Fragua y Acero

Soldados espirtuales.

SLASH
THUD

El corte de una espada rompió el silencio de la oscura noche en la ciudad de Orario. Un instante después, el sonido seco de algo cayendo al suelo resonó por todo el lugar.

"¡Mantengan la formación!"
De pie en medio de un caótico campo de batalla, Tsubaki gritó con fuerza. Su mirada fría se clavó en el cuerpo que acababa de cortar, mientras su larga katana aún goteaba sangre bajo la luz tenue de la luna.

"Tsubaki-sama." Llegando con rapidez al lado de Tsubaki, Julan el enano de armadura negra completa se inclinó respetuosamente.

"Julan, como esta la situación" Sin quitar su mirada de la intensa batalla, Tsubaki pregunto con un tono serio.

"Tsubaki-sama, hasta ahora todos los grupos han logrado mantener su posición. Aunque hemos sufrido algunas pérdidas, seguimos firmes."

El ceño de Tsubaki se frunció aún más al escuchar la mención de pérdidas, y su humor se tornó visiblemente más sombrío.

"¿Cómo está el grupo de contraataque? ¿Ya están listos para salir?" preguntó mientras avanzaba con pasos firmes entre el caos del campo de batalla.

Antes de que Julan pudiera responder, los ojos de Tsubaki detectaron un movimiento en el rabillo del ojo. Un hombre encapuchado, empuñando una daga, se dirigía hacia una enana con armadura, buscando tomarla desprevenida.

Sin perder tiempo, Tsubaki alzó su katana con precisión letal.

SLASH

El filo de su espada cortó al encapuchado en un movimiento fluido y rápido, su cuerpo cayendo inerte al suelo antes de que pudiera completar su ataque.

"¡Mantente alerta!" ordenó Tsubaki, dirigiendo su mirada a la enana, que la miró con una mezcla de asombro y alivio.

"¡S-Sí, Tsubaki-sama!" respondió rápidamente la enana, volviendo a su posición en la línea con renovada determinación.

Julan, que había presenciado la escena, continuó su informe mientras mantenía su hacha lista. "El grupo de contraataque está casi preparado. Solo están esperando que se reúnan más miembros de la facción oscura."

"Dile a Finn que aguantaré media hora más," respondió Tsubaki con voz firme, sus ojos analizando el campo de batalla como un halcón. "Si no ha atacado para entonces, retrocederé hacia ellos."

Julan asintió rápidamente. "¡Entendido, Tsubaki-sama! Me encargaré de transmitir el mensaje."

"Bien, retrocede y mantenme al tanto de todo," ordenó Tsubaki con un tono serio, girando su mirada hacia él.

"¡Sí, Tsubaki-sama!" respondió con firmeza. Acto seguido, el enano desapareció con una velocidad sorprendente para alguien de su pequeño tamaño.

Observando la partida de Julan, Tsubaki asintió con satisfacción. Como la tercera persona más fuerte de su familia, Julan, un recién ascendido a Nivel 4, era el encargado de supervisar a todos los grupos de defensa, una tarea que ella le había confiado personalmente.

Aunque Finn había asignado a alguien de su propia familia para desempeñar esa labor, Tsubaki sabía que la defensa de su hogar no era algo que pudiera dejar en manos de extraños, por muy competentes que fueran. En momentos de incertidumbre, ella confiaba plenamente solo en sus propios hermanos.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por un repentino estallido de magia que iluminó el cielo oscuro, seguido de un fuerte rugido que resonó en la distancia. Tsubaki giró su mirada hacia la fuente del sonido, su expresión endureciéndose.