Una parte de mi alma

Capítulo 3

- Es alucinante, de verdad John, jamás había conocido a una persona así.

Habían pasado 5 horas desde el momento en que Lauren le había dado su número a Camila y esta no había podido resistirse a mandarle aunque fuera un audio a su amigo.

-Es inteligente y vivaz y su voz es tan increíble- suspiró la joven apoyándose en una de las paredes de su cuarto.- Jamás alguien había interrumpido uno de mis discursos y me pareció tan sexy -exhaló todo el aire que había en sus pulmones- Ni si quiera se como explicar ese concepto de sexy. Es tan extraño todo esto. Hacia años que no me gustaba alguien de esta manera y sólo he hablado con ella una vez pero no quiero que esto vaya rapido pero a la vez si y creo que estoy empezando a hiperventilar- exclamó Camila dándose cuenta de que el teléfono comenzaba a temblar en la palma de su mano.

-Creo que tendrías que tranquilizarte un poco, Camz - respondió John al audio con una carcajada- Has tenido mucha suerte de encontrar a alguien igual o parecida ti en tu primer día de clase y te aplaudo por ello. Ahora simplemente relájate y disfruta por que nunca sabes lo que puede llegar a pasar.

-Gracias tio, de verdad. Realmente no se como me llevas aguantando todo este tiempo. Si no fuera por ti me pasaría 12 horas al día hablando con la pared de mi cuarto sobre música- dijo Camila finalizando la conversación con una gran sonrisa.

***

Pasaron otras 3 horas y lo único que Camila podía hacer era dar vueltas en su cama sin parar.

-Quiero llamarla- exclamó Camila con miedo y dudas- Ya no recuerdo como era su voz y sólo han pasado 8 horas desde que hemos hablado.

-¿No crees que estas exagerando un poquitin?- preguntó Jimmy intentando que su cara no mostrara lo divertida que le resultaba la situación- La has conocido hoy y casi te estas planteando montarte tu propio adosado y adoptar niños.

-No, un adosado no, yo soy más de apartamento.

-¡Ves!- exclamó golpeándose la frente con la palma de una de sus manos- Seguro que ya tienes los nombres de los niños.

-Clarice, James y Sulivan- susurró Camila mirando fijamente al techo casi de manera automatica.

-Oh dios mio Camila- suspiró Jimmy - Escribele de una maldita vez antes de que tu cerebro estalle.

Con pulso firme y sacando valentía de donde jamás había existido marcó el número de Lauren.

Un tono, dos tonos.

-¡Por que no me lo coge!- gritó Camila desde sus adentros- Seguro que me ha dado el número mal.

L: ¿Hola?

C:Emmm si hola

L:¿Puedo saber quien me llama?

C:Si, bueno, soy Camila, la chica del cubo de rubik que se sienta a tu lado en clase.

L:¡Anda! Hola Camila ¿todo bien?

C:si, si. Todo bien

L:¿ Y puedo saber el por qué de tu llamada?

C:bueno, simplemente quería saber que tal te iba todo y como te había dicho antes que te escribiría.

L:Si, es cierto pero ahora mismo estoy un poco ocupada. Estoy fuera de casa y no se por qué cada vez que salgo de ahí mi móvil tiene muchas interferencias.

C:Oh, de acuerdo pues supongo que nos veremos mañana ¿no?

L:Si, si. Mañana nos vemos en clase.