capitulo 11

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Un fuerte dolor de cabeza azotó a Carolina haciendo que abriera los ojos lentamente.
Pese a tener la vista borrosa podía ver que no estaba en el monte, sino en una cueva, atada de pies y manos.

-Mark despierta – dijo Carolina en voz baja, pero Mark no daba aún señales – Joder – dijo agitándose

Carolina intentó escapar usando los poderes, pero no funcionaban.

-No lo intentes, no funcionará – dijo Roldán sonriendo
-¿Qué nos has hecho? – preguntó Carolina seriamente
-Bueno, como un guardián no se puede extraer lo que he hecho es anularlo – dijo Roldan sonriendo – Siempre quise tener un guardián, pero no me fue concedido
-¿No tienes un guardián? – Preguntó Carolina sorprendida -¿Y cómo has generado esa nube?
-Es artificial, se supone que mi guardián sería capaz de hacer algo con el viento – dijo Roldan sonriendo – Pero veo que tú tienes más aguante que Él – dijo señalando a Mark

Mark seguía sin moverse y Carolina estaba algo inquieta.

-Tranquila, saldremos – dijo una voz débil

Carolina miró a todos lados y vio a Mark emitiendo una pequeña sonrisa.

-No estás sola, entre los tres saldremos – dijo Mark en un tono muy bajo
-¿Los tres? – dijo Carolina en voz baja
-Estoy aquí – dijo una voz dentro de Carolina

Roldan se marchó dejando solos a Carolina y a Mark. Pero había algo raro en esa situación.

-Carolina, no hagas nada – dijo Mark en voz baja – Está vigilando

Carolina miró a todos lados y notó una pequeña nube en el fondo de la cueva.  Peor Carolina no se dejó asustar. Sus ojos comenzaron a enrojecer con fuerza, sus pupilas se dilataron, y sus ojos castaños se convirtieron en un rojos como el fuego.
Estirando con todas sus fuerzas consiguió soltarse de las cadenas y de liberar a Mark. Sin dudar un momento rompió la puerta dela celda y fue directa a por Roldan.
Roldan estaba tirando en el suelo temblando de miedo ante los ojos de Carolina.

-¿Quién…eres tú? – preguntó Roldan asustado
-Soy lo peor con lo que te podías topar – dijo cogiéndole del cuello de la camiseta
-No puedes hacerme nada, tengo todo mi cuerpo cubierto por nubes que me protegen – dijo sonriendo

Carolina golpeó a Roldan en el estómago con todas sus fuerzas y las nubes que le rodeaban desaparecieron al instante. Carolina dejó caer un pequeño aparato que había cogido del cuerpo de Roldan.

-¿Qué era eso? – preguntó Mark sonriendo
-Esto generaba las nubes – dijo Carolina calmándose – No es un guardián, tenemos que seguir

Carolina y Mark abandonaron a Roldan en la cueva, dejándole derrotado y humillado ante su propio invento.
SU siguiente destino no estaba claro, pero debían darse prisa, ya que Johan estaba a punto de comenzar su ataque

Los 4 elementos el renacer del aguaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora