CAPÍTULO 28

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POV JESSICA


Abrí los ojos lentamente, los rayos de sol que se filtraban por la cortina me lastimaban.

-¡Mi vida!-Escuché una voz masculina a un lado mío.
-¿En dónde estoy?- Pregunté; Sobe mi sien, me dolía un poco la cabeza y...

Un ataque de flashback empezó a atacar mi cabeza; memoria tras memoria aparecían en mi cabeza sin darme tregua. Fue ahí cuando me di cuenta que todo lo que había estado soñando, no eran sueños, habían sido recuerdos.

-Amor... ¿Quieres que llame a los doctores?- Preguntó mientras se acercaba preocupado.
-No, Donghae- Contesté después de que mis recuerdos habían regresado por completo.
-Los doctores dicen que probablemente empieces a recordar cosas después del gran susto que nos diste-Se acercó a mí e intento besar mi frente.
-Quiero que me expliques porque me engañaste diciendo que eras mi novio- Tomé su cara con una mano y la empuje hacia atrás, me cruce de brazos y lo miré.
-Yo...-Me miró descolocado.
-Quiero que me digas como es que convenciste a todos de que no me dijeran nada y...
-Jessica, déjame explicarte todo.
-Ella se va a casar- Me quedé estupefacta, recordando lo que ya desde hace un tiempo sabía pero no era consciente del todo.
-Sí- Evitó mi mirada
-Entonces... Supongo que no se arrepintió de haberme engañado- Sí, como es que pude si quiera haber pensado que ella me amaba. Ahora se casará con él y ya no habrá vuelta atrás.
-No, Jessica. Es que...
-Ya está. Ella está a un paso de casarse. No hay más que se pueda hacer- Miré hacia el suelo.
-Ok... Prometí que sería justo- Contestó.
-¿Me lo prometiste?- lo miré confundida.
-No, a ti no, pero no por eso deja de tener el mismo valor la promesa- Suspiró- Quizá me odies después de escuchar todo esto, pero créeme que no es nada bonito ver que te sientes triste, incluso sin recordar nada, la extrañas- Lo miré atentamente ¿Por qué debería de odiarlo? ¡Ah, sí! ¡Él no permitió que recordara todo!
-El doctor dice que ya con tus recuerdos recuperados, no sufrirás más dolores de cabeza, náuseas y cambios de humor.
-En realidad lo que más me molestaba era el hecho de no poder recordar algunas veces, inconscientemente me ponían de malas y bastante sensible.
-De igual forma... Espero que puedas perdonarme algún día- Me intentó tomar de la mano, pero enseguida la cambie de lugar para que eso no pasara- Primero que nada, quiero que sepas que te amo y que quizá todo lo que hice fue un poco egoísta, pero también o hice por tu bien.
-No comiences con tus hipocresías y ve al grano. Si no, de todas formas algún día me enteraré y te guardaré más rencor – No sabía realmente de que me hablaba, pero de algo estaba segura... No iba a ser nada bueno.
-Todo esto fue planeado- Soltó al fin.
-¿Cuál todo esto, Donghae?- Inhalé profundamente y exhalé poco a poco. No quería sacar conclusiones aún.
-Todo- Cerró los ojos con fuerza- Incluso lo de la salida al café esa ocasión para "advertirte" de Minho- Dijo casi en un susurro. Me quedé callada esperando a que siguiera, sabía que si habría la boca, terminaría logrando que no me lo contara todo- Quizá nos resultó mejor de lo que pensábamos con lo de tu pérdida de memoria...
-¿Esperábamos? –Levanté una ceja.
-Sí... Minho y yo- Aceptó avergonzadamente –El plan era llenarte la cabeza de dudas y eso era algo bastante sencillo con tu desconfianza hacia ella cuando se hablaba de él-Tragó saliva pesadamente, prosiguió- Él le había dicho a Yuri lo mismo que yo a ti, pero con la gran diferencia de que ellos son amigos desde hace años, y ni así Kwon se dejó influenciar por todos su comentarios respecto a nosotros. Al principio creí que el plan era una pérdida de tiempo, pero conforme pasaban los días, tú ibas desconfiando más de ella. Minho salía con ella con el pretexto de que se iría a vivir a algún lugar lejano de aquí para dejarlas ser feliz, pero con la condición de que pasaran sus últimos meses aquí saliendo; no importaba realmente si fuera una vez por semana o por mes, solo necesitaba aprovechar las oportunidades para que