capítulo 13

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Tras unos días en la habitación recuperándose, por fin Carolina estaba recuperada del esfuerzo. Mark la había estado cuidando todos los días haciendo que no tuviera que esforzarse mucho. Pero cada noche Mark salía de la habitación para entrenar, para mejorar y poder ayudar a Carolina.

-¿Cuál es la siguiente parada? - preguntó Carolina
-Pues estamos muy cerca de la isla de Reino Griego, allí hay un posible portador que puede absorber habilidades de otras personas - dijo Mark leyendo el informe - Dudo que pueda copiar las habilidades de un guardián
-No lo sé, esperemos que no - dijo Carolina sonriendo

Mark y Carolina abandonaron la habitación del hotel para dirigirse al puerto más cercano y coger un barco a su próximo destino. Pero se toparon con algo que no debían.

-Alto por favor, FBI - dijo el hombre seriamente - Han sido identificados en la escena de un crimen recientemente, ¿pueden venir conmigo? - preguntó sin quitarse las gafas de sol
-Bueno, tenemos algo de prisa, ¿puede ser otro día? - preguntó Mark sonriendo
-Lo siento señor gracioso, pero usted viene detenido - dijo el policía seriamente
-Carolina, ¿a la de tres? - dijo Mark sonriendo
-Claro - dijo con una sonrisa

Mark y Carolina contaron en voz baja y en el momento preciso, en el segundo exacto Carolina golpeó al policía en la espalda y Mark agarró al policía y lo sumergió parcialmente en el suelo, dejando solo visible el torso de aquel policía.

-¿No morirá aplastado? - preguntó Carolina preocupada
-No tranquila, hay un hueco en medio para evitarlo, he pensado en ello - dijo Mark sonriendo
-Entonces vámonos - dijo Carolina cogiendo la maleta
-¡No podéis escapar de un agente del FBI, os encontraremos y os arrestaremos! - gritó desesperado el policía

Mark y Carolina se alejaron rápidamente y enseguida llegaron al puerto donde cogieron el barco que necesitaban.

-¿Cuánto tardará en soltarse? - preguntó Carolina mientras buscaba la habitación por el barco
-Supongo que en dos horas irán a por él - dijo Mark sonriendo
-¡Esta es! - dijo Carolina sonriendo

La habitación era muy lujosa, con una alfombra en el suelo, una cama gigante en el centro, un gran tocador y un baño con una bañera para los dos.

-Esto...¿ha sido muy caro? - preguntó Carolina preocupada
-Qué más da, disfrutemos del viaje juntos - dijo Mark besando dulcemente a Carolina

Pese al peligro de la situación, podían tomarse un descanso, relajarse y disfrutar de la soledad los dos juntos. EN el templo apenas tenían intimidad, entre las clases, la cantidad de gente y que hasta hace poco estaban a punto de morir, no era el mejor momento para pensar en una relación.
Pero ahora están en calma, disfrutando del sonido del mar, la brisa acariciando sus rostros mientras sus ojos se pierden en el océano infinito.
Nada, ni nadie los separaría nunca más, su destino es estar juntos hasta el final.

Los 4 elementos el renacer del aguaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora