After all.... (1D)

I think about it.

Liam y Sophia habían llegado de su larga luna de miel. Se encontraban tumbados en la cama con las maletas desparramadas en el suelo. La ropa regada en todas partes de la habitación.
-Creó que necesitó vacaciones, de estas vacaciones.
-Lo bueno es que tu puedes faltar Sophía.
-No, tengo muchas cosas que hacer. Tengo que verificar que todo vaya bien.
Sophía se removió en la enorme cama para acercarse a su marido.
-Y, entonces, cuántos hijos tendremos?
-Ahora no quiero pensar en eso. Aún somos demasiado jóvenes.
-Entonces cuándo? Cuanto yo tenga 50? Sabes mi útero tiene fecha de caducidad a comparación de tus bolas!
-Tranquila Soph. Sólo quiero que nos adaptemos de nuevo.
-Demasiado tarde...
-A qué te refieres con eso? Liam la observó asustado.

-Nathan, lo que estas haciendo se llama berrinche. No te haré caso hasta que te Calmes y me hables bien. Ya eres un niño grande, así que comportaste como tal.
-Pero sólo tiene tres, Tesalia.
-No empieces Zayn. Simplemente no puedes llegar y decirme que hacer. Hablarle así me funciona bien. Si le habló como un niño y le doy lo que quiere va a seguir igual.
-Esta bien, sólo decía.
La familia Malik, se encontraba en el comedor tomando la cena. Nathan no quería comerse sus chicharros y se los estaba aventando a Trish. Ella lanzaba pequeños gritos de risa.
Las comidas en la casa se habían vuelto incómodas. Tess no tenía nada que decir, ningún tema de conversación. Y Zayn se esforzaba por reparar lo que había roto. Pero, a veces sentía que no había nada que reparar. Tess dormía en un cuarto diferente al de su esposo. Y los niños, parecían notar que algo andaba mal entres sus padres, y por eso pedían por más atención.
Con el nuevo embarazo. Tess se sentía más agotada de lo normal. Todo le molestaba y todo estaba mal. Por eso prefería no hablar, a soltar insultos y palabras hirientes a su esposo. Quería perdonarlo, pero era un poco más difícil y más con las hormonas a todo su esplendor.
-Puedes llevar a Nat, a dormir? Yo llevaré a Trish.
Zayn asintió.
-De acuerdo amigo, iremos a la cama. Mañana será otro día.
-Podemos ir al parque? El papa de Gary lo lleva al parque y juegan juntos.
- De acuerdo iremos al parque mañana a jugar pelota.
Zayn se puso en hombros a su pequeño hijo.
- Y podemos comprar un helado?
-Le preguntáremos a tu madre sobre eso.
Tess, sonrió para ella mientras sacaba a Trish de la silla. Debía admitirlo, Zayn se había vuelto atento desde lo sucedido. Pasaba más tiempo con los niños, ayudaba más en la casa e incluso sacaba a pasear a Bomer. Había pensado varias veces en ir a dormir con él, pues no le gustaba dormir sola, no desde prisión. Pero recordaba de todo lo que había pasado, la cárcel, las marcas que dejaron las caricias de otra mujer.
No podía pensar en él acariciándola con amor, cuando también había acariciado a otra mujer.
Antes de irse a dormir decidió ir al cuarto de huéspedes, donde se encontraba Zayn. Quería desearle buenas noches, o eso se decía ella misma. Abrió la puerta y escuchó el bajo volumen de la televisión y observó al chico recostado en la cama con sólo unos calzoncillos. Por un momento se sonrojó, era como algo prohibido.
-Hola, sólo quería ver como estabas.
-Bien, supongo. Ya iba a dormir. Esta bien si llevamos a los niños al parque?
-Claro, es una buena idea. El lunes tengo el ultrasonido por si quieres ir. Y recuerda que la boda de Niall es la próxima semana. Y quiero que vayamos de compras por algo que me haga ver bonita. Esta panza crece cada vez más, es más grande que cuando tuve a Nat o Trish.
-Me encantaría ir. Te gustaría saber el sexo del bebé?
-Creó que en este punto no tengo la menor idea.
Tess se fue acercando a la cama para sentarse junto al chico. Él parecía sorprendido. Era raro que ella estuviera actuando de esta manera, así que prefirió no decir nada y mantenerse indiferente.
-Por que dices eso?
-Bueno, por una parte me gustaría que fuera niña, así seríamos mayoría. Pero, por otro lado me gustaría que fuera un niño, así Nat tendría un compañero de travesuras. Y Trish sería la consentida de la casa. Es absurdo.
-No lo es. A mi me da igual. De todos modos sé que los voy a querer de igual manera.
-Hagamos una apuesta!
-Hace mucho que no hacemos una.
-Lo sé.
Tess recordó aquel momento en el que habían hecho la última promesa. "No romperse el corazón". Él la había roto.
Él chico observó la cara decaída de la chica y reaccionó.
-Y de qué va a a tratar?
-Si es niño yo le pongo el nombre, y si es niña tu se lo pones? Aceptas?
-Por supuesto. Preparar para perder porque será niña.
-Tu no eres el que lo carga así que no digas nada.
Ambos comenzaron a bromear al respecto. Se reían. Se estaban divirtiendo. Parecía la primera vez que lo hacían, se sentía nuevo. Como su todo lo que pasaron se hubiera ido al olvido.

-Esta decidido, no lo Haremos.
-Pero ya habíamos acordado. No puedes hacer eso sólo porque sí.
-Es que así tu le dices?
-Bueno no encuentro otra manera de decirle.
-Genial, entonces llevame la contra. De todos modos no lo haremos. Ya cancelé.
-Qué?! Pero ni siquiera me consultaste Louisse! Cómo puedes ser tan egoísta. Dios, a veces me sacas de quicio. Entonces que vamos a hacer?
-Bueno, podemos rentar el útero.
-No.
-No de otra mujer. El que nos ofreció el doctor. Uno falso. Con las grabaciones de nuestras voces. Así se familiarizaría. Y podríamos visitarlo las veces que quisiéramos.
-No estoy de acuerdo, pero supongo que ya hasta hiciste la cita. Me molesta el que no me hayas consultado. Esto es cosa de los dos. No solo tuya.
-Tu no eres el que no puede tener hijos.
-Y aquí vamos de nuevo....

-Ya mero es la boda.
-No me digas Margo.
-Que vas a hacer al respecto?
-Quedarme en casa, tengo muchas cosas que hacer. Estoy atrasada con lo de la universidad. Y tengo una cita con alguien.
-Oh Dios, no me digas que es con ese caliente papá soltero. Es tan irlandés. Dios, yo me lo montaría. Que suertuda. De todas las madres que se le enciman te elige a ti, la que sólo lo ve como un amigo. Vaya, que avance. Sólo no le rompas el corazón.
-Tiene un nombre, recuerdas? Y él sabe bien que ni es nada serio. Los dos nos vemos enredados en nuestros pasados.