50 Sombras ... de Mentiras, engaños, Humillación y Amor (En Renovación)

CAPITULO XXXV

Anteriormente...

-Gracias Orson- decía esta agradecida, después de comer Mely se fue a su habitación había pensado ir al colegio de su hermana pero era ya muy tarde, ya mañana iría a visitarla y ver cómo están las cosas, además por ser fin de semana podría visitarla y si podía la sacaría de ahí sin que sospecharan...
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El jueves y viernes trabajando al lado de Orson fueron realmente extenuantes este hombre era muy demandante como jefe y no había dado su brazo a torcer así sin más ante los trabajadores, como no habían llegado a ningún acuerdo pautaron una reunión para el lunes con todo el personal del sindicato, para así poder llegar un acuerdo entre ambas partes, el fin de semana paso muy rápido para Melissa, esta no pudo ver a su hermana ya que Elizabeth se encontraba en un encuentro de colegios, las niñas salían muy temprano y llegaban casi al anochecer...

-Es domingo Mely, te gustaría hacer algo, no se salir y conocer un poco la ciudad, podríamos ir al parque si quieres- Orson hablaba casi de carretilla el que lo viera hablando así pensaría que es otro y no el abogado prepotente que era.

-Quisiera ver a mi hermana pero no es posible, está en un evento del colegio y ya no está ahí- decía Mely con voz triste.

-Pero podríamos ir a dar un paseo para que te animes un poco y así me cuentas tu problema- decía Orson con su cara de inocente- quisiera ayudarte mientras este aquí en Múnich, ya después que solucione los problemas de la empresa que me trajeron aquí debo volar a Estados Unidos- de verdad quería ayudarla por alguna extraña razón sentía una infinita ternura por esta mujer, así como también sentía una ganas de poseerla increíbles pero eso debía de esperar, para eso tendría que seducirla de a poco, la cara de Mely se ilumino- Podemos ir al English Garden, es un parque muy bonito podemos ir allá y pasar una tarde diferente- decía este tratando de convencerla-¿Quieres ir?- esta asintió, parecía niña pequeña- ve y prepárate, te puedes poner unos vaqueros, nada formal o clásico- Melissa se fue a su habitación, Orson se quedó observándola, qué coño estaba haciendo, se decía para sí mismo, yo no soy así, me gusta regalar flores pero cuando quiero más de lo que me han dado y esta mujer no me ha dado nada. Quince minutos después una feliz Melissa salía de su habitación con unos vaqueros, las zapatillas de medio tacón con las que había llegado y una de las camisas que uso en los días que había trabajado, se veía hermosa, pensó Orson.

-Estoy lista, nos podemos ir cuando gustes- dijo con su sonrisa inocente- te parece bien cómo voy vestida- que si la parecía bien se veía hermosa, y solo se había puesto un poco de brillo labial, el cabello suelto y pequeños rizos se le formaban en las puntas, además del simple atuendo, olía a frutilla y miel, un splash que compro el día que compro la ropa, era algo relativamente insignificante, pero que a él le resultaba estimulante.

-Estas muy bonita Mely, ven vamos- decía este tomándola de la mano y entrelazando sus dedos, Mely al ver el gesto sonrió y se ruborizo al mismo tiempo. Salieron del hotel rumbo al parque, Bertrán los esperaba afuera con el coche listo, por suerte lo había llamado y el hombre pudo trabajar un domingo, al llegar al restorán comieron platos sencillos pero típicos de la región, Mely estaba encantada, hacia muchísimo tiempo que no pasaba una tarde libre, sabía que su hermana estaba bien pero cuanto antes se la llevara lejos de su tía mejor, salieron de comer y Orson le pidió al chofer que los llevara al English Garden ese parque era único en su estilo ahí podrían pasar un rato agradable, el rubio le dijo al chofer que se fuera que si lo necesitaba lo llamaría, no le parecía que el hombre mayor estuviera ahí esperando por gusto, caminaron durante unos minutos y fueron directo al bar libre que estaba en el parque, Orson pidió dos cervezas y se las llevó a la Torre China, ahí podrían hablar tranquilamente sin el bullicio de la gente que estaba en el bar.