Besos para recordar. [Wattys2015]

15. Exnovios

NOTA DE AUTORA: ¿Quién no encuentra hermoso a nuestro Drake? Ahí con su pelo siendo rebelde, ¡Tan hermoso y precioso! ¡Yo lo amo!, espero que ustedes piensen lo mismo. Pido también que los lectores fantasmas, JAVIERA BUSTAMANTE recibe el mensaje, comenten o dejen su voto.

No había palabras para describir como estaba el lugar en esto momentos, por fuera no se sospechaba nada, pero por dentro era un desastre, paredes rayadas. Observó a los trabajadores que se movían dentro del museo y algunos policías tomaban notas escuchando detalladamente al guardia de seguridad que estaba relatando inquieto mirando a sus costados moviendo sus manos para describir mejor.

Su vista se detuvo en un Drake que golpeaba una pared enojado y molesto ¿Qué pasaba? No entendía nada.

Caminó con pasos veloces hasta el chico que movía su corazón de una manera tan extraña y a la vez gustosa.

Su mano se colocó en el hombro de él y este detuvo su desquite contra la pared para mirarla, se lanzó a sus brazos encontrándose con el calor que emanaba de ella.

Caitlin acarició sus cabellos intentando tranquilizarlo, no lloraba, soltaba palabras molestas y se apretaba contra ella en busca de tranquilidad.

- ¿Qué sucedió?-Preguntó con delicadeza.

-Nos robaron, maquinas de construcción, telares, muebles, también obras, robaron nuestras obras Caitlin-De su voz solo salía tristeza y rabia combinada, lo que no era una buena mezcla.-No queda nada, Paul fue secuestrado y a Rick lo amarraron en una oficina, lo arruinaron todo güzelim.

Ella abrió su boca sorprendida, no se esperaba algo como eso, volvió a mirar a Rick que era quien explicaba, pero no había rastro de heridas en él, lo cual era muy sospechoso, apenas tenía un moretón en su mejilla que se notaba a la distancia.

-Tranquilízate cariño-Pidió ella acariciando tiernamente su cabello.

-Todo esta destruido, apenas tenemos para continuar el proyecto y no tengo demasiados recursos, puse la mayoría de mi dinero en este museo, resulta que unos rateros acabaron con lo que tenía.

Se estremecía de tan solo sentir el dolor que emanaba de los labios de Drake, se separó un poco para observarlo con fijeza, tomó sus manos la tiró hasta su despacho para notar lo daños.

El despacho no mostraba tantas trizas como mostraban en la exposición pero las obras ya no estaban, también le inundó la rabia, eran unos malnacidos. Intentó respirar tranquilamente, debía hacer que Drake encontrará tranquilidad de una u otra manera.

Drake se había separado de ella para comenzar a golpear la pared desesperado, nunca pensó encontrarlo de esa forma.

-Drake...

- ¡Nada de "Drake"!-Gritó furioso respirando con dificultad- ¡Son perdidas millonarias Caitlin! ¡Todo mi trabajo está en ruinas!

A pesar de que le dolía que le alce la voz no podía ser una chica sensible, él estaba liberando de una manera la rabia que sentía dentro.

-Tienes razón, no puedo pedir que te tranquilices-avanzó un paso quedando más cerca de él-Si quieres grita hazlo, si necesitas llorar esta mi hombro, es tu momento de dolor.

Quedaron unos segundos en silencio y luego Drake explotó, tomó las hojas que estaban esparcidas en suelo rompiéndolas en pedazos, pateó las sillas mostrando toda la rabia que acumulaba su cuerpo.

La joven observó con atención cada uno de los movimientos que Drake hacia, en cualquier momento algo podía hacerle daño y no quería verlo en ese ámbito.