CAPÍTULO LXXIII

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Anteriormente...

-Gracias chicos- Ana se regresó de manera veloz, le dio un casto beso a cada uno y salió disparada a la oficina de Christian, al entrar lo vio mirando por el ventanal, este al escuchar la puerta volteo, Ana enseguida se le lanzo a los brazos y le devoro la boca con pasión...
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-¡Feliz cumpleaños nena!- le dijo Christian levantándola en vilo en aquel abrazo y después del magistral beso que se dieron, Ana le dio su mejor sonrisa, aquella que solo podía ofrecerle al hombre que amaba.

-Gracias Christian- decía Ana emocionada y los ojos cristalinos, lo abrazo de nuevo enterrando la cabeza en el hueco de su cuello, soltando un sollozo.

-¡Hey nena! Que pasa amor- Christian, la bajo con cuidado y tomo su rostro entre sus manos- no quiero que llores y mucho menos hoy, que es un día especial para ti- le decía Christian mimoso- ¿Dime que pasa, por qué lloras?- Ana con la mirada baja se encogió de hombros, como restándole importancia- dime- decía este serio en su tono CEO- sabes que la paciencia no es una de mis virtudes.

-No se amor creo que tengo sentimientos entremezclados- decía esta en voz baja- ¿me abrazas?- le dijo triste, Christian la abrazo por un momento y la escucho decir- Te amo Christian Grey.

-Yo también te amo Anastasia Steele- dijo este buscando su mirada- pero ya deja de llorar que no me gusta verte así, ¿sabes?- Ana negó con la cabeza- ¡Estas preciosa!- Ana sonrió mimosa, Christian le limpio el rostro y se la llevó al sofá que tenía ahí en su oficina- ven quiero tenerte unos minutos para mí, sentémonos aquí- Christian se sentó y sentó a Ana en su regazo, Ana al sentir su pene semi erecto se mordió el labio- no hagas eso Anastasia, sabes el efecto que me provoca- decía este jalando su labio con sus dedos. Ana sonrió picara- mejor centrémonos en otra cosa- metió la mano en el bolsillo interno de su chaqueta y saco una caja de terciopelo azul con letras doradas que decía Acero Buckley, al abrirla consiguió una pulsera tipo brazalete, casual en acero de muy fino acabado, con dos delicados hilos gruesos de acero entorchado, en cada punta de los gruesos hilos un semicírculo dorado y antes de estos semicírculos tenía varios anillos pequeños por donde pasaban el grueso hilo, los anillos en colores rojo, azul, blanco y algo así como tornasol, muy delicados en diferentes piedras diminutas como zafiros, rubís, diamantes, swarovski, en medio de estos un anillo de acero blanco y dorado. Ana cambio la expresión de su rostro, este se le ilumino. Ana empezó a decirle que no tenía que haberse molestado con un regalo tan fino, pero se dio cuenta que Christian no la escuchaba.

 Ana empezó a decirle que no  tenía que haberse molestado con un regalo tan fino, pero se dio cuenta que Christian no la escuchaba

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Christian POV

Qué bueno que le gusto mi regalo, solo con ver como se le ilumino el rostro, esa mirada llena de ilusión, es mi mayor recompensa aunque...Ufff... lo que Ana no sabe es que entre Taylor y Ryan, bajo mis órdenes, su concejo e ideas, me han ayudado con personal muy calificado del FBI a colocarle un localizador al brazalete, ha costado algo de dinero pero eso no me importa, primero esta Ana y su seguridad, es lo último en tecnología, para protección de agentes y testigos de alto perfil, creo que al enterarme de que el malnacido de Hyde, logro escaparse de la cárcel, matando un policía y su compañero de celda, no cabe duda que este tipo está detrás de Ana, ya la policía esta avisada, y el carro ese que sale en los videos de las cámaras, era del compañero de celda de ese engendro- "Christian aparta esos malos pensamientos" "le dijo su subconsciente. Si es cierto si no mi Ana se va a dar cuenta, solo falta convencerla que lo cargue a diario, si no recurriré al otro dije.

50 Sombras ... de Mentiras, engaños, Humillación y Amor (En Renovación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora