Cuando el timbre sonó, mi madre nos ordenó a Mirla y a mí a que abriéramos la puerta. Ella corrió hacia la habitación a cambiarse, pues aun seguía en pijama. Había estado toda la tarde obligándonos a limpiar todo, y comprobando que la casa quedara en perfecto estado.
Mirla la observó subir las escaleras y luego se giró hacia mí.
- ¿Por qué está tan loca hoy?
-Lo está todos los días, solo que tú no te das cuenta. -Respondí.
Antes de girar el picaporte, respiré hondo, preparándome hacia lo que vendría a continuación.
Al principio, vi solo a mi tía, y casi suspiro de alivio, pero luego ella se dio vuelta y exclamó:
- Stancito querido, apúrate.
Incliné mi cabeza hacia fuera, y pude verlo. Llevaba al menos tres maletas que me impedían observar su rostro.
- ¿Acaso va a mudarse aquí? - Susurró Mirla. Negué con la cabeza.
Mi tía era así, exagerada hasta el punto de ser insoportable. Solía hacer de una tontería un problema, y siempre criticaba a todo cuanto le rodeaba.
- ¡Marie, querida!- Me abrazó fuerte y le di palmadas en la espalda hasta que comencé a sentir que me asfixiaba y me aparté. Tomó mis hombros y comenzó a inspeccionarme. - Te ves muy...- Sonreí adivinando que su respuesta iba a ser "linda". - Enana.
Un momento, ¿Qué?
Nunca me habían llamado así antes. De hecho, siempre había estado orgullosa de mi altura.
-... y veo que aún no te has desarrollado del todo. -Continuó mirando hacia mis bubis.
Ya estaba empezando a ponerme colorada e iba a contestarle, pero su atención se centro en Mirla, que estaba a mi lado intentando no reírse.
-¿Y tú quien eres?- Preguntó observándola con desprecio.
-Mi nombre es Mirla, mucho gusto-. Estiró la mano pero mi tía no se la tomo, por lo que lentamente la puso detrás de su espalda.
- ¿Y qué haces aquí?
Mi amiga me miró pidiendo ayuda.
- Ella va a quedarse en mi casa por unos días. - Respondí secamente. No me gustaba el modo con el que le estaba hablando.
-Déjame adivinar: mi hermana. - Sacudió la cabeza con desaprobación. Siempre tuvo la costumbre de traer gente de la calle.
Mirla hizo una mueca de dolor y supe que si seguía hablando comenzaría a enfadarme.
-Tía, ¿por qué no pasas a la cocina? - Sugerí intentando aliviar el ambiente. - Mi madre bajara en un segundo.
Ella asintió e inmediatamente se fue. Desde aquí podía escuchar como criticaba la casa. Aliviada comencé a cerrar la puerta, pero entonces, alguien se interpuso.
Ya lo había olvidado, mi primo.
En cuanto dejó las maletas en el suelo, pude verlo con claridad, y me sorprendí. Había cambiado, y mucho. Ya no era más ese niño gordinflón de hace unos años. Ahora, se había convertido en alguien robusto, que media al menos dos metros. Lo único que aun no había cambiado era su rostro, que continuaba viéndose como el de un bebé. Si bien tenía acné, no era tanto como para dar asco, tal como sucedía con Elias. Su cabello también seguía siendo el de antes, pues se notaba que mi tía aun seguía cortándoselo, y se veía casi ridículo.
-Ho-ola -. Tartamudeó poniéndose colorado.
-Hola-. Contesté de manera cortante. - Pasa hacia la cocina, tu madre está allí.
![](https://img.wattpad.com/cover/28378728-288-k9095.jpg)
ESTÁS LEYENDO
STALKER LOVE
Mystery / Thriller"-Tan hermosa.-Era la voz más escalofriante que había escuchado en toda mi vida. Sonaba distorsionada, como si fuera a través de una máquina. -¿Quién eres?.-Nuevamente se calló. - Vamos, ¡contesta!-La persona al otro lado se rió.- Su risa era aun má...