El pequeño de mamá

Capítulo 8: ¿Por qué yo no tengo eso?

Disclaimer: Los personajes pertenecen a Stephenie Meyer, yo solo me adjudico la historia, prohibida su publicación en otros sitios sin mi consentimiento.

- ¿Y te acueldas cuando Edwald se cayó?-el pequeño le dijo a su mamá entre risas.

-Claro que si me acuerdo, bebé -Bella rió con ganas. Edward solo se pudo encoger en el asiento del copiloto.

Chris había entrado a los juegos y le pidió a Edward que lo esperara en el final del tobogán para que lo agarrara. Edward espero pacientemente a que Chris subiera hasta lo más alto y que luego se bajara por el tobogán, pero el niño al tener las piernas tan cortas tardo bastante en llegar hasta arriba. Edward, cansado se asomó por el tobogán pero ningún niño venia, miró alrededor y vió que Bella estaba agachada anudando las agujetas de una pequeña. Edward se pusó de espaldas al tobogán y vio como el pantalón que usaba Bella se ajustaba a todas sus curvas, no podía apartar la mirada de ella.

Bella terminó y le sonrió a la niña pelijorra la cual le regresó la sonrisa, la pequeño volvió a correr hacia sus padres. Bella se levantó y miro hacia Edward, el cual tenía su sonrisa torcida característica. Bella solo negó con la cabeza mientras se acercaba a él.

La mirada de Bella cambio.

- ¡cuidado! -solo alcanzo a decir, cuando Edward sintió que era golpeado en la espalda, por suerte cayó en la colchoneta que había para proteger a los niños, pero nadie lo pudo salvar del silencio que se instalo en el área de juegos.

-Edward ¿etás bien? -Chris se acercó a él con la cara llena de angustia. Bella también se acerco a él.

- ¿Estás bien?-repitió la misma pregunta que Chris, aunque aguantándose las ganas de reír.

-Mmh...si -Edward intentó levantarse del suelo, Bella y Chris lo ayudaron. Edward sintió dolor en su espalda baja.

- ¿Quieres ir al médico?

-No está bien, Chris sigue jugando, yo me voy a sentar un ratito-le sonrió al niño y le despeinó el cabello.

-No...ya no quiero jugar. -Chris tenia lágrimas a punto de caer de sus ojos -Ya me quiero ir a casa.- El pequeño estaba asustado, pensaba que había lastimado fuertemente a Edward.

-Vamos bebe, no pasa nada, Edward se va a sentar un ratito y va a estar bien.

-No...no quiero jugar, quiero irme -Bella ayudó a sentar a Edward y Chris lo abrazó.

-Bien, recoge tu juguete y vámonos.

Los tres iban caminando rumbo al estacionamiento, cada vez que Edward caminaba soltaba un quejido. Bella ya no pudo aguantar la risa y empezó a reír. El pequeño al ver que su mamá reía, también empezó a reír y pronto las risas tímidas se convirtieron en un ataque de risa por parte de Bella.

-Lo siento...lo siento-dijo tratando de calmarse.

- ¿Mami? ¿De qué nos reímos?-preguntó Chris subiéndose a su silla.

-De Edward, cariño -dijo Bella, Edward la miró con el ceño fruncido.

-Ah... ¿Cuándo se cayó? Fue divertido -Empezó a reír el pequeño

Bella y Chris seguían en silencio pero de vez en cuando soltaban risitas.

-Bella...por favor-suplicó Edward.

-Lo siento cariño, pero debes de admitir que fue divertido. -se acercó a él y le dio un beso en la mejilla a Edward-te mirabas lindo todo sonrojado.