My little sunshine.

Capítulo 25-Hermano.

Esto estaba sucediendo. ¿Por qué fui tan estúpido? No debí salir de casa y mucho menos con Elizabeth. Nada me sacaba de la cabeza que él la tenía, el cuervo la había raptado de nuevo estando a mi cuido, por eso me la traje de Texas, para protegerla, falle, falle como padre.

Me levante de golpe y le murmuré a Jay un:

-Avisale a Tom, quiero que aseguren todo el lugar -dije intentando no desesperar. Mire a Wendy que estaba preocupada y Natalia se notaba nerviosa mientras sus manos temblaban, Jay hizo lo que pedí y caminamos hasta la piscina donde Luca y Avan charlaban, llame su atención y me observaron con atención.

-¿Qué sucede? -preguntó Avan.

-No conseguimos a Elizabeth -suelto de golpe ya ambos se paran.

-¿Están seguros? ¿ya hablaron con seguridad? ¿y si esta en el baño? -repite las mismas preguntas de forma angustiada Luca.

-No puede ser, hace un rato estaba con ella -dice Avan.

-¿Dónde? ¿hace cuanto?

-Veinte minutos aproximadamente ¿la buscaron bien? -responde Avan. Jay se acerca a nosotros con uno de nuestros guardaespaldas líder, Tom.

-La entrada y salida están cerradas, no esta ni en la cocina, ni en cuartos y menos en el baño. Al parecer la niña ha sido raptada. -habló Tom mirándome fijamente. Me ardió la sangre, yo les pagaba para que velaran por nosotros y sucedía esto. Respire hondo y jale con fuerza mis cabellos, me gire a Tom frunciendo el ceño, lo tomé del saco oscuro para quedar cara a cara.

-Quíero que consigan a mi hija ¡de inmediato! -ordené para soltarlo. Él solo asintió y llamo a un par de hombres para irse. Nos topamos con el primogénito de Nick, un niño de 10 años.

-Trevor ¿has visto a la hija de Nathan, Elizabeth? -preguntá Wendy a su hijastro. Él niega con la cabeza.

-Acabo de llegar del partido con Mike ¿recuerdas? -dice el niño tranquilo. Le reste importancia al hijo de mi amigo para seguir buscándola, los chicos comenzaron a gritar su nombre y por mi parte,estaba perdiendo la poca esperanza de que mi princesa apareciera. Hace segundos que no veía a Mattias.

-Jay ¿sabes donde esta tu hijo? -él me miró preocupado.

-No lo sé. -empezó a gritar ambos nombres. Nadie daba respuesta de ninguno de los niños y los guardaespaldas tampoco tenían respuesta de nada. De las escaleras veo bajar a Nick, al pequeño Max y Mattias. Suspire de lo mas seguro es que mi hija también este con ellos.

-¿La niña está contigo, cariño? -preguntá Wendy a su esposo.

-No cielo ¿por qué? ¿sucedió algo? -mira cada uno de nosotros.

-Elizabeth no aparece, lo mas seguro es que él la tenga -sentencia Luca.

-Ni siquiera los guardaespaldas o las sirvientas la han visto. -habló Jay.

-Estaba con los niños mostrándole unos discos, hace un rato ella estaba con nosotros y dijo que iría a buscar a Nathan para irse a bañar. -dice nervioso acercándose a nosotros. No escuché mas y corrí hasta la piscina, mi hija podría necesitarme y si se ahogaba o pasaba a peores jamás me perdonaría algo como esto.
Visualice toda la piscina sin encontrarla, sin mas me tire al agua con todo y ropa.

Ella no aparecía por ningún lado y mis ojos ardían de tanto buscarla bajo el agua. Me consideraba el idiota mayor por haberla descuidado, eso solo aclaraba que era el peor padre. Coloque mis brazos en la orilla de la piscina y oculte mi cara.

-Hasta que por fin entraste al agua por tu propia voluntad -escuché risas. No estaba de humor para chistes en una ocasión como esta, mi hija se había extraviado y estaba seguro que esta bajo las garras de esa bestia.