La chica ruda y el chico frío (Daryl Dixon)

Papá

Miré sus ojos los cuales estaban totalmente abiertos observandome. Boquiabierto retrocedio pocos pasos.

-Carl-Me acerqué-Por favor, no digas nada-Susurré esto último.

-¿Qué pasa?-Rick cruzó el pasillo llendo hacia nosotros, colocandose a lado de Carl.

-Nada-Dijo Carl después de unos segundos, sonriendo a su padre fingiendo no saber nada.

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-Llegaremos pronto-Anunció Rick, quien subía a la camioneta junto con Michonne y Carl a quien no le había dicho nada sobre lo que escuchó.

Asentimos, viendo la camioneta alejarse por el bosque. Las armas se estaban agotando, por lo que planearían ir hacia el centro de policias donde Rick trabajaba, al parecer, había  muchas armas allí, al igual que municiones. Ese día fue de trabajo, matando caminantes. Casi no hable con nadie, ni siquiera con Daryl, cruze pocas palabras con todos por lo que opte en matar, me absorvia de aquellas situaciones.

La tarde cayó, todos se adentraron totalmente cansados a la prisión mientras yo me quedaba sobre el pasto, necesitaba estar a solas. Escuche el ruido de un motor a lo lejos, habían vuelto, fui corriendo a la reja la cual abrí, aquella camioneta blanca se adentro hasta aparcar en el patio, cerré la reja y fui hacia ellos.

-Hey, ¿Algo nuevo?

-Encontramos armas-Dijo Rick-Tuvimos suerte.

Los acompañe hacia la prisión, donde una vez adentro, se tomaron las armas poniendolas en una caja de plastico cerca de la entrada, Rick llamo a Daryl y Hershel para tener una charla a solas, por lo que todos subimos a las celdas. Me quité la tierra de las botas, cuando las retire, mis pies sintieron la gloria, estaban totalmente hinchados y rojos, solté un leve suspiro, debía decirle todo a Rick, lo haría, era hoy o nunca.

Me quite mi playera, estando de espaldas de la entrada, mientras doblaba mi camiseta colocandola sobre la silla. Para lo único que sirven las sillas son para poner ropa, ley humana. Dos brazos me rodearon la cintura, sonreí ante esto recargandome en su hombro.

-¿No entiendes que cualquiera puede entrar y encontrarte así?

-No planeaba quedarme semi-desnuda parada en la celda esperando la mirada de alguien-Solté una risita. Giré sobre mis talones, encontrando su mirada, acomode un poco su cabello humedo por el sudor-¿Qué te dijo Rick?

-Mañana ira con el Gobernador, a "hablar"-Comentó esto último haciendo comillas con los dedos-Quiere que Hershel y yo lo acompañemos.

En su mirada se notaba el cansancio, debía ser agotador ser la "mano derecha" de Rick. Bese sus labios, acariciando su mejilla mientras me apretaba con sus brazos, queriendo romper aquella distancia entre nuestros cuerpos.

-Debo ir a hablar con Rick-Dije después de separar nuestros labios, uniendo nuestras frentes.

-¿En ropa interior? ¿En serio?-Me miró divertido.

Reí ante esto, siguiendo su broma-Claro, tal vez le haga un baile, no se, ya veré.

Soltó una risita mientras me besaba de nuevo, esta vez, era un beso corto. Alejandome de él, tome una sudadera blanca (que por el tiempo, ahora era como gris sucio) teniendo aún puesto mi short, camine hacia el pasillo, dirigiendome a la última celda. Toque un poco la pequeña reja con mi anillo, el cual había sido un regalo de mi madre.

Rick salió limpiando el sudor acumulado con una camisa sucia.

-¿Podemos hablar?-En mi voz se notaba un nerviosismo terrible, no quería saber que pasaría después de esta confesión.

-Claro-Se adentro a su celda, pasando unos segundos para después decirle a Carl "En un momento vengo".

Bajamos illendo hacia afuera, donde el viento movía ligeramente los arboles que se levantaban a nuestra vista, algunas pocas aves volaban a una distancia alejada. Aclaré mi garganta mientras jugaba con mis dedos.

-Daryl me dijo que mañana irían con el Gobernador.

-Si, el pidió una charla conmigo, necesito quien me cubra por si sucede algo.

Miré hacia un lado, mordiendo mi labio.

-¿Puedo ir?

-Sky, eres una excelente chica defendiendote, y se que Daryl te importa, pero es muy arriesgado.

-No es eso-Negue con mi cabeza mirando el suelo-No es por Daryl. Escucha,-Tome aire-¿Recuerdas que les hablé de mi padre?-El asintió-Bueno, el día que fuimos por Maggie y Glenn, seguí a Michonne, quien habia ido hacia un departamento, allí adentro, después de que ella descubriera unas cosas, el Gobernador llegó. Creeme que quería decirte esto-Le miré, el se encontraba serio, pero estaba segura que podía adivinar que tratataba de decirle.

-El Gobernador es tu padre-Más que una pregunta, sonó como una afirmación.

-Si-Mordí mi uña-No eh podido entablar una conversación con él, porque Michonne descubrió que el tenía a mi hermana encerrada en un closet, ella estaba muerta. La mató, en ese momento, él entro peleando con Michonne por lo que ambas escapamos. Andrea debe saberlo, puesto que nos la encontramos cuando saliamos de allí.

Largos segundos pasaron, un silencio reino entre nosotros. ¿Y si me saca de allí?

-Puedes ir con nosotros.-Sentenció.

-¿En serio?

-Si, Sky, necesitas hablar con tu padre, viste lo que hizó, puedes hacerlo cambiar de opinión y de acciones-Le asentí-Duerme mucho, mañana será un día largo.

Ambos subimos sin decir nada, solo nos despedimos, me dirigí a mi celda donde encontre a Daryl recostado boca abajo sobre su cama, sin camisa. Noté unas marcas en su espalda, eran terribles. Me senté a su lado mientras tocaba suavemente su hombro, formando circulos allí. Se giró somnoliento.

-¿Te desperté?

-No-Apenas lo dijo, bostezó a lo cual reí.

-Hey-Atraje su atención-Mañana iré con ustedes.

-¿Por qué?-Se apoyo sobre sus codos miradome.

-Rick me lo pidió-Mentí, no podía decirle la verdad, no quería tener una pelea, solo quería disfrutar mi tiempo con él