50 Sombras ... de Mentiras, engaños, Humillación y Amor (En Renovación)

CAPITULO LXXXIX

Maratón: 3/3

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-No me molestas Ana y lo de tonto ya lo arreglaremos mañana- Ana trago grueso. La siguiente media hora hablo con Christian desahogándose, no le quiso decir nada con el episodio de Brad, ya se lo contaría al día siguiente. Lo que Ana no se había dado cuenta es que Brad la miraba desde la oscuridad de la sala, por suerte este no escuchaba lo que Ana hablaba, solo que lloraba desconsolada. Después de aquella conversación y de llorar lo suficiente, Ana se fue a dormir un poco más tranquila. La mañana amaneció al igual que ella, nublada, gris y triste.

-Buenos días Val- Ana entraba a la cocina con Maddy en brazos.

-Hola mi pequeña traviesa- le decía Val a Maddy, ¿dónde está la niña más linda del mundo?

-Ati Valí, ati toy- decía Maddy con emoción levantando los bracitos- veda mami que ati toy, dinda, pincesa mi- decía Maddy con emoción.

-Si mi consentida, Valí la niña más linda está aquí- decía Ana tratando de darle apoyo a su hija, Maddy rio complacida, si no fuera por estos momentos mi vida sería gris y sin sentido "pensó Ana".

-Buenos días- decía Brad al entrar a la cocina, las mujeres lo vieron y con un escueto buenos días le contestaron.

-¡Papiii!- chillo Maddy al ver a su padre- ven papi, beshito mi y mami- Ana rodo los ojos y los cerro, sintió el leve toque de Brad en la cabeza y mirando a su pequeña lo miro.

-No me toques- le dijo entre dientes aun molesta, dolida- Maddy quédate con papi, que mami se va a dar una ducha y a cambiarse para ir a trabajar- la niña aplaudió y Brad la tomo en brazos.

-Desea café o jugo- le decía Val, tratándolo con distancia.

-Val quería discúlpame por lo de anoche, sé que no debí hablarte así- le dijo el hombre con arrepentimiento.

-No se preocupe Brad, a veces es mejor recordar las distancias entre empleada y jefe- le dijo Val dolida.

-Está bien Val, me merezco que me trates con indiferencia- la mujer no lo miro, prefirió ignorarlo para terminar de hacer el desayuno. Media hora después Ana salía lista de su habitación, se encontró a Brad en el cuarto de Maddy cambiándole la pijama y siguió de largo, en la cocina estaban los demás.

-Buenos días a todos- decía Ana acercándose a su mama y dándole un beso- ¿a qué hora se van mama?- decía Ana triste, al ver el equipaje, Carla la abrazo.

-Estas muy linda mi amor- Ana sonrió con coquetería, llevaba puesto unos jeans ceñidos al cuerpo casi como una segunda piel de color negro, botas negras de caña alta, y un sweater de color ciruela cuello alto, manga ¾ bastante elegante y a la vez algo casual, dejo su cabello tal cual se ponía, no tenia deseos de llevarle la contraria- Debemos esperar a que Christian disponga del Jet cielo, Bob dijo que lo llamaría más tarde- Ana torció el gesto.

-No quisiera que te fueras mami- le decía Ana con ojos cristalinos, Carla le dio un beso en la sien.

-No tiene por qué irse Carla, usted y Bob se pueden quedar- decía Tiff- y antes de que me digan algo del pendejo de mi hermano, quiero decirles que esta también es mi casa y se pueden quedarse aquí en tiempo que necesiten- decía la pelirroja convincente, Bob la miro algo serio.

-Disculpe Tiff, pero lo mejor será que nos vayamos, además quiero ir a Savannah para arreglar unos pendientes y luego en unos días regresaremos por unos días más a un reservado que alquilare- decía Bob serio. Tiff suspiro derrotada, todo por culpa de Brad "pensó Tiffany".

-Bueno mami me tengo que ir, supongo que su vuelo será por la noche- decía Ana con la voz apagada- voy a tratar de venir temprano, además mi papa me mandó un mensaje ayer y me dijo que quería venir hoy, que ya me había dado suficiente espacio contigo- Carla rodo lo ojos, Ray y sus cosas "pensó esta", Ana rio al ver la expresión de su madre.