Nota: Si termina, denle replay a la canción c:
All the love. C
***Año 2030***
Dan bajó de su auto para sacar las compras que había hecho. Era un día hermoso; el sol brillaba en lo alto y el cielo estaba despejado; era el inicio del verano en Londres.
Abrió la puerta de su casa y un niño con cabello quebrado que le llegaba hasta los hombros y ojos marrones corrió a recibirlo.
- ¡Papi!- Gritó de alegría saltado a sus brazos. Por suerte, Daniel ya había bajado la bolsa de las compras.
- Hola, Erick.- Lo saludó revolviendo su cabello con su mano.- Vamos a dejar esto a la cocina, cariño.- Le dio una bolsa pequeña al niño y él tomó las demás.
- No podías esperar a cocinar hasta que yo llegara con lo que hacía falta, ¿cierto, Philly?- El ojiazul asomó su cabeza por la puerta de la cocina y sonrió al ver que su esposo ya estaba en casa.
- Hola, Dan. Yo también te extrañé.- Dijo fingiendo estar indignado. El castaño se acercó a él y lo tomó de la cintura para luego darle un beso en la mejilla.
- Sólo me fui dos horas, lindo.
- Aún así.- Hizo un puchero haciendo que el otro sonriera.
- Me casé con el perfecto, sin duda alguna.
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***Año 2022***
- ¿En serio debo usar corbata?- Se quejó Phil mientras su madre trataba de ayudarlo con su traje.
- Si quieres verte lindo para Dan, sí cariño.
- De acuerdo.- Bufó. Estaba muy nervioso. Aunque ya llevaba años con Daniel, esto se sentía distinto.
- Mi pequeño Philip ya es todo un hombre.- Parecía que su madre estaba a punto de romper en lágrimas.
- Mamá, no es para tanto; no llores.- Trató de consolarla.
- Es que no puedo creer que estés a punto de casarte con la persona que amas, Phil.- Se acercó a ella para abrazarla con fuerza.
- No llores porque se te correrá el maquillaje y no queremos eso, ¿cierto?
- Cierto.- Contestó apartándose del chico.- Iré a ver si todo está listo.- Dicho eso, salió de la habitación.
El ojiazul se dirigió al espejo más cercano y se vio de pies a cabeza. Estaba a punto de casarse con Dan. En tan sólo unas horas estaría casado con el amor de su vida. No pudo evitar sonreír.
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- No creí que Phil y yo tuviéramos tantos familiares o amigos.- Dan estaba entrando en pánico al ver la iglesia llena; no quería arruinar nada o equivocarse al momento de decir los botos.
- Tranquilo, cariño.- Lo calmó su madre, una mujer muy linda parecida a Dan.- Tú sólo concéntrate en Phil, ¿de acuerdo?
- Está bien.- Dio un último respiro antes de entrar a la capilla.
Todos los presentes se pusieron de pie cuando él apareció. Al principio, mantenía su mirada fija en el piso, pero una vez que la levantó, a la primera persona que vio fue a Philip que le sonreía como nunca le había sonreído en su vida. Se veía realmente feliz. Esto hacía a Daniel feliz.
Cuando él y su madre finalmente llegaron hasta su, por esos momentos, novio, todo se sentía en su lugar. Parecía un cuento de hadas.
Cada quien contaba con tres padrinos. Phil tenía a Tyler, Pj y a Troye; mientras que Dan tenía a Joe, Caspar y Chris. Ninguno de los ocho chicos había perdido el contacto incluso después de salir de la preparatoria. Era una amistad verdadera.
El padre hizo que todos tomaran asiento. Luego de esto, dio un par de plegarias antes de seguir a la parte de los anillos.
El hermano mayor de Phil, Martyn, se acercó para entregar los anillos a los chicos. El pelinegro tomó el que era para Daniel y se aclaró la garganta para hablar.
- Realmente nunca creí que me enamoraría de ti, Dan.- Comenzó a decir mirándolo a los ojos; el otro chico le sonreía como estúpido.- Incluso, cuando comencé a hacerlo, sentía que tú jamás sentirías lo mismo que yo, por lo cual me callé. Pero luego llegó ese día en el cumpleaños de Chris cuando te emborrachaste e hiciste que te besara; ese día supe que lo que sentía por ti era algo fuerte y que, probablemente, tú sentías lo mismo. El día que supe que mis sentimientos era correspondidos, sentía que estaba en alguna otra dimensión y mi corazón hizo esa cosa de voltearse de cabeza.- Tomó el anillo y lo colocó en la mano del castaño que ya estaba llorando.- Dan, mi amor, prometo amarte por todo lo que me resta de mis días e incluso más allá de la muerte lo seguiré haciendo. Prometo que a mi lado siempre te sentirás amado porque yo me haré cargo de eso. Este anillo es el símbolo material de mi promesa.
- Es tu turno de hablar, Daniel.- Avisó el sacerdote. El más alto tragó saliva y dejó de llorar... sólo un poco.
- Con ese discurso tan hermoso, el mío parecerá escrito por una niña de cinco años.- Dijo haciendo que los presentes rieran.- Philly, desde el momento en que te conocí supe que serías alguien importante en mi vida. Fuiste y eres la primera y única persona a la que tuve el privilegio de llamar "mejor amigo"; mi vida era un desastre hasta que tú apareciste en ella, lindo y no sabes lo agradecido que estoy por eso.- El ojiazul comenzaba a dejar caer lágrimas. Dan tomó el anillo y lo colocó en su dedo.- Es por ello que todos los días de mi existencia, mi único trabajo será hacerte feliz. Porque puedo tener un pésimo día, pero con tan sólo ver esa hermosa sonrisa en tu rostro, se convierte en un día bueno. Tú tienes esa magia sobre las persona, Philly; tienes la habilidad de convertir un día malo en uno estupendo y esa es una de las razones por las que te amo. Al ponerte este anillo, juro que te amaré todo lo que me sea posible. Te amaré hasta que duela, lindo.
Los invitados comenzaron a aplaudir, los padres de ambos chicos sonreían con orgullo y sus madres no dejaban de llorar.
- Ahora.- Comenzó el sacerdote y se volteó hacia el pelinegro.- Philip Michael Lester, ¿aceptas a Daniel James Howell como tu esposo para amarlo y respetarlo en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza hasta que la muerte los separe?
- ¡Claro que aceptó!
- Y tú, Daniel James Howell, ¿aceptas a Philip Michael Lester como tu esposo para amarlo y respetarlo en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza hasta que la muerte los separe?
- ¡Por supuesto!
-Ahora, por el poder que la Iglesia me concede, yo los declaro esposo y esposo.- Hizo una pausa esperando a los otros dos chicos.- Ya pueden besarse.- Los alentó.
Phil se acercó a Dan y lo tomó de la cintura para plantar un gran beso en sus labios. Todos los presentes se levantaron para aplaudir.
- Nuestro primer beso como esposos.- Susurró Daniel entre sus labios.
- El primero de muchos.
--FIN--
