Capitulo 5 (Parte II)

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Di un paso hacia adelante con la intención de acercarme a él. Pero me detuve al percatarme que un reflector que estaba en el techo se encendía iluminándolo. De pronto todas las personas que se encontraban en el lugar comenzaron a acercarse a él, como moscas a la miel. Chicos y chicas pasaban al lado mío empujándome y dándome codazos. Dejándome atrás.

−¿Qué sucede?

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Volteé a ver al Director. Continuaba detrás de su atril. Ahora más exaltado, pidiendo en voz baja a los iluminadores que hicieran mejor su trabajo. Atrás había quedado aquel Señor con voz dulce y cariñosa que me recibió el primer día. Ahora tenía frente a mí a otra persona, Que no paraba de gritar.

Levanto su dedo gordo, señalando hacia el frente, gritando como un niño después de encontrar su juguete.

−¡¡Ahí Esta!! ¡¡Ahí está, Manga de inútiles!!

Gritaba repetidas veces a los iluminadores para que hicieran bien su trabajo. Mientras el sacaba un pañuelo del bolsillo de su saco para secarse el sudor de su frente de lo alterado que estaba. Inspiro profundo y se acercó una vez más al micrófono para volver a hablar.

− ¡Joven Lynch ahí está! Quiero que le den un gran aplauso a Ross Lynch.. El hijo de uno de nuestros grandes benefactores MARK LYNCH!!!

Dijo emocionado.

Todos comenzaron a aplaudir y me uní a ellos acercándome a la multitud.

Era él?! Volví mi mirada aquel rubio, ahora tenía más reflectores sobre él, iluminándolo.

No podía creerlo, no quería creerlo, aquel chico que me ayudo aquella tarde bajo la lluvia, y esta mañana con Luka y que hace unos minutos estuvo al lado mío era el hijo de Mark Lynch!!

¿Por qué? Le pregunte quien era. Y se negó a decírmelo.

Ahora entiendo todo, eso buscaba de mí, esa era su magnífica intención. Burlarse de mí, hacerme quedar como una completa estúpida frente a todos.

Y lo peor de todo, es que lo logro.

Pase mi mano sobre mi rostro, secando aquella lágrima que amenazaba con salir. Sentía una opresión en mi pecho que me impedía respirar con normalidad. Me sentía horrible, solo quería salir de ahí. Miré hacia el frente tratando de buscar la salida. Y me encontré con sus ojos, esos ojos color ámbar estaban una vez más sobre mí.

Ahora que buscaba? Verificar si logro su objetivo?

−Pues sí, lo lograste ROSS LYNCH!− Dije por dentro.

Él solo desvío su mirada y sonrió como era de esperarse. Saludando a cada uno que se acercaba a él.

−No soy idiota, sabes. Sé quién es Mark Lynch...− Dije en un susurro.

Él ha sido como un padre para mí y para todos los chicos que aún continúan en el hogar. Año tras año venía a visitarnos, trayendo consigo juguetes y comida. Él es un hombre tan generoso y admirable. Siempre estaré agradecida a él por todo lo que ah echo por nosotros.

Por ello y más me negaba a creer que el Señor Lynch tuviera un hijo como él. Una basura como Ross Lynch!

Volví mi mirada sobre él, decidida a acercarme. Junte mis manos en un aplauso pasando entre medio de la gente. Era una celebridad, debía tratarlo como tal, como se merece.

Eso es lo que busca, lo que desea.

Camine hacia él, sin detenerme, sin bajar mi mirada ni por un segundo. Mientras él se encontraba aún parado frente a mí, pálido, con la mirada apagada.

Stuck on You ♥ Raura ♥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora