en el camino y no podía volver atrás, había caído demasiado bajo para volver a levantarse.
pero si le preguntaras a Mitsuya si cree que sientes lo mismo por él, diría que sí. O así es como habría respondido en el pasado porque ahora mismo, estaba en un estado de confusión sobre por qué seguías preguntando sobre Draken.
"¿Qué tipo de formas crees que le gustaría para su chocolate?" "No creo que le importe".
"¿Preferiría papel de regalo rojo o..." "No creo que ni siquiera lo mire mucho".
"¿Crees que al menos apreciaría el regalo?" "No lo sé."
Frunciste el ceño, no te gustaba lo cortantes que se estaban volviendo las respuestas de Mitsuya.
—¿Estás bien, Taka? —Excelente —murmura Mitsuya, luchando contra el impulso de rodarlos hacia atrás con fastidio.
Mitsuya es muy consciente de que no estaba actuando como él mismo, pero no pudo corregir su comportamiento porque durante las últimas dos horas que estuviste con él, todo lo que hablaron fue de Draken.
La púrpura nunca pensó que diría esto, pero está muy cerca de desarrollar algún tipo de resentimiento hacia su hermano jurado.
—No suenas bien, Taka, sabes que puedes hablar conmigo, ¿verdad? —Mitsuya asiente, volviendo a su boceto en el trabajo.
—Oh, ¿es un nuevo diseño? —Mitsuya asiente una vez más, sin apartar la vista de las líneas que estaba grabando en el papel.
"¿Cuál es la inspiración detrás de esto?" Mitsuya se congela en sus acciones. El motivo del vestido fue inspirado por ti. Por las cosas que te gustaban. Diablos, incluso tenía un cárdigan que fue diseñado para adaptarse a tus gustos en proceso, pero ni siquiera está seguro de si quería terminarlo, ¿de qué serviría su regalo cuando todo lo que preguntaste fue Draken, Draken, Draken ?
