1. With You

Helado

—¿Dónde estamos? —preguntó nuevamente.

—No te molestes —reí—. No te lo diré.

La feria que se organizaba cerca de el campo, era una de las más impresionantes de todo Londres, ésta estaba tan lejana a la ciudad que muy pocos la conocían a la perfección, yo en cambio sabía de su existencia gracias a que ahí fue dónde estuve mayor parte de mi infancia. Fue el primer lugar dónde quería ir en el día, pero no sola, quería llevar conmigo a Loki, quería sacarlo de su pequeña prisión.

Estábamos a unos metros de llegar cuando se detuvo en seco, su rostro no dejaba de moverse, su expresión de asombro me dio la señal de que debíamos avanzar y lo más rápido posible. Cuando cruzábamos entre la multitud él parecía ansioso, no molesto pero algo pensativo. No me sentí en alerta pero sí trataba de evitar el camino infestado de personas.

Las luces de colores iluminaban su rostro con intensidad, eran como un tapiz en blanco y cada luz rosada le daba un aire más fresco y libertador. Sus ojos se movían de un lado a otro observando los juegos mecánicos, a la gente sonriendo y los niños consentidos que iban y venían a velocidad máxima, jugando, siendo libres.

Llegamos al centro de ésta, la gente sonreía y niños corrían, él trataba de no tocar a nadie, incluso en el momento en que un niño se acercó a él con una gran sonrisa en los labios infestados de helado de chocolate, él sonrió, estaba divertido y frotó la cabeza del niño, éste feliz corrió de vuelta por dónde había llegado.

Mi subconsciente actuó sorprendido pues jamás había visto a ese hombre actuar de manera tan cariñosa con un niño. Era una persona dura de tratar, una persona con un odio tan fuerte que me era difícil tratarlo a veces. Su carácter era lo que más destacaba sobre todo lo demás y me hacía salir de mis casillas, pero siempre sabía cómo controlarse.

—Estos lugares —suspiró—, me asombraban tanto cuando era niño.

Lancé una sonrisa de asombro y me acerqué a él para escucharle mejor, en ese punto ya estaba susurrando debido a que estaba tan distraído observando las atracciones desde el lugar dónde estábamos.

—¿De verdad? —elevé las cejas—, ¿cuantos milenios atrás estuviste aquí?

—Realmente no recuerdo el tiempo —se encogió de hombros—; era un niño.

¿Realmente conocía esto? No podía sentirme más aliviada de que al menos conociera un lugar cómo éstos, no estaba iniciando desde cero. Me decidí por tomar su mano, ésta vez no me rechazó, acepto cubrir su mano con la mía, sonreí para mí al sentir lo suave y cálida que era... Además de lo perfecta que encajaba.

Caminamos entre la gente tomados de la mano, no podía evitar sentirme la mujer más afortunada del lugar, ya que todas cruzaban la mirada con Loki y sonreían pero el odio las invadía al ver mi mano junto a la suya, por supuesto sonreía gloriosa, me sentía una Diosa entre ellas. No podía negar que mi compañía era el centro de atención.

—¿Qué es tan divertido? —preguntó. Me quedé quieta y bajé la mirada.

—En realidad nada —ladeé la cabeza.

Caminamos frente a todas las atracciones. Podía sentir como su ser emanaba felicidad y por unos minutos había olvidado todos los cuentos de hadas a dónde pertenecía, por unos minutos había olvidado el dolor y la pena, solamente se centraba en la vida que tenía por delante. Como algo tan insignificante podía hacer un cambio inmenso en alguien como él, que era tan desagradable a veces.

Loki pasó sus dedos entre su cabello, ahora en verdad era largo, lo observé por unos segundos hasta que su mirada se encontró con la mía. Él sonrió y de pronto nada importó y lo supe, había caído en sus engaños, había logrado saltar el muro y conquistar mi cabeza. ¡Estás actuando mal! — Pensé.