Capítulo 20. Y Ahora, ¿Que Hago?

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Y ahí estaba yo, ante la confesión de Laura sumando la de Sara, La de Camilo,además mi mamá me queria obligar a casarme con un señor que recien conocía y añadiendo el hecho de que tenia un casi amorio secreto con mi chófer, ¿En que momento la vida de una adolescente de 17 años se vuelve así? ¿Habra mujeres que esten peor a mi edad? Espero que sí.

Mi cara estaba inexpresiva ante la confesión de Laura y ella me miraba expectante
-¿Como ocurrió? - creó que fue lo unico que podía decir o lo unico que salió de mi boca
-Pues....- medito- Todo empezó anoche, este chico me llamo y me dijo que que haría, en realidad no haría nada ya que no pensaba ir a la fiesta que hizo Carlos, el chico me dijo que si quería ir a comer con él y yo no había comido y tenia hambre asi que acepte, ya se que de entrada estuvo mal por que yo tengo novio pero yo no iba con mala intención, bueno el punto es que él me recogió en su carro y fuimos a cenar en un lugar super lindo y fino y comimos, charlamos, nos reímos y bueno, luego nos montamos nuevamente a su carro y me llevo a mi casa, mi error fue que llegamos a la casa y no me baje, me quede ahí hablando con él, creó que en el fondo queria que ocurriera, asi que nos reiamos y se me acerco y yo me acerque a él y pues solo...nos besamos - termino de contar todo, yo seguia allí sin expresarme en lo absoluto
-¿Solo se besaron? - si solo se habían besado creó que igual le diria a Sara y Camilo que dijeran la verdad
-Bueno...- ¡Ay mierda no! - solo llegamos hasta que el me quito la blusa, pero lo paré todo, no pude pensando en...Camilo- musito.

Okey esto es lo que tengo, Camilo y Sara se besaron ebrios, su ebriedad los llevo a terminarse acostando por ende es engaño doble a Laura, Por otro lado Laura engaño a Camilo, en su sano juicio, besando a otro chico y a pesar de las circunstancias no dejo que pasara a mayores, aun que eso en sí es malo, ¡Pfff! ¡Que vida!

-¿Sofía? ¿Sofía? ¿Me estas escuchando? - preguntó Laura algo asustada
- Sí, Claro - mentí en realidad los últimos minutos no había escuchado nada -Pero Repiteme igual - sonreí incómoda
-¿Le digo a Camilo? Ó ¿solo lo dejo pasar y ya?
-Pues...- ¡Carajo! ¿que hago? - No lo se Dejame pensarlo esta noche y mañana hablamos bien ¿Te parece?, ahora solo Diviértete.

Eran las 12 de la noche Laura, Camilo, Sara y el amigo de Sara se fueron Alejandro y yo nos quedariamos a dormir en el lugar, fui a la habitación, Alejandro se había ido por unas cosas que había dejando en el carro, Me quite la ropa quedando desnuda, me metí a la ducha, abrí el grifo y deje caer las gotas de agua sobre mi cuerpo, era refrescante y bastante relajante luego de un día tan pesado darse una ducha, ¿Como es posible que el día que quieres relajarte sulte tan poco satisfactorio?, en fin, no me quejo al fin y al cabo estuvo demasiado divertido y a la resaca ni la había sentido y ese era el punto.

Mi celular empezó a sonar mientras me bañaba, iba ir a contestar, pero no tenia mi toalla dentro del baño, Alejandro había salido asi que podia ir por el tranquilamente, asomé mi cabeza por la puerta de el baño, no había nadie así que saque mi cuerpo lentamente por si algo se presentaba, primero un pie luego otro, y asi mismo con mi brazos, una vez que estuve del todo fuera salí corriendo en puntillas, como si ayudara a que no entrara Nadie, y abrí rápidamente mi maleta, para sacar la toalla, mientras la sacaba oí el ruido de la perilla, La puerta se estaba abriendo.

