La hermana de Edgar

cap 3

Narra Mizu
Los brazos de Shu rodeaban mi cintura, el notó que me desperté y clavo sus colmillos en mí, el dolor invadió mi piel, a comparación con la otra vez que no pude sentir casi dolor por la vergüenza que pensé que nunca tendría que experimentar, extrañamente al estar a lado de ése vampiro, y que fuera vampiro era lo que menos me molestaba, me molestaba más el hecho de que sea un Señorito de familia, que de el dolor que siento ahora mismo con sus mordidas.

Me quejó al sentir que se separa de mi cuello para morder un poco más atrás, inevitablemente me sentí como un dulce borrego al cual se lo van a comer para la cena, pero al menos sabía algo sería un lindo borrego, yo misma me reí de mi misma y Shu dejó de morder para quedarse mirando fijamente a mis ojos y mi sonrisa que sobresalía de mi por mi loca forma de pensar.

- ¿Por que te ríes? .-Extrañamente pregunto curioso.

- Sólo me acordé de algo .- Dije más o menos sonrojada.

Shu dejó de mirarme al cerrar sus ojos, cuando el lo hizo mi sonrisa desapareció, yo quería mirar esos ojos azules tan hermosos como cuando el cielo causa un reflejo  en el incoloro mar, esos ojos llenos de profundidad, que no se podían leer por más que así lo deseará.

Siento que Shu se va de la habitación y yo sólo bajo la mirada, la cual cada vez se mostraba más y más apagada y llena de tristeza.

Cuando el se marchó y pude recuperar el control de mi mente y busque mis cosas y al encontrarlas coloque una fotografía en mi buró de Edgar y mis padres.

La observé por un gran rato, hasta que pensé "el tener la fotografía tan a la vista sólo me hará más miserable" tras mis pensamiento baje la foto para que nadie la viera, la puse en un cajón con llave y lo cerré.

Una rato más tarde ya bañada y cambiada me puse un uniforme que estaba en mi cama, lo primero que pensé "no más escuela, por que siempre tengo que fingir en tener fé que no tengo"

Tome mis audífonos y los metí bajo la blusa del uniforme después "me lo acomode" o eso intenté, puse algo de música y baje las escaleras para posteriormente caminar el pasillo para llegar a el comedor, veo a todos los vampiros sentados y me siento alado de Raito el cual sonrió pensando que hice "eso" y claro su mente de seguro dictaba un "perra"

La cena fue extremadamente incómoda, nadie hablaba y un ambiente de tensión me espantaba, y no era para más, Kanato no dejaba de contarle a su osó más de mil maneras de dejarme seca, y el vampiro de ojos azules ni me miraba, Raito me tocaba la pierna debajo del mantel mientras intentaba no ruborizar, Ayato no dejaba de decir que sería de su propiedad, y Subaru algo enojado se fue de la mesa, Reiji sólo miraba su comida y comía como si fuera lo más normal del mundo, pero cuando veía todo eso siento la mano de Raito subir a mi muslo y ahora yo soy la que se para de la mesa roja, al notar que todos me miraban me vuelvo a sentar, Ayato sólo salto una sonora carcajada al intuir lo que su hermano hacía con migo.

Al terminar la muy pero muy incómoda comida todos caminamos a la limosina, me hiba a sentar a lado de Reiji pero alguien sostiene mi manó, al sentir mi corazón latir más rápido supe que era Shu, me toma de la manó y me sienta a lado suyo, cierra sus ojos y se pone sus audífono, yo imité su acción y una risilla de Kanato hace que abra un ojo para enseguida volverlo a cerrar.

Ya en el instituto Shu me toma de la manó, de una forma nada protectora sino más bien como para que no seme hablara nadie, llege a un salón con el y noté que éramos los primeros en llegar, Shu me suelta y se va aún asiento al final, se recarga en el pupitre y se ¿duerme?

Al verlo dormir sólo me quería reír ya que me sacó de mi ver que se durmió en clases, casi me muero de risa y conteniendo una lágrima salgo del salón para ir al baño.

Ya en el baño veo a una chicas murmurar algo.

- ella es la chica que llegó con los Sakamaki .-Dijo una pelirroja de pinta no muy amable.

- Que suerte tiene, como desearía poder ser ella- Le respondió su amiga

Salí del baño confundida, estaba distraída y derrepente chocó con alguien y caigo al suelo.

-Tsk, Cerda ten cuidado .- Dijo un chico con la mirada irritada.

-Perdón .- Dije parandome y arreglándome la falda.

Alcé la mirada y esos ojos esa sonrisa, esa mirada ese cabello, esa forma de hablar, el era mi hermanó.

- ¿Edgar eres tu? .- Le solté de soplete

- Ehhh, ¿de que hablas? .- Me dijo el chico

- De nada.- Al ver que no era el, salí corriendo con las lágrimas en mis ojos hasta que llegué al salón y me Sequé las lágrimas para después entrar y soltar una sonrisa lo más sincera que pude.

Shu se acerca a mi, me toma de la barbilla y me besa, mientras me besa clava sus colmillos en mi labio inferior y un quejido salí de mi parte, se aleja de mi al notar que alguien habré la puerta.

"este Shu me volverá loca, pero si tan sólo el chico que conocí ese rato fuera Edgar lucharía por vivir"

Escritora
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Att: Mizu