16.
Aun no era ni el medio día, y todo el país estaba despierto. Al tanto de las noticias locales. Mientras yo, estaba a solas en la habitación de Alfred, quien había ido a darse una ducha, yo mientras tanto, esperaba que los chicos me trajesen mis cosas al palacio. Ya que ahora debería vivir en este lugar. Es muy grande para mí, pero creo que con el tiempo me podré acostumbrar, después de todo, debe haber mucho en que entretenerse en este lugar, siendo la reina, además que aquella biblioteca es hermosa, debo visitarla nuevamente apenas tenga la oportunidad.
No sé en qué minuto sucedió, lo que sí sé, es que fue muy rápido. Noru, Ioan y los chicos, llegaron al palacio en un dos por tres, les dejaron pasar, y trajeron la mayoría de mi ropa y mis cosas. Pude cambiarme en el cuarto de Alfred tras darme una ducha corta. Luego vi que mi gatito estaba jugueteando con otro gato entre la ropa de cama de Al. Este sonrió al verme que estaba casi listo, me tomó de la mano y enérgicamente me guio escaleras abajo, luego doblamos por un largo pasillo a la derecha, donde había más escaleras, bajamos dos pisos y llegamos a un gran salón, donde había una larga mesa que ocupaba gran parte del espacio de este. La mesa era larga y angosta, estaba llena de deliciosos manjares y muy bien ornamentada. En la cabecera de esta mesa, se podía apreciar al Rey, quien con pocas ganas estaba tratando de mantenerse.
Alfred se acercó al monarca cuidadosamente, sin soltarme de la mano. El hombre nos pidió que tomemos asiento cerca de él, solo por esta vez. En un dos por tres, los sirvientes tomaron dos elegantes y lujosas sillas, y las colocaron a los costados de la punta de la mesa, para que nos sentemos al lado del Rey. Una vez que nos sirvieron la comida, el rey se aclaró la garganta para poder hablar.
–No me queda mucho tiempo de vida.
–¡Qué! –Dijimos ambos con Alfred al unísono
–El doctor me dijo que solo me quedaban tres meses, pero eso fue antes de caer en coma, solo debe quedarme ahora, un mes y medio. Lo siento chicos si se sienten presionados, pero este reino necesita tener alguien a cargo. Necesito que se casen lo antes posible, para poder ver a mi hijo usar la corona como rey antes de marcharme.
–No...No... ¡padre!
–Alfred, hijo, es lo mejor para todos. Luego de la boda y de la coronación, iré a pasar mis últimos días a la playa que tanto amo tu madre. No quisiera que me vieses sufrir, como viste sufrir a tu madre... y en cuanto a tu futuro reina, todo estará bien. Arthur, tienes mi bendición para casarte con mi hijo. Sé que serás un gran aporte tanto para el reino, como para el corazón de mi pequeño... aunque ya no esté tan pequeño.
–Descuide su majestad...- intenté decir algo- todo estará bien.
-Eso espero... Ustedes dos me han demostrado que, no les importan los obstáculos, en cuanto puedan estar juntos. Ustedes son el mejor ejemplo de amor puro y verdadero que he visto, incluso mejor que mi esposa y yo. Ambos nacieron con el propósito de complementarse el único con el otro, y llevar a este reino a la plenitud tan anhelada.
–Padre... ¿Y que haremos mientras tanto?
-Bien, no es mi intención entrometerme, pero ya deberían comenzar con los preparativos. Deben casarse, ojalá, dentro de la próxima semana. Y en cuanto a Arthur, no te preocupes por tu titulación, eso ya lo arreglamos. Será después de la boda y antes de la coronación.
–Gracias, gracias, gracias! – exclamaba Alfred abrazando fuertemente al Rey.
–No hay de qué. Terminen de comer, y luego veremos los preparativos en el salón de juntas familiares. No olvides hijo... ¡Es una boda, no un carnaval cirquero!
El rey se retiró educadamente a reposar. Alfred tomó mi mano sobre la mesa. Me preocupó un poco. Tenía su rostro serio, cosa que nunca solía hacer. Apreté su mano en señal de confianza, estaba seguro de que sus nervios por el matrimonio le carcomían interiormente, a decir verdad, no era el único. A demás que también me encontraba sumamente nervioso. No tanto por el hecho de que sea una boda, sino porque todo ha sido tan rápido, que tengo miedo que a futuro las cosas no resulten. Estoy enamorado de este gordo idiota, y a estas alturas, ya me cuesta imaginarme un mundo sin él.
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♤ Cardverse : Reino De Espadas S.XXI || UsUk ||
Fanfic❝Porque solo bastaba un encuentro para conectar nuestras almas perdidas en la oscuridad y juntos encontrar la anhelada luz para nuestro reino y nuestros corazones ❝ ♤♡◇♧━━━━━━━━━━━━━♤♡◇♧ Arthur Kirkland era un estudiante becado egresado de de la Re...