Alternative Final ALLEGIANT

Capítulo 17

Me alejo, soy incapaz de verlo a los ojos.

-¿Qué pasa?- sus ojos me miran con insistencia.

-No es fácil de decir...Tobias yo...

-Dímelo- dice acunando mi cara entre sus manos.

-Tengo miedo de estar así...puede que ya hayamos estado juntos...pero...siento que esta vez es diferente.

- Sabes que no podría obligarte a hacer algo que no quieres- pone cara de dolido.

-No quiero tenerte miedo- le digo.

Me mira fijamente, como si fuera lo único que vale la pena mirar. Respiro profundamente y lo beso, le rodeo la cintura con los brazos, y le enredo las manos en el pelo.

Soy consciente de todo a la vez, de la presión de su boca, del sabor del beso, la textura de su piel. La luz naranja de la habitación que brilla al otro lado de mis párpados cerrados. Cuando me aparto y él abre los ojos, me fijo en todos sus detalles: el la chispa azul claro de su ojo izquierdo, en el azul oscuro que me hace sentir segura en su interior, como si soñara.

-Te quiero.

- Yo también te quiero- responde.

El se quita la camiseta y yo la mía.

Soy cómo una espada y él, como una piedra de afilar...

Soy demasiado fuerte para romperme con facilidad, y el me convierte en alguien mejor, más perfecto, cada vez que me toca.

Me dejo llevar.

Nos levantamos a causa del ruido del pasillo, tengo puesta la camisa de Tobias.

-Hola

-Hola- responde.

-¿Qué hora es?

-Seis y media.

Rápidamente me pongo mi ropa, le entrego la camisa a Tobias. Esta haciendo frío, el invierno se acerca cada vez más. Llegamos a la habitacion, me presta su saco, tiene una capucha, huele a él, a brisa y algo denso y dulce, algo masculino.

El me abraza por la espalda y recuesta su barbilla en mi cabeza.

-Mañana deberíamos de hacer algo diferente, podemos ir a Chicago, a visitarlo.

-Si, sería un buen plan.- digo.

Tobias me pasa una mano por debajo de las piernas, y la otra por las espalda. Me río.
Me lleva así hasta el comedor. El me baja y hace la fila, me acerco a la mesa en donde están Caleb, Uriah, Christina y Zeke.

-Hola- digo al sentarme.

-¡Dios, Cuatro y tú parecen unos chicles, nunca se separan! - exclama Christina.

-Hey, no exageres.

-No lo hace- dice Uriah-. Está diciendo toda la verdad.

-Chicos, chicos...-dice Zeke- no es para tanto.

-Ja, ja, ja.

-¿De qué te ríes?-preguntan Uriah y Christina.

-Nada, lo que pasa es que recuerdo- risa- sus caras- risa- la vez que besé a Tobias frente a todos- risa-. Ojalá se hubieran visto.

-¡Qué!, no lo esperábamos- dice Uriah entre risas.

- Exacto- dice Christina.

Tobias llega hasta la mesa, me trajo una hamburguesa, cuando la pone frente a mí, se agacha y yo le doy un pequeño beso.

-Gracias- le digo.

-Denada.

Se sienta a mi lado y me rodea la cintura con su brazo.

-Oye Cuatro, ¿Cómo te enamoraste de Tris?- dice Zeke.

-¿A que viene la pregunta?

-Es que nunca se separan, se mantienen juntos la mayoría del tiempo.

-Realmente, no lo sé.- dice sonriendo- Sólo la vi y dije "Es posible que tengamos algo".

-Digamos, que pasó lo mismo conmigo, me empecé a interesar en él. Y al final admití que me gustaba.

Terminamos de comer, llevamos los platos y nos vamos a la habitación, Christina y Uriah nos acompañan.

Hablamos.

-Tris no te he contado esto, pero cuándo estabas en coma, me subí a un avión, por tí.

El hecho de que haya subido a un avión por mí, es hermoso.

Me limito a mirarlo.

-Si Tris, lo hizo- dice Christina al otro lado de la habitación- aunque casi se muere del susto.

Me río.

-Si, ya mucho, mucho- dice el entre risas.

-Oye!- digo divertida- gracias.

-Denada- me da un beso en la mejilla y sonrió.

Juntamos nuestras camas, me meto debajo de las cobijas, Tobias me abraza por la espalda, y recuesta su cabeza en mi hombro. Le cojo una mano y entrelazo mis dedos con los suyos.