la prensa, tú o alguna de tus amigas los vieran y se hiciera un gran chisme, cosa que sí sucedió. El día que Taeyeon los encontró en su departamento, fue porqué Minho le había insistido en ir y él creyó que sería suficiente con que contratara a un fotógrafo privado para que capturara el momento en el que entraba al departamento y empezara a meter veneno en su relación, pero las cosas salieron mucho mejor al estar su líder aún ahí dentro. El único error de Yuri, fue haber sido tan inocente y tonta como para no darse cuenta que Minho no quería solo su amistad y que no se había dado por vencido en intentar separarlas. Choi me contó que ella siempre fue de buen corazón y lo veía como un hermano, sentimiento suficiente para aprovecharse de la situación.
-El estúpido de Minho se aprovechó de la inocencia estúpida de mi hermosa perla y de mis celos... Fue demasiado audaz- Me regañé al mismo tiempo que golpeaba levemente mi frente con mi puño ¡¿Cómo es que no me di cuenta?!
-A lo mejor no fue tan fácil, pero las situaciones se estaban dando a nuestro favor y con sus amigas dudando también de la fidelidad de Yuri, era más sencillo todo.
-De igual forma, eso no explica el beso que vi- Estaba consciente de que la culpa no era de nosotras, pero necesitaba parecer enojada con ella para que él siguiera explicando.
-Minho sabía que lo habían estado siguiendo, así que se colocó de una manera en la que pareciera que se besaran, pero solamente le dio un beso cerca de los labios.- Me miró directamente- No te mentiré, la jugada de Minho era besarla y que al menos por unos segundos se dejara, pero al ver que en esa "cita" lo seguía tratando como un amigo, optó por hacer un juego visual. Y ¿adivina? Caíste- Esbozó una mueca.
-Tienes razón... lo tenía todo perfectamente planeado- Cerré los ojos al sentir una impotencia terrible.
-Algunas veces fueron tiradas de suerte, pero sí, fue demasiado inteligente- Se rascó la nuca- ¡Oh! Lo olvidaba. También hackeó varias de tus cuentas para que pareciera que todo el tiempo habías engañado a Yuri conmigo y se las mostró. Incluso robó algunos exámenes de maternidad de tu hermana y los modificó para que ella se creyera por completo que estabas embarazada de mí.
-Es por eso que...- Me quedé mirando hacia la nada y suspiré- A puesto a que todo esto no lo hizo solo-
-No... Yo le ayudé- Bajó la mirada.
-¿Algo más que agregar?- Dije con sarcasmo, el cual, no comprendió.
-Se llevó a Yuri a unas vacaciones lejos de cualquier vida inteligente para drogarla o alcoholizarla y poderla embarazar. Así nada impediría su boda, quizá la retrasarían, pero no la impedirían y... Le pagó a varios médicos para que se hiciera más difícil para ti poder recordar, con medicamentos y "vitaminas" que harían que tu mente se bloqueara
-¿Entonces todos los síntomas eran por causa de un medicamento que no debía tomar?
-Sí. Aunque técnicamente eran porque tu mente se forzaba a recordar pero los medicamentos eran muy fuertes- Contestó sínicamente
-Ok...- Intenté relajarme.
-Creo que el que empezarás a recordar todo de golpe más las medicinas, hizo que terminaras de nuevo aquí- Entrecerró los ojos y frotó su barbilla
-¡¡Pudieron matarme, bastardo!!- Grité furiosa; me miró con miedo y me volví a tranquilizar- Te perdonaré y prometo no levantar cargos en tu contra por varios delitos que han sido grabados gracias a la seguridad de este hospital, si me ayudas a evitar a toda costa esa boda y por lo tanto, ese embarazo- Lo miré decidida.
-Yo...
-Te doy tres segundos para que lo pienses- Levanté mi mano y puse tres dedos en alto.
-No es tan fác...
-1...- Bajé un dedo.
-Pero es que...
-2...- Baje un segundo.
-¡Ok! Aunque no estoy seguro de si lo lograremos
-Tenemos que logarlo- Me levanté de la camilla- La suerte ya ha estado mucho de su lado, es turno de que se ponga del nuestro
-No importa si me demandas...Yo solo quiero que algún día me perdones- Me miró suplicante.
-Eso es aún más difícil, Lee...- Le lancé una mirada gélida- Si no llegamos a tiempo, jamás podré perdonarles el que hayan destruido mi vida.

Logré que me dieran de alta del hospital; todas mis amigas estaban llamándome al celular para saber mi situación, la cual estaba mejor que nunca ahora que había recordado todo. Las puse al tanto de la situación y al estar todas regadas por distintas partes del mundo, era muy complicado que me ayudaran, pero al menos harían lo posible por averiguar dónde estaba mi amada, que por supuesto, ni enterada estaba de que había terminado de nuevo en una camilla gracias a el idiota de Minho y sus planes de aislarla de la civilización.

Estaba desesperada. Aunque estuviera haciendo llamadas por todos lados por saber el paradero de mi mujer, nadie lograba darme huella de ellos y eso me estaba matando cada vez más, hasta qué...


-¡Jessica! Está sonando mi celular- Gritó desde el otro lado de la habitación Donghae- Lo más probable es que sea Minho.-Caminó hasta mí y me miró con nerviosismo.
-¡Contéstale de una vez por todas! Finge que sigo sin recordar nada- Me apresuré a decirle. Asintió con la cabeza y contestó.
-¿Hola?- Puso el altavoz y lo colocó sobre la mesa.
-Hola, Donghae.
-Oh ¿Qué sucede? ¿Cómo te ha resultado todo, galán?—Sonó lo suficientemente creíble.
-No como esperaba, pero supongo que bien- Contestó el muy desgraciado.
-¿Qué? ¿No se ha dejado?- Mencionó en tono de broma, lo cual hizo que me hirviera la sangre ¡Se quería acostar con mi hermosa Yuri!
-No, no quiere beber nada- Sonó un poco frustrado- Bueno... De todas formas la boda es en 2 días y parece que todo va bien.
-Entonces no hay porque preocuparse- Contestó con felicidad fingida el cara de pez.
-Pregúntale donde está- Dije sin pronunciar ningún sonido. Doy gracias que haya podido leer mis labios.
-Y... ¿dónde la llevaste?
-¿Por qué la pregunta?- Sonó un poco desconfiado.
-Dijiste que sería un lugar maravilloso y quiero llevar a Jessie de luna de miel a un buen lugar- Al menos para mí, eso había sonado muy convincente, tanto que quería golpear su cara en ese mismo momento.
-Pues no sé exactamente dónde está, pero te doy los datos cuando regrese- ¡Diablos! Era audaz.
-Ok...- Lee Mordió su labio nerviosamente, pensando alguna manera de sacarle información.
-¿Todo bien, Donghae?
-Sí... Es solo que estoy ansioso porque te cases y todo esto termine.
-Lo sé, me sucede lo mismo- Río sínicamente. ¡Jodido poco hombre!-Bien... me voy, mi futura esposa me ha de extrañar. Nos vemos en un par de días. Bye- La llamada se terminó y Donghae me miró atemorizado.
-Lo lamento...-
-No, Donghae... Lo lamentarás demasiado cuando no la encontremos- Dije con lágrimas en mis ojos.

Estaba a punto de estallar en llanto por la frustración, coraje y tristeza, pero no quería hacerlo frente a él.

-Realmente no sé qué harían sin mí- Habló una voz desde la sala.- Son un par de idiotas cuando se trata de trabajar bajo presión.

-¡Cállate, estúpido mono!- Contestó Donghae algo frustrado- No estamos para tus bromas inoportunas.
-Traigan sus lindos traseros aquí y vean lo que este "estúpido mono" puede hacer mejor que ustedes dos juntos.

Ambos nos miramos y corrimos hacia donde se encontraba; Tenía unos aparatos conectados a su laptop.

-¿Qué diablos...?- Miramos la pantalla de dicho aparato detenidamente, la cual, tenía una localización señalada en un mapa.
-Es el lugar exacto en el que se encuentran Minho...- Me volteó a ver y sonrió- Y tu amada- Permanecí totalmente estupefacta. Al fin Eunhyuk había hecho algo bueno.- Al parecer se la llevó a una isla bastante distante de la civilización. Demos gracias que logró encontrar señal- Frunció el ceño y nos miró- Yo que ustedes, me apresuraría a ir, ya que no sabemos por cuanto tiempo permanecerán ahí- Cruzó las piernas elegantemente y se metió un caramelo a la boca.

-¡Eres un asqueroso genio!- Lo abracé fuertemente. Jamás dejaría de estar en deuda con ese desgraciado.
-¿Gracias?- Hizo una mueca- Pero que quede claro, señorita- Se alejó un poco de mí para susurrarme al oído- Lo estoy haciendo para que mi Hae no termine en la cárcel, así que más te vale cumplir tu palabra- Me separé lo suficiente para mirarlo y sonreí.
-Soy mujer de palabra- Guiñé un ojo- Pero si no logramos llegar a tiempo, también cumpliré mis amenazas.
-Lo sé- Suspiró- Es por eso que tengo que ayudar a ese gran idiota- Giró sus vista para observar al castaño que se encontraba hablando por teléfono para traer un jet privado e ir enseguida a dicho lugar.
-¿Desde cuándo está enamorado de él?- Lo miré curiosa.
-No estoy enamorado de él- frunció el ceño- Es solo que haría todo por mi mejor amigo-
-Ajá...- Me dí la media vuelta y empecé a mover cosas en la laptop para guardar la imagen y buscar maneras rápidas de llegar- Solo te diré que mientras más te tardes en aceptarlo, más tarde será para que lo tengas- Lo miré de reojo, él solo atinó a cruzarse de brazos.
-Es difícil cuando tengo a una perra lesbiana llenando el corazón de ese tonto- Soltó con veneno.
-Pues si él no hubiera estado obsesionado con esta perra lesbiana estaría viviendo felizmente mi vida de bollera con mi sexy novia- Levanté una ceja y lo volví a mirar- Lo único que lamento es ser jodidamente irresistible- Sonreí retadoramente logrando hacer gruñir a la pasiva esa.
-Nos vamos en 20 minutos, prepara tus cosas- Entró de nuevo a la sala el castaño Lee.- ¿Sucede algo?- Nos miró a ambos con curiosidad.
-No pienso ser yo quién lo diga- Cerré la laptop y tomé las impresiones que había hecho.-Pero sí, soy una perra y lo seré aún más si no nos apuramos.

No perdimos ni un solo minuto más, en un día y medio sería la boda y este viaje duraría 10 horas. ¡¿Cómo no pensé antes que se la llevaría hasta el otro lado del mundo?!

Me quedé dormida entre tanta pensamiento, después de todo, seguía un poco débil por mi reciente estancia en el hospital.

-Jessie...- Sentí una mano en mi hombro zangoloteándome- Llegamos en 5 minutos- Abrí los ojos y me asomé por la ventanilla. Volábamos sobre un lugar estilo selva. Que romántico llevarla al hogar de tarzán.

-¿Cuánto tiempo dormí?- Froté mis ojos siendo cuidadosa de no batir mi maquillaje. Después de todo tenía que verme linda para Yul
-Unas 4 o 5 horas horas- Contestó tomando el equipaje.- El viaje duró un par de horas menos de lo esperado- Sonrió.
-Ya veo.

Tomó asiento y se colocó el cinturón para que el jet aterrizara.

-¿Estás lista?- Me miró detenidamente
-Por supuesto- Miré hacia el frente decididamente.

Yul... Te he perdido por mucho tiempo, no quiero perderte para siempre.

¿La confusión? Mi mejor amigaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora