Lo prohibido

Las piezas del puzle.

Esa noche sí subió Héctor hicimos el amor como nunca, fue épico. Me hizo cosas que no creí poder hacer pero con su confianza y mis ganas de darle placer era capaz de todo. Lo hicimos en el sofá, en la cama y después otra vez en la cocina. Estaba exhausta no me quedaban fuerzas y en todo momento noté dureza en él en su mirada, tenía la necesidad de que yo notará que no se cansaba de mí. Cuando después de terminar en la cocina me llevó en brazos a la cama y yo antes de que me dijera que se iba, le pregunté -Héctor te ocurre algo? Estás raro y no me refiero al sexo eso esta estupendo, me refiero en tus ojos y tus gestos algo te ocurre.
Se echó las manos a la cabeza y suspiro fuerte. -Mi vida no te quiero preocupar pero sé qué si no te lo cuento te acabarás enterando. Ayer no pude quedarme un rato contigo porque mi madre me pidió cuentas del bar, se enteró que habíamos ido a comprar cosas a los niños y ató cabos. Le dije la verdad y que tú no me pediste nada, pero estaba muy enfadada a mí me parte el alma verla así, porque entiendo que ella lo hace por mí pero no entiende esta relación. Ella te ve como una aprovechada, que se reirá de mí, yo ya le explico que no es así y que yo no soy ningún tonto pero no hay manera. A partir de ahora me va a controlar más y yo estoy atado no quiero dar problemas a mi familia lo son todo para mí y han luchado mucho por conseguir lo que tienen.
A mi me estaba destrozando con cada palabra y sé que no lo hacía con mala intención solo se estaba desahogando.
-Héctor, no te preocupes yo la entiendo, todo el mundo le cuenta cosas inventadas y ella tiene miedo de verte sufrir se nota que te quiere, ojalá mi madre me protegiera así. Y por el dinero de ayer devuelveselo y verá que era un prestamo que no me lo regalaste. Y si necesitas que yo le de alguna explicación iré, por ti haría lo que fuera amor.
Me miro con los ojos repletos de lagrimas y me beso con pasión. -Cariño me voy tú duerme mañana tienes que montar tú negocio. Si tienes algún problema cuenta conmigo y si Raúl te lo impide avisame y le aclararé las cosas.
-Gracias mi niño, no te preocupes os voy a demostrar que yo sola puedo hacerlo.
Se fue, y aunque fisicamente me había dejado exhausta no podía dormir, serían los nervios por mi negocio?
Escuche la puerta a las seis de la madrugada y era Raúl que volvía de trabajar, yo me hice la dormida y cuando me aseguré que dormía me levanté me di una ducha y me puse un vestido que a Héctor le encantaba. Era negro con una flor grande roja a un lado, me hacía muy buen tipo me llegaba justo a las rodillas y me calcé unos zapatos negros de tacón preciosos, me maquillé en tonos suaves pero los labios rojos y me quedé impactada cuando me vi en el espejo estaba espectacular, hoy empezaba una vida nueva. Cuando llegó la hora desperté a mis hijos para llevarlos al colegio, mi hijo al verme se abrazo a mí y me dijo que era la mamá mas guapa del mundo. Yo aguanté las lágrimas y le di un besazo mi niña al verme lo primero que me dijo fue que no estropeara ese vestido que ella se lo pondría cuando fuera mayor. Eran lo más importante de mi vida y me sacaban muchas penas, a veces cuando su padre me atacaba y ellos llegaban del colegio me encontraban muy nerviosa y perdía la paciencia con ellos cosa de la que me arrepentiré siempre.
Los dejé en su colegio y me fui directa a buscar un carpintero y un electricista para hacer las reformas necesarias, cuando los acompañé al kiosco ya me explicaron todo lo que se necesitaba y lo que me iba a costar. Yo les dije que adelante y que necesitaba inagurar en una semana, no hubo problema se pusieron a trabajar esa misma tarde. Parece que todo estaba a mi favor fui solucionando todo ese mismo día, Héctor ya me había facilitado los teléfonos de los proveedores, así que todo estaba previsto para inagurar en nueve días. Estaba agotada necesitaba cafeína, me acerqué al bar de Héctor y  cuando me vio se quedó paralizado, -Pero donde vas tan guapa? Voy a vigilarte que seguro hoy ya te han comido con los ojos.
Me reía a carcajadas, este hombre me veía como una diosa y a mí me hacía gracia.
Le expliqué todo lo que había avanzado y que solo me quedaba encontrar un pintor, él de seguida se ofreció pero yo era consciente que trabaja mucho y no quería que encima la gente pensará que era él el que montaba aquello para mí. Entonces el me recomendó a un amigo y lo localizó por teléfono en 5 días vendría a pintar. Que ilusión!!!
Recogí a mis niños y fuimos a comer a casa todo estaba tranquilo y cuando volví del colegio de dejarlos Raúl estaba despierto, -Han llamado por teléfono preguntando por ti del banco y dicen que pases mañana sin falta a firmar los papeles del negocio que estás montando. A que coño se refieren?
-Pues a eso a un negocio que voy a montar en nueve días y si quieres estas invitado a la inaguracion el sábado de la semana que viene.
-Pero tú te has vuelto loca!!!! No entiendes que si fracasas me tendré que hacer cargo yo de tus tonterías, quien te ha metido esa historia en la cabeza? Eres tonta!
- Raúl tú no tienes que hacerte cargo de nada no he necesitado ningun aval, yo necesito trabajar ,tú solo me das para comida y los niños y yo necesitamos otras cosas y no me voy arrastrar a pedirtelo. Nadie me ha metido nada en esta cabeza yo soy adulta y puedo hacer cosas por mi cuenta, incluso pensar.
Su cara estaba roja de ira, pero yo estaba con la cabeza bien arriba y os prometo que si me llega a tocar le habría hecho frente ya no le tenía miedo a partir de ahora sería lo que yo quería y cuando quería.