M5/6 Capítulo XXVII. ♡

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- Hey, Pug. ¿No vienes?

Caminé hacia lo chicos aún con ___ en la cabeza. ¿Por qué pensaba tanto en ella? No era la apuesta, no fue su comentario de hace un rato, tal vez eran sus ojos, su piel, su cabello, sus labios. Tal vez, solo talvez, era ella.

No, no, no. ¿Qué te pasa, Guilbert? No puedes pensar así de ___. Es una A-P-U-E-S-T-A. Recuerdalo.

Apuesta, el hecho de recordar eso hacia que se me revolviera el estomago. Pero no podía echarme para atrás, por nada del mundo me haría amigo de Reed ni aunque dependiera mi vida en ello.

Llegamos al salón de Música y el profesor aún no estaba, seguramente se le hizo tarde. Saqué un cuaderno y lo abrí en una hoja en blanco. Comencé a garabatear y a hacer figuras sin sentido por toda la hoja, quitaron el cuaderno de frente mío haciendo que rayara la mesa.

- ¿Qué te pasa, Dan?

- ¿Ésta es ___? -Preguntó analizando el papel- Dibujas bien, hermano.

No habia entendido a qué se refería con que dibujaba bien, hasta que me mostró la hoja y descubrí que parte del rostro de ___ estaba plasmado ahí.

- N-no sé qué de-decirte.

- No hace falta. Solo, no juegues con ella. Es obvio que es importante para ti. -Y se fue de mi lado.

"No juegues con ella"

Sus palabras rebotaron en mi cabeza como una pelota de ping pong en una raqueta. ¿Cómo podía no jugar con ella si estaba de por medio una apuesta? Puede ser que si me importara, que en el fondo, sintiera aprecio por ella.

No pude seguir debatiendo en mi mente ya que, precisamente ___ se dejó caer en la silla junto a mi. No entendía en porque de su acción.

Idiota, es tu compañera. Cierto.

- Lamento si Jey dijo algo que no debía -No recibí ni respuesta visual-. Linda, ¿Me escuchas?

Toqué su hombro y salto en el asiento. Fue entonces cuando vi los auriculares en sus oídos. Quitó uno y preguntó qué había dicho.

- Que ¿Qué te dijo Jey? -Resoplo.

- No te importa.

|Narra Rayita.| ♡

Hoffman no dejaba de hablar y yo ya quería deshacerme de la incómoda mirada de Jeydon sobre mi.

Definitivamente son amigos él y Guilbert.

Al fin cesó de su explicación de cationes y aniones y nos dejo salir para dirigirnos a nuestra siguiente y última clase del día.

Todos menos Guilbert salimos y su grupo de amigos de quedo a esperarlo. No entendía como siendo tan egocéntrico e idiota, podía tener tal cantidad de amistades.

Fui directo a mi casillero para sacar las cosas que necesitaba para clase de Música y salí disparada al baño.

Ya frente a un espejo, saqué el delineador de ojos y retoqué las lineas dibujadas en mis parpados.

De mi bolso, saqué los auriculares y los conecté a mi móvil. "Fashionably Late" de Falling In Reverse comenzó a sonar y yo iba con paso clamado hacia el aula. Estaba frente a la entrada y ubiqué de inmediato la cabellera de Johnnie.

Caminé en su dirección y caí como costal de papas en el asiento que estaba junto a él. En ese momento no tenía la intención de pelear con Guilbert como de costumbre, así que no detuve la música al momento de sentarme.

Un ligero golpe en mi hombro me saco de la hermosa historia de la canción "Bulletproof Love" de Pierce De Veil. Una de mis favoritas.

- ¿Perdón, qué dijiste?

- Que ¿Qué te dijo Jey?

Diablos, lo notó.

- No te importa.

¿Qué estupidez acabo de decir?

Si antes era obvio que se trataba de él lo que Jey me había dicho, en el momento en el que dije tal barbaridad se notó más.

Esbozó una pequeña sonrisa demostrando que mi teoría no era del todo falza, y haciendome sentir como una tonta otra vez.

El profesor Stwart entró echando chispas y puedo jurar que estaba a punto de que le saliera humo por las orejas y fuego por la boca.

- Buenos días, profesor. -Alguien comentó sarcásticamente y los demás estallaron en risas.

- Al salir de casa, no encontraba las llaves de mi auto, después el congestionamiento estuvo terrible y ahora, llego veinte minutos tarde que se descuentan de mi salario. ¿Qué tienen de buenos, joven Hall?

Todos nos quedamos sin habla, Stwart era un hombre pacífico habitualmente, era muy desconcertante verlo de mal humor.

- Lo... lamento.

- No importa. No importa, aquí venimos a aprender de la música que es lo único que vale la pena en la vida -Ahí estaba su recuperación-. Ahora, juntense con su pareja a discutir sobre los ensayos que han tenido.

¡Maldición!

• 3 votos y sigo.
~Breen

why do bridges love suicides? (j.g.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora