Escritos cortos

Nick Weyler // ESCRITO CORTO 3

Situación III, 3ra temporada 

Narra Nick.

- No luces bien – Doris estaba mirándome con los ojos como platos. Y de seguro tenía razón. ¿Cómo demonios iba a lucir bien si estaba a punto de pedirle a Elaine que se casara conmigo?

- No tienes que decirme algo que ya sé – suspiré y seguí dando vueltas en la habitación. Brent entró con una botella de agua y me la tendió.

- ¿Ya es hora? – preguntó. Bebí un sorbo antes de responder.

- Ella debería llegar en... – miré mi reloj de pulsera y tragué saliva con fuerza. Nunca estuve tan nervioso. – Veinte minutos.

- ¡Estoy tan emocionada! – Doris sonrió en grande. – No puedo creer que tengamos que escondernos aquí mientras tú le pides a mi mejor amiga que se case contigo.

- Me siento mal por no haber ido a la premier de la película de Elaine – Brent hizo una mueca. – Aunque estoy seguro de que no le importará una vez que vea el anillo.

- Es precioso – Doris lo estaba observando con los ojos brillantes y una sonrisa. – A Elaine va a encantarle. Te lo aseguro.

- ¿Y si dice que no?

¡Dios! No había querido pensar en esa posibilidad. Es decir, Elaine y yo habíamos estado prácticamente juntos desde siempre y no quise que se me pasara por la cabeza aquel pensamiento horrible. ¿Y si decía que no? ¿Y si realmente no me amaba?

Me dejé caer en la cama del cuarto y Brent se sentó a mi lado.

- Es imposible que diga que no – me dio un pequeño empujón.

- Te adora, Nick.

- ¿Cómo sabes?

- Porque no para de hablar de ti todo el maldito día – Doris rodó los ojos. – Escucho más tu nombre que el mío.

Solté una carcajada nerviosa.

- Lo siento...

- No lo sientas – Doris sonrió otra vez, había estado sonriendo desde que le había dicho que quería proponerle a Elaine que nos casáramos. – Hacía mucho tiempo que Elaine no era tan feliz, y sinceramente, si debo aguatarla diciendo tu nombre doce veces dentro de los mismos diez minutos, lo haré.

- Hermano, Doris tiene razón – dijo Brent. – Conozco a Elaine desde que éramos niños y si hay algo que sé distinguir... es su verdadera sonrisa. Y ella sonríe de verdad cuando dice o escucha tu nombre.

- Pero la he dañado tanto – solté de pronto. Todas aquellas veces que metí la pata se me vinieron a la mente y no pude evitar sentirme pésimo.

- No pienses en eso –gruñó Doris. – Si algo he aprendido de Elaine, es que tenemos que perdonarnos unos a otros.

- No te la mereces – rió Brent. Doris le lanzó una mirada asesina. – Quiero decir, es una gran chica, no te la mereces.

- Repetiste que no me la...

- ¿Mereces? Claro que no te la mereces. Pero está bien, la haces feliz y eso es importante – Brent me abrazó con fuerza. – Y ella te hace feliz, lo que es todavía más importante. Eres mi hermanito menor, quiero que te quedes con la chica.

- Gracias Brent – sonreí también. Ambos me habían dado las últimas palabras que necesitaba para poder ponerme de pie e ir por mi chica. Por Elaine.

Doris miró la hora en su móvil y echó un vistazo al pasillo del hotel.

- Es hora – me miró emocionada. – Está afuera del cuarto.

- ¡Ve, tigre! – dijo Brent. – Tú puedes hacerlo, Nick.

Doris me jaló del brazo, porque por algún motivo, yo no era capaz de moverme.

- No olvides lo que tienes que decir, tal y como lo ensayamos...

- Sí, hermano, como lo ensayamos. Caerá rendida a tus pies.

Me empujaron fuera del cuarto y fue cuando vi a Elaine al final del pasillo, batallando para encajar la llave en la cerradura.

Mis piernas temblaban y mi corazón latía con más fuerza que nunca. No había visto a Elaine en meses y estaba a minutos de pedirle que pasara el resto de su vida conmigo.

Tenía que estar muy loco.

Caminé en su dirección y tomé una gran bocanada de aire.

- ¿Necesita ayuda, señorita? – fue lo primero que salió de mis labios.

Elaine se dio la vuelta y me miró boquiabierta. Unos segundos más tarde, reaccionó y me abrazó con mucha fuerza.

La rodeé con mis brazos, y escondí mi rostro en su cuello. Era su aroma, o quizás los latidos de nuestros corazones, no lo sé, pero me encontraba aturdido.

Iba a pedirle que se casara conmigo. A Elaine, a mi Elaine. 

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Sé que me tardé un montón en traerles la 3ra parte de la cabeza de Nicholas (?

Lo siento, me puse a trabajar en otras cosas y se me olvidó que debía hacer esto. Espero que les guste, sé que es cortito, todos los escritos de Nick son así, son solo para que conozcan un poquito lo que nuestro rey nick pensaba, sentía y vivía<3

Al escribir estos anexos, me he dado cuenta de que quizás Nick amaba más a Elaine de lo que Elaine amaba a Nick, ¿no creen? ¿Qué les parecen los escritos de nick hasta ahora? 

Falta uno solito, se los daré para navidad :D