Pherohudtunia (Harry Styles)

Trece

Trece

Las imágenes de mi dormitorio completamente destrozado , dan vueltas en mi mente , y por mucho que intento en deshacer tan horripilante escena , se me es imposible eliminarla de mi disco duro.

Papá insistió en que debían moverme a otro dormitorio pero decían que ya no hay dormitorios disponibles , lo cual es realmente imposible de creer. Se que es solo una excusa. ¡Por el amor de Dios! ¡Habían destruido mi maldito dormitorio! ¿Como es posible que no puedan hacer un cambio?

Estaba aterrada pero sin embargo quería regresar a mi dormitorio. Papá me obligo a quedarme en casa a dormir ayer , mientras él y mamá se encargaban de arreglar mi dormitorio y equiparlo con seguridad máxima.

No podía dejar de pensar en Harry , tenía que hablar con él , y mi paciencia estaba llegando a su límite. Quería verlo lo antes posible. Quería conocerlo. Quería compartir con él , este terrible suceso en mi vida. Tenía incluso un poco de miedo de admitirlo pero lo extraño demasiado. Extraño sus hermosas palabras estampadas en esas cartas.

-¡Cher! ¡Te estuve buscando ayer toda la tarde! ¿Estás bien? ¡Tus padres estaban en tu dormitorio! ¿Que sucedió? ¡Estaba todo destruido!

Me muevo en mi lugar incómoda , ante el bombardeo de palabras de parte de Cody. Él se me acerca con cierta preocupación dibujada en su rostro. Envuelve mi cuerpo en un fuerte abrazo , y yo cierro mis ojos ante su cálido toque. Sentía como si un enorme bálsamo hubiera sido derramado sobre mi.

-No estoy segura de quien fue. - Susurro aún con mis ojos cerrados. Tenía miedo de abrirlos , no quería derrumbarme en el medio de este pasillo.

Sus brazos me sujetan con fuerzas , pero no dura demasiado. Poco a poco él , deshace la cercanía y me veo obligada en abrir mis ojos , para entonces encontrarme con su penetrante mirada y con su ceño levemente fruncido.

-Eso es raro. ¿Conoces personas que quieran hacerte daño? - Cuestiona , y yo enseguida niego con mi cabeza. Definitivamente no.

-No soy de muchos amigos.

Una risa me asalta y él tuerce una sonrisa. Puedo verlo a la perfección , y mi piel enseguida se pone de gallina.

-¿Te cambiaron de dormitorio?

Puedo captar cierto miedo detrás de sus palabras pero decido ignorarlo. Yo estaba muy afectada con todo esto.

-Dijeron que no hay dormitorios disponibles.

-¡Eso es mierda! ¿Como es posible que hagan eso? ¡Esto puede ser muy peligroso!

El miedo ahora se apodera de mi , y mis manos tiemblan sin control. Él tenía razón , pero quizás ellos no regresarían. Lo más probable era alguien en busca de dinero , pero obviamente no encontraron. No tengo ni un solo billete.

Entonces la realidad me golpea. No tengo que preocuparme. Ellos no regresarán.

-Lo sé...

Soy interrumpida por un grito a mis espaldas , y enseguida creo saber de quien se trata.

-¡Cher!

Unas manos en mi cintura , me obligan a girarme sobre mis talones para entonces encontrarme con la alta figura de Heller. Él me sostiene contra su cuerpo , provocando que me estremezca un poco.

-Escuché lo de tu dormitorio...- Susurra , y aprieta sus manos a mi cintura. Intento escapar de su agarre pero él me sostiene con fuerzas , como si jamás quisiera que me aleje. -¿Estás bien? - Su mirada cubierta por sus conocidas gafas de Sol , ya no me sorprende , sino , me incómoda. Era demasiado raro.

-Si , Heller.

No es mi intención parecer arisca pero no puedo evitarlo. El suceso de mi dormitorio y su rara actitud con esas gafas de Sol. ¡Vamos! ¿Quien no se sentiría incómodo?

No digo que él no sea agradable , es un chico increíble pero muy extraño.

-Oh...- dirige su mirada a mis espaldas , y en instantes puedo sentir la tensión a nuestro alrededor.

-Tengo que ir a mi dormitorio.

Susurro , y viendo a mis sandalias , avanzo por el largo pasillo sin molestarme en ver hacia mis espaldas.

Estoy siendo paranoica y necesito un descanso.

...

Una gran bocanada de aire se escabulle de mis labios y deslizo una mano por mi rostro. Había tomado una larga siesta. Desvío mi mirada al reloj en mi mesa de noche , y salto de la cama sorprendida.

En cualquier momento amanece. Dormi un día completo. ¡Jesús!

Me deshago de toda prenda sucia sobre mi cuerpo ,y luego de una ducha caliente , nuevamente observo el reloj , pero algo capta mi atención y maldigo en voz baja.

Olvide por completo dejar las flores para Harry.

Volteo hacia el reloj y luego hacia la puerta. Tenía unos minutos para colocar el ramo , y esperar su carta. Me pregunto si sabe sobre el problema con mi dormitorio. ¿Estará preocupado por mi? Espero que me extrañe tanto como yo a él.

Me muevo echa un manojo de nervios hasta la puerta , pero detengo mi siguiente acción cuando la alta figura de Heller aparece delante de mi. Me estremezco un poco en mi lugar , y la sorpresa cae sobre mi como un balde de agua helada , pero tal parece que no soy la única sorprendida.

Él me observa a través de sus lentes de sol , y lo siguiente que capta mi atención , provoca que ese nudo molesto se instale en mi garganta.

Traía en sus manos una carta.

Las lágrimas comienzan a picar en mis ojos , y retrocedo sin poder creer lo que mi mente me grita. Un sollozo se escabulle de mis labios y enseguida deslizo una mano para cubrir mi boca.

-¿Eres tu?

El dolor pero sin embargo también el rencor se apodera también de mi.

Él me utilizo todo este tiempo.

-Cher , tenemos que hablar.