-Me encanta este sitio- exclamó Camila tras darle un bocado a su sandwich vegetal.
-¿Eres consciente de que estamos sentadas en un simple muro del patio del instituto verdad?- preguntó Lauren a la joven mirándola mientras con sus manos sacaba el almuerzo de su mochila.
-Si, pero me parece realmente genial.
Las clases habían terminado hacia pocos minutos y ambas estaban agotadas y asfixiadas por la presión del mundo y los estudios asi que habían decidido tomarse un pequeño descanso antes de volver a la realidad de sus absurdas y trágicas vidas.
-¿Y por qué te gusta tanto estar aquí?- preguntó Lauren a Camila mientras desmenuzaba con cuidado parte de su comida.
-Me gusta por que hay silencio. Ahora todo el mundo se ha ido y realmente se puede apreciar el valor de todo esto: el valor del que no haya sonido en un sitio donde normalmente hay caos y un poco de destrucción. Me gusta porque si cierro los ojos puedo oír perfectamente como el viento intenta esquivar las ramas de los arboles y como el suelo cruje ante la bajada de las temperaturas a causa de este extraño invierno.
-Eres mas hipster que un muffin en un starbucks- respondió Lauren con rotundidad- pero es realmente bonito lo que acabas de decir.
-¿Alguna vez te tomas enserio cualquier cosa?- preguntó Camila ante el comentario de la joven.
-Claro que si pero tu siempre estas soltando discursos existenciales basándote en el temporalismo de tus opiniones y yo soy mas de filosofía griega y de Kant o incluso de Nietzsche.
-¿Sabes que Nietzsche acabó metido en un manicomio verdad?
-Si, por eso me resulta tan gracioso.
-¿Gracioso uno de los mayores filósofos de la historia?
-Mejor que un discurso divagante con respecto a los arboles en el viento...
-Nietzsche era una puta- exclamó Camila con disgusto guardando sus cosas en su mochila e intentando marcharse de la manera mas dramática posible.
-En todo caso mi puta- respondió Lauren intentando agarrar el codo de la menor- Venga no te enfades- dijo acariciando el brazo de la joven en cuanto pudo detenerla.
-¿Vas a parar ya con tus filósofos o voy a tener que leerme un puto libro para poder mantener una conversación coherente contigo?
-Nada en esta vida es coherente- respondió Lauren cogiéndole de la cintura- Por eso me gusta tanto hablar contigo.
-Dos preguntas te doy hoy, dos y me marcho a casa que el frio me esta entrando en los calcetines- dijo Camila volviéndose a sentar en su lugar.
-De acuerdo- exclamó Lauren con una gran sonrisa- Pregunta número uno, cual de estos personajes famosos te parece mas gay: Ryan Gosling, Robert Pattinson o Stuart Weitzman.
-Ninguno de los tres es gay, ademas ¿que tiene que ver esa pregunta conmigo?- preguntó Camila confusa.
-Nada, pero es algo que me gustaría saber.
-O me haces una pregunta minimamente coherente o te juro que me voy.
-Vale- respondió Lauren acercándose a la joven- ¿Cual es tu color favorito?
-El azul- respondió Camila con una gran sonrisa.
-El mio también ¿que opinas de los delfines?
-Me resultan unos animales increíbles, adorables y achuchables.
-¿Tan increíbles y adorables como yo?
-¡Lauren!- exclamó Camila sorprendida.
-Pero si es una pregunta coherente, no se por que te pones así- respondió la joven a la defensiva.
-Son unos animales muy ágiles y tu no lo eres tanto como pareces.
-¿A no? sabes muy poco de mi Camila.
-Si me contaras cosas de ti en vez de decir estupideces puede que las pudiera apreciar.
-Pues bien- dijo Lauren aclarándose la garganta- Soy fría, voluble, excéntrica, tímida, ansiosa, increíble...
-Puedes dejar de usar adjetivos en cualquier momento ¿lo sabes no?- preguntó Camila mordiéndose el labio inferior.
-Si, lo se- respondió Lauren pensativa- también soy guapa, mi pelo es precioso y soy increíblemente modesta.
-Se ve- dijo Camila con una carcajada.
-Me gusta mucho tu risa- dijo Lauren apartándose el pelo de la cara.
-¿Podrías no hacer eso?- exclamó Camila.
-¿Hacer el que? ¿esto?- respondió Lauren retirándose nuevamente el pelo de la cara.
-Para- respondió Camila de manera cortante- ¿Por que no haces caso a absolutamente nada?
-Soy una chica rebelde- exclamó Lauren golpeando su frente con la palma de su mano- Ese, ese era el adjetivo que me faltaba.
-Pues te sugeriría que no volvieras ha retirarte el pelo de esa manera si quieres seguir existiendo.
-¿Y que me harías si no lo hago?- preguntó la joven acercándose al rostro de Camila.
Con el corazón en un puño, Camila se intentó alejar disimuladamente de la mayor pero ésta viendo las intenciones de la menor no permitió que moviera ni uno solo de sus músculos.
-¿Tanto te gusto que ni si quiera puedes estar cerca de mi?- preguntó Lauren a Camila entre susurros intentando que esta se pusiera aun más nerviosa de lo que estaba.
-Me pones nerviosa- suspiró Camila empujando a la joven tras colocar sus manos en su pecho.
-No vas a ir a ningún lugar, pequeña- exclamó Lauren esquivando la advertencia de Camila.
Paralizada, Camila decidió seguirle el juego a la joven la cual con su mano había rodeado la cintura de la menor.
-¿Por qué tu respiración es tan rápida?- preguntó Lauren con picardia.
-¿Por qué haces unas preguntas tan absurdas?- respondió Camila notando el aliento de la joven sobre ella.
-No son absurdas, son el resultado inequívoco de un análisis conceptual basado en que los latidos de tu corazón se puede escuchar desde aquí.
-¿Y ahora que hago? ¿me rindo ante ti?- preguntó la joven viendo que no había escapatoria.
-Simplemente permiteme saber a que sabe tu perfume- exclamó Lauren pasando su nariz lentamente por el cuello de Camila.
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Una parte de mi alma
Fanfiction"Escuchaste mis suplicas y solo así pude expresar todo lo que hacia cabida en lo mas profundo de mi alma" Camila es una chica dulce, buena y amable pero el mundo no lo sabe. Lauren es una chica cálida , sensible y astuta pero el mundo no lo sospecha...