"When I look into your eyes
It's like watching the night sky
Or a beautiful sunrise
There's so much they hold"
I won't give up
By: Jason MrazDan abrió los ojos quince minutos antes de que su alarma sonara y se dio cuenta de que Phil seguía dormido a su lado. Se veía tan adorable y tranquilo; no quería despertarlo, quería seguir admirando al hermoso chico que estaba frente a él.
Apagó la alarma de su celular fijada para las 6:30 a.m. y se acercó más hacia el pelinegro para dejar un pequeño beso en sus labios haciendo que el chico despertara dedicándole una sonrisa que Dan no pudo evitar imitar.- Buenos días, novio mío. – Le susurró el castaño dándole otro beso.
- Buenos días, Dan. – Le contestó su novio con una sonrisa y devolviéndole el beso.
- Levántate, tenemos que ir a clase. – Daniel se levantó y le tendió la mano a Phil para que hiciera lo mismo. –Ve a tomar un baño, yo te espero aquí. – El chico obedeció y tomó ropa de su armario para dirigirse al baño.
Cuando regresó, fue el turno de Dan que se dirigió al baño no sin antes besar a su novio.
Amaba hacer eso. Tocar los labios de Philip era como tocar el mismísimo cielo; sus labios eran tan suaves y dulces que era imposible no besarlos cada vez que se daba la oportunidad.Cuando el castaño salió del baño, Phil los estaba esperando con su mochila en la mano.
- ¿Nos vamos?
Dan tomó su mochila y con ésta, la mano de su novio que se sonrojó ante el acto.
- Vamos, – Le susurró Daniel. – No pasa nada. – Dicho esto le dio un beso a sus manos entrelazadas y abrió la puerta de su habitación. A fuera estaban Pj y Chris esperándolos.
- Buenos días, gay Dan. – Saludo Chris. –Buenos días gay Phil. ¿Están gay-listos para ir a gay-sayunar?
- Cállate, Kendall. – El rizado le golpeó con su codo en las costillas a su amigo. – Veo que ya lo hicieron oficial, chicos; felicidades, me alegro por ustedes. Ahora, vamos a desayunar que muero de hambre.
Los cuatro amigos se dirigieron al comedor. Algunas personas miraban las manos entrelazadas de Dan y Phil, unas sonreían, otros los miraban con algo de desprecio; pero realmente no importaba, si la gente no podía aceptar el amor en todas sus formas, era problema de ellos.
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Los minutos parecían durar una eternidad en la clase de historia con el profesor Jeffers, un viejo que caminaba con más lentitud que un caracol y arrastraba las palabras.
Para la fortuna de Philip, su novio estaba a su lado y no se despegaba de él.
Una libreta se posó en frente de él; reconoció la letra de Dan al instante.
¡¡Philly!!
-Dan
¿Qué pasa, Dan?
-Phil
Estoy aburridooooo.
-Dan
Pon atención a la clase.
-PhilNo puedo con la distracción que está a mí lado.
-Dan
Aw, amo cuando te sonrojas, te ves aún más hermoso c:
-Dan