LS (DB) 5

Capítulo 41 parte 2 (100%)

Al regresar del viaje a la playa, todos volvieron a sus actividades habituales. Itt también cuidó del niño y lo llevó a la tienda de accesorios para automóviles. Después de todo, aún cuenta con la ayuda de su madre para cuidar a Nong Aob. Itt también aprovechó cuando el niño dormía para encargarse de las tareas en el taller.

Cuando Nong Aob cumplió 7 meses, ya podía gatear, así que Itt lo mantuvo en un corralito. Después de todo, el espacio en casa es bastante amplio. Sin embargo, también le permitía arrastrarse y jugar dentro de la casa.

— Uh-huh. — Nong abrazaba el borde del corralito, balanceando el mordedor en su mano de un lado a otro, mordiéndolo de vez en cuando porque ya le habían salido dos dientes inferiores.

Cuando le salieron los primeros dientes, el niño estuvo bastante inquieto. Pero Day e Itt lograron manejarlo porque habían aprendido del médico cómo hacerlo.

— ¡Pa, Pa! — gritó Nong Aob al ver a Itt acercándose a él.

— Oye, Nong Aob. Es hora de una siesta. — dijo Itt con una sonrisa. Acababa de regresar de lavar los biberones. Aunque en casa había una empleada que se encargaba de la limpieza, las tareas relacionadas con el cuidado del niño las manejaba personalmente Itt.

— ¡Au, au! — se escuchó el ladrido de Saimai, quien asomó la cara por el borde del corralito.

Nong Aob soltó el mordedor y gateó rápidamente hacia Saimai.

— ¡Ah, ah… oooh! — exclamó Nong Aob, esforzándose por agarrarse al corralito para ponerse de pie.

— Tienes mucha prisa, hijo. — bromeó Itt, acercándose para sujetarlo si llegaba a caerse de espaldas.

— Saimai, él necesita dormir. Ven a jugar con mi hijo más tarde. — dijo Itt antes de recoger al niño y colocarlo en el centro del corralito, en la zona con almohadillas para dormir. Saimai movía la cabeza de un lado a otro, haciendo que Itt sonriera sin poder evitarlo. Pero Saimai entendió la situación y, al darse cuenta de que el niño necesitaba descansar, se recostó frente a la puerta de cristal, sin molestar a Itt en absoluto.

— Ae… — murmuró Nong Aob, intentando sentarse porque aún quería jugar.

— ¿Quieres un poco de leche? — Itt tomó un biberón y se lo mostró. En cuanto Nong Aob lo vio, se recostó de inmediato, levantando las manos para alcanzarlo.

— ¡Ma, ma! — volvió a gritar Nong Aob. Itt rió en voz baja antes de entregarle el biberón. El pequeño podía sostenerlo solo, pero Itt permaneció a su lado para ayudarlo y hacerle compañía.

El pequeño Aob tomaba la leche haciendo ruidos fuertes ocasionales con la garganta. La casa estaba completamente en silencio, ya que solo estaban Itt y Nong Aob, mientras Day estaba trabajando.

Hoy, Itt decidió no llevar a su hijo a la tienda porque parecía que iba a llover. Pensó que sería mejor quedarse en casa. Nick llegaría por la tarde para acompañarlo.

Cuando terminó el biberón, Nong Aob comenzó a adormecerse. Itt retiró lentamente el biberón, y el niño se giró de lado hacia él. Itt le dio unas palmaditas suaves en la espalda hasta que el pequeño se quedó profundamente dormido.

Cuando vio que Nong Aob estaba completamente dormido, lo cubrió con una manta y salió del corralito. Se sentó en el gran sofá cerca del corralito y tomó su celular para revisar cosas. La mayor parte del tiempo buscaba información en línea relacionada con su hijo.

¡Ding Dong!

El timbre de la casa sonó. Itt miró rápidamente hacia su hijo y vio que Nong Aob seguía dormido. Se apresuró a salir para mirar hacia la entrada de la casa, pero se detuvo al ver que era Phath.