Cuando por fin salí del baño, ya salí vestida, Alejandro estaba tumbado en la cama boca-arriba viendo televisión, me miro por unos segundos, sonrio y volvio a la Tv.
Me tire a su lado a ver televisión con él.
-Podías haberme dicho solamente que no entrara ¿Sabes? - dijo repentinamente, mire su mano vendada, sentí como me ponía roja.
-Lo se, lo lamento - respondí apenada- Es solo que no sabía que hacer fue un momento de desespero - y al final ni alcancé a contestar mi celular.

*flash back*

Escuché que la puerta, se abría entre en desespero, no había contestado mi celular, así que su sonido irritante no ayudaba en nada, por andar pensando en que hacer no me había puesto la toalla, así que en un movimiento rápido y poco pensado me tire contra la puerta, Alejandro, quien no entraba aún, se tambaleo y para no caer su mano, se sujeto de la puert la cuál se cerró al momento en el que la empuje, haciendo así, que Alejandro se machucara la mano.
*fin flashback*

Me sonroje apenada recordando lo ocurrido.

-¿Y bien? - pronunció Alejandro al fin.
-¿Que cosa? - pregunte
-¿Podemos hablar? -Preguntó
-Eso hacemos ¿No? - bromee, rio levemente
-No, Enserio - dijo más serio
-Yo lo digo enserio, estamos hablando - fastidie - de todas maneras ¿De que mas hablaríamos?
-De lo que pasó en la tarde - me recordó, con tantas cosas en la cabeza lo había olvidado.
-Oh- musite - no te preocupes, no pasa nada, tú eres...
-No enserio hay que hablar de ese tema - interrumpió, estaba más serio de lo normal.
Suspire, me senté y lo mire, el me imitó quedando en frente mio
-No hay que hablar de nada, tú lo dejaste claro - dije más firme de lo que pensé que lo haría - y yo también - seguí para calmar un poco la oración
-Si lo se, Pero aun estamos aquí los dos, en el mismo cuarto, en la misma cama, como si fuese normal hacerlo- su voz era exasperante, estaba irritado y algo dolido
-yo...Yo no de que decir- dije en voz baja - me gustas ¿sabes?, y es raro por que en todos mis 17 años jamás había sentido esto por alguien, apesar de que es una corta edad, mis amigas y amigos ya lo han experimentado todo, pero yo, bueno yo no, y probablemente Jamás lo haga y tú bien sabes por que- mi voz salio más melancólica de lo que esperaba
-Sofía me gustas, Me encantas,- posó su mano en mi mejilla - eres tan hermosa, tan tierna, tan tú, no le tienes miedo al que diran y si no fuera por tú madre, serias una mujer tan felíz y capaz de hacer lo que se le plazca sin importar nada - dijo con orgullo en su voz, pero no con orgullo de él, si no de mí.

- no quiero perderte - susurro.

Sentí como mis ojos se cristalizaban y sonreí, me sentí tan plena con sus palabras, se acerco a mi lentamente, nuestros rostros estaban a pocos centímetros y nuestras respiraciones se mezclaban y entonces me besó.














Gemi mientras me movía, el molesto sonido del celular me despertaba, estire mi mano hacia la mesa de noche buscándolo con los ojos cerrados y entonces lo sentí y lo cogí
-¿Alo? - dije somnolienta
-¿Sofía? - preguntó una voz del otro lado
-Si con ella - dije sin aliento
-¡Las clases ya van a iniciar!¿Donde estas? - carajo lo olvide por completo
-No voy a ir - respondí al fin - estoy enferma - mentí
-Si como no - aun no descubría quien era - hablamos después -susurro como si ya hubiese llegado un profesor
-okay - dije y colgué.

Abri mis ojos poco a poco, Alejandro se encontraba a mi lado, tenia sus labios entre abiertos, su rostro irradiaba paz, su pecho desnudo subia y bajaba, sus ojos poco a poco se empezaron a abrir, por instinto me acomode el cabello y me hice la dormida, sentí su mirada penetrante, justo antes de sentir sus suaves manos pasando delicadamente por mi rostro, abrí mis ojos lentamente como si me levantara apenas, lo primero que vieron mis ojos fue esa hermosa sonrisa que casi nunca le veía, me miro tiernamente y luego me dio un pequeño beso en los labios.

-Buenos Días hermosa - saludo.

Amor Prohibido (Cancelada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora