EPÍLOGO

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Epílogo.


Draxler cargaba a Alexa y la metía a la camioneta, Leo hablaba con Fev ─la conductora─ dándole instrucciones sobre lo que tenían que hacer. Boris abrazaba a Xiao despidiéndose.

Al parecer todos tenían a alguien excepto él. Aunque no debería estar pensando en eso. Sonrió en la oscuridad y el viento movió las ramas de un árbol cercano, como si la naturaleza se riera con él.

Alex entró a la camioneta y se sentó a esperar a sus acompañantes. Xiao conduciría y Leo sería su copiloto. De modo que nuevamente tendría un viaje solo en la parte de atrás. Iban en una Ford y todo estaba completamente cerrado, por lo que podían dormir tranquilos cuando lo quisiesen.

Sus dos amigos se subieron y dieron marcha. Fev y los demás lo hicieron rumbo al lado contrario. Aunque tenían radios para hablar, estos funcionarían solo en un cierto rango debido a la señal.

─No te despediste de mí, Alex ─dijo Fev.

Alex iba a mapear, pero recordó lo que había dicho Leo, así que sólo le contestó.

─Lo siento, Fev. Que tengan un buen viaje, a todos ustedes, Boris, Draxler, y tu Alexa.

Se había despedido sólo de Boris, ya que no tuvo la oportunidad de hacerlo con los demás. Boris era un tipo chistoso, no tenía la altura de un adulto, pero al estar calvo lo parecía, cosa que lo hacía ver gracioso. Se lo hizo saber, y lejos de molestarse, carcajeó.

─Hey, ¿Cuántos años tienes, viejo? ─había preguntado. Antes no usaba el "viejo" por qué le recordaba a Leo, pero ahora era distinto, hasta el humor le estaba regresando. Había sonreído más en los últimos días que en los últimos años.

─Tengo veinte, viejo.

─Pareces de 50, pero con la estatura de un jovencito ─se le quedó viendo y añadió─, viejo.

─Burlate, ¿sabes que es mejor eso a flippy?

─¿Flippy? ─había dicho confuso.

─Si, un anuncio antiguo de un delfín, flippy, flippy, el frentón ─dijo Boris cantando las últimas palabras.

Ambos habían reído. Conversó con Xiao, aunque ella iba a acompañarlo estaba cerca, pero fue algo diferente. Pues ella quería saber sobre sus viajes en el tiempo, pero Alex no quiso hablar de eso, por lo que pasó un momento muy incómodo con ella.

─Te contaré cuando estemos en FIELDS ─había dicho después de un largo rato.

Ella había sonreído muy alegre y después se fue a despedir a los demás.

A eso se había reducido ese día; Alegría.

Deseaba que aquello no terminara jamás, pero no podía dejarle nada al destino. A veces se le tenía que tomar por los cuernos y domarlo y eso haría junto a sus amigos. Y al hacerlo: Cambiarían la historia.




Guardianes del Tiempo: Desastre Temporal.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora