CAPÍTULO 19:

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*YURI*


Mis manos ardían, ya no podían mantenerse quietas en su cintura, así que cuidadosamente aparte ese pedazo de tela que impedía el contacto directo de piel y empecé a acariciarla delicadamente mientras mis labios recorrían su cuello y hombro con tiernos y apasionados besos.

Solo estaba pensando en mí, en ningún momento le pregunté si esto era lo que quería o si le incomodaba la situación…

-Sica…- Me separé un poco de su cuello para mirarla a los ojos – ¿No te estoy incomodando?-

Me miró con sorpresa y levanto una ceja.

-Yul – Soltó una risita- Si me incomodara… ¡¿crees que habría empezado todo yo?! Eres muy ingenua – Me sonrió seductoramente, puso su dedo índice en mi hombro y empezó a empujarme con él hacia atrás, provocando que tropezara con la orilla de la cama y cayera de espaldas en el  suave colchón. Se sentó en mi cintura y empezó a besarme suavemente. ¡Dios! Está mujer va a hacer que termine violándola.

Esta vez ella era la que mantenía el control de la situación, lamía y mordía mi cuello, acariciaba mi abdomen e intentaba deshacerse de cualquier prenda que estorbara sus apasionados movimientos.

Mi piel ardía al sentir el contacto con sus dedos, estaba perdiendo la poca conciencia y razonamiento que había mantenido por todos estos meses, me estaba volviendo loca con cada dulce movimiento suyo.

-S-Sica… Te adoro tanto.- susurré en su oído y lamí lentamente su lóbulo, obteniendo una perfecta melodía de satisfacción de sus labios.

-Y yo a ti, mi hermosa Seobang- Esbozó una sonrisa de entre dulzura y lujuria. Me encanta verla de esta manera.

Le dije adiós a mi playera y a mis jeans, la despojé de su sudadera y el sensual short que tenía puesto, dejándonos a ambas en ropa interior.

La miré de abajo hacia arriba, deteniendo a observar su hermosa cintura y los apetecibles montículos que se encontraban a unos cuantos centímetros, relamí mi labios inconscientemente y empecé a besar su cuerpo con necesidad.

Cambie posiciones, manteniéndola ahora acostada en la cama, besando su cuello y llevando mis escurridizas manos al broche de su sostén color carmín, moviendo mis dedos ágilmente para deshacerme de la poca tela que cada vez se hacía más estorbosa.

-Prepárense para… ¡OH POR DIOS! Lo lamento, lo lamento, lo lamento…

En cuanto escuché una voz intrusa entrar a la habitación me levanté tan rápido que caí al suelo.
 
-Yoona… ¡¿Acaso no sabes tocar la puerta?!- Dijo mi princesa en un tono molesto.

-Y-Yo… Es que… Manager oppa quiere que vayamos con él a algún lugar- Esto último lo dijo tan rápido que apenas pude entender lo que dijo – Lo siento mucho, solo… v-vístanse que en una hora tenemos que estar con él- salió casi corriendo de la habitación.

Ambas suspiramos pesadamente y nos volteamos a ver al mismo tiempo, ganando una sonrisa y un lindo rubor por parte de ella.

-Pues entonces vayamos- Se levantó de la cama y empezó a buscar las prendas que hace unos momentos habían salido volando- No queremos ver a la enana furiosa.

-Pero…- La miré suplicante. ¡No! Espera… creerá que soy una pervertida si le digo que quería seguir.- Debería ir a ducharme antes- Uff… estuvo cerca.

Me miró un par de segundos, soltó una risita, se acercó a mí y susurró en mi oído.

-No te preocupes, no voy a dejar que esto se quede así – Mordió levemente mi oreja – No permitiré que me dejes con la ganas-Terminó de subirse el short, guiño un ojo y salió de la habitación.

-Oh por dios…- Me lancé a la cama y sonreí como tonta.- Esta mujer es increíble.

-MUEVE TU NEGRO TRASERO DE UNA VEZ POR TODAS, BLACK PEARL- gritó desde lo lejos mi desesperada líder

-Ya me estoy cambiando- Me levanté como resorte y me dirigí al baño.

-¡Más te vale hija de Lucifer!

-No menciones Lucifer…  Recuerda que Jessie se enfurecerá si dices alguna palabra que tenga que ver con… él- Escuché a su novia comentar decir en voz baja.

-No lo había tomado de esa manera- Respondió Sica.- Gracias por arruinar una palabra más, Fany.


-Lo lamento, creí que…

-Ya mi vida, mejor vamos a que te cambies o terminarás haciendo que Jessie agarré el cuchillo de la mesa y se dirija a la casa de… él, otra vez.

-No era un chuchillo, era un hermoso utensilio para córtale las manos.-Respondió mi hermosa y celosa novia con tranquilidad

-Doy gracias a dios que soy tu amiga.

-Ya cállate, Taeyeon y corre a ver si ya puso la marrana.

Después de escuchar toda su graciosa discusión acerca de una tal marrana nos dirigimos a la empresa.


*POV ESCRITORA*


-Y… ¿para qué querías verme?- Preguntó el castaño levantando una ceja.

-¡¿No puedo conocer a el famoso Lee Donghae?!- Sonrió burlonamente

-Ajá, y la verdadera razón es…

-No eres tan tonto como pareces ¿entonces tu estupidez es fingida?- Contestó el pelinegro, Donghae hizo mala cara y se dispuso a irse- ¡No! Espera… siéntate, era solo una broma.

-No me agrada la manera en la que “bromeas” y si vuelves a hacer un comentario así, no solo me iré, sino que tu maquillista tendrá serios problemas en ocultar el gran moretón que dejaré en tu mejilla- Amenazó el mayor.

-Relájate… Además, no te cite aquí para discutir o pelear.

-¿Entonces?

-Eres muy curioso- Se cruzó de brazos y sonrío.

-Y muy desesperado. Tengo una sesión fotográfica en 30 minutos, así que más vale que hables rápido.

-Ok, Ok… Creo que ambos nos necesitamos.

-Yo no necesito de nadie, gracias- Sonrió falsamente el joven Lee.

-¿Y de Jessica?- Minho levantó ambas cejas y recargó su mentón en su mano.

-…

-Es precisamente de eso de lo que quiero hablar contigo. Ambos necesitamos y queremos a un amor “imposible”- Hizo comillas con sus dedos- Pero en realidad nada es imposible para el lindo y caballeroso Donghae, ni para el maravillo hombre Choi- Sonrió confiadamente y entrelazo sus dedos detrás de su nuca.

-No comprendo- Señaló Donghae confundido.

-Pues es algo bastante sencillo… En la guerra y el amor todo se puede, ¿no es así, mi estimado secuaz?- Sonrió ampliamente.

¿La confusión? Mi mejor amigaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora