Caos en el tiempo (NOTQE 2)

Capítulo 32 Sacrificios 1/2

*Music On!!!

P.D Amo el soundtrack de Mystogan. Uno de mis favoritos de todo F.T ❤

POV NASHI

Mamá y E.N.D se miraron en silencio mientras el sonido de la lucha del gremio parecía alejarse.
El demonio que acababa de despertar era uno con la intención de acabar con cualquiera que se interpusiera en su camino con tal de cumplir los deseos de su amo. Y además, no nos reconocía a ninguno...

-Nashi, Haru, dejadnos a Lirya y a mí esto.-dijo mamá.

-¿Cómo que a Lyria y a ti?-preguntó Haru.

-Es algo difícil de explicar pero digamos que ahora mismo en este cuerpo hay dos almas. La de Lucy y la mía.

-¿Ahora quién está hablando es mamá o el ángel?-preguntó Haru confuso.-¡¿¿¡Y qué demonios hace un ángel en el cuerpo de mamá!??!

-Sus voces son algo diferentes así que las podrás diferenciar... pero ya te lo explicaré luego Haru.-dije mientras lo cogía del brazo.-Ahora hay que ponernos a salvo... esto se va a poner muy tenso.

Haru se negaba a irse pero cuando E.N.D se lanzó con todas sus fuerzas contra mamá y ella se protegió usando el alo protector entendió que esta era una situación crítica.

-Tiempo sin vernos ángel Lirya.-comentó E.N.D mientras placaba el escudo.

-Es una pena que nuestro reencuentro sea en una situación como esta.-contestó Lirya.-Tu alma se ha tornado oscura... Natsu.

Al escuchar ese nombre el demonio alzó su brazo y cubriendolo de llamas negras atravesó el alo protector que se rompió en cristales de luz dorada.
Mamá cayó al suelo y E.N.D se le empezó a acercar.

-¿Natsu?-preguntó el demonio.-¿Qué clase de insulto es ese? ¡¿Te atreves a insultar al demonio más fuerte de Zeref?!

E.N.D lanzó llamas negras contra mamá pero ella logró invocar un nuevo alo protector que mantuvo con sus dos manos mientras se resistía a caer al suelo.

POV LUCY

-Lucy, mi fuerza no durará para siempre.-dijo la voz de Lirya con pesar.

-Lo sé... el alo se debilita cada vez que lo usamos...-contesté.-Pero no hay otra forma... yo... yo no puedo lastimarlo...

Unas lágrimas surcaron mi rostro a la vez que un nuevo ataque de fuego negro atravesaba el alo y me mandó a volar hasta una gran piedra donde quedé recostada.

-¡Mamá!-gritaron Nashi y Haru.

-No puedo hacerlo...-murmuré al borde del llanto.-No puedo luchar contra  atsu.

-¡Pero Lucy! No puedes dejar que te mate... ¿qué pasará con tus hijos?

-De alguna manera también son tus hijos Lirya...-contesté.-No puedo luchar contra su padre...

-¡Pero si no haces algo será su padre el que te mate a ti! Entiendo lo que sientes... Sé lo que es enfrentarte cara a cara contra la persona que más amas en el mundo... Puedo sentir tu dolor, tu angustia y tu pánico... Pero Lucy... tú no-

Dejé de oír a Lyria en el momento en que E.N.D me tomó del cuello y me levantó tres palmos del suelo. Me estaba asfixiando y su agarre dolía.

-Eres el ángel que nación de un lirio así que debes morir. Esos son los deseos de Zeref sama.-dijo el demonio solemnemente mientras alzaba sus garras dispuesto a atravesarme el cuerpo.

-Nat..su.. no lo hagas...Te lo ruego.-musité mientras lloraba desesperada.

Pero justo cuando E.N.D iba a asestar el golpe final, algo o más bien alguien lo derribó y rodaron por el suelo dejandome atrás medio incosciente.
Miré sorprendida a E.N.D hincando las rodillas en el suelo y frente a él, un pequeño rubio de ojos verde jade brillantes, con dos diminutos cuernos en su alborotado cabello y escamas negras en sus brazos y rostro. En las manos unas pequeñas garras sobresalía al igual que dos colmillos de su boca.