Capitulo 37

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____: Eres un tonto —lo golpee— Te pudiste haber lastimado —rio aunque no le encontraba la gracia. La sala estaba llena de vidrios.— Hay que levantarlo, los niños se pueden lastimar. —le dije soltándome de su abrazo.
Adam: Hey Hey —me tomó de la cintura— Tenemos que limpiar más aparte de eso— señalo la mesa— Pero solo tenemos tres horas para nosotros solos y las quiero aprovechar —señoras y señores... Morí.
_____: ¿Que no es lo único que rompiste? —pregunte sorprendida tratando de controlar mis hormonas ante sus sensuales palabras.
Adam: Digamos... que tal vez será necesario que me mude contigo —por mi encantada.
_____: Adam —dije negando con la cabeza— ¿Qué hiciste? —sonrió tímido, ya me imaginaba lo que había pasado con su habitación.
Adam: _____ —suspiro acariciando mi brazo de arriba abajo— No me vuelvas a lastimar así —una horrible punzada en mi pecho y estómago.
_____: Jamás me lo perdonare Adam —no sé cómo era posible que siguiera teniendo lagrimas— Eres lo más valioso que tengo y no te quiero perder... NUNCA —remarque.
Adam: Ya —dijo sosteniendo mi rostro por las mejillas— A partir de ya todo olvidado— puso sus labios sobre los míos y se separó lentamente.— Vamos—regreso por mis maletas y subimos las escaleras corriendo.
Llegamos al piso de arriba y me guiaba hacia mi antigua habitación. Entramos y dejo las maletas de golpe en el piso y me rodeo por la espalda con sus brazos a la velocidad de la luz. Me gire sobre mis talones para poder verlo de frente y su celular comenzó a sonar. Cerró los ojos molesto, reí.
Adam: No le encuentro la gracia eh —rodo los ojos sacando su celular.
_____: Por eso mismo te digo Am —hundí mi rostro en su cuello y lo mordí suavemente. Sus dientes aprisionaron su labio inferior, me encantaba que hiciera eso.
El teléfono dejo de sonar y una pícara sonrisa apareció en su rostro. Seguí jugando en su cuello. Cerró los ojos disfrutando de mis besos y caricias.
Una vez más el celular de Adam comenzó a sonar, esta vez bufo molesto.—Responde —le dije riendo mientras me daba la vuelta para comenzar a acomodar mis cosas.
Adam: Esto no se queda así ¿estamos? —Me señalo

_____: Claro que no se quedara así —le sonreí y subí una de las maletas a la cama.
Adam: ¿Diga? —Respondió no de muy buena forma— ¿Para qué? —Silencio— **** lo olvide —dijo frotando sus ojos— Si, si ya —dijo con fastidio— En cinco minutos estoy ahí —colgó y el aparato regreso a su bolsillo.— Me tengo que ir a la tienda, ¿Vienes conmigo?
_____: Creo que me quedare a limpiar el desorden de abajo —me acerque a él— ¿Está bien? —asintió con la cabeza.
Adam: Nos vemos más tarde —unió nuestros labios— Te amo —susurro sobre estos y salió corriendo sin siquiera dejarme contestarle.
Termine de acomodar todas mis cosas e incluso tome una ducha y me cambie.
Baje con pequeños saltos las escaleras, estaba más que feliz. Tome una bolsa y comencé a echar los trozos grandes de cristal con cuidado de que no rompieran la bolsa. En una hora la sala estaba lista.
No sabía a qué hora regresaría Adam, Aly y Dylan hasta dentro de casi dos horas. Y no tenía nada que hacer. Recordé lo que había dicho Adam sobre su habitación. Muerta de la curiosidad, corrí escaleras arriba.
'Wow' fue lo que salió de mi boca al ver la habitación del enojon de Adam. Era simplemente indescriptible el desastre. Vidrios rotos, cosas tiradas. Se me estrujo el corazón. Si lo hice sufrir y mucho.
Baje una vez más las escaleras para conseguir una bolsa y comenzar a limpiar semejante desorden. La habitación quedo reluciente de nuevo, conecte el reloj -que también estaba tirado en el piso- y ya eran las 12:20. Rápido volví a mi habitación y saque mi celular para llamar a Adam.
_____: ¡Adam! —No lo deje hablar— ¿Puedo ir por Aly y Dylan? —soltó una carcajada.
Adam: Claro que puedes —contesto— Las llaves de mi auto están en la entrada.
_____: Perfecto oye... ¿Y a qué hora regresaras?
Adam: No tardo, en diez o en quince minutos estoy ahí.

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El timbre sonó y de pronto una oleada de niños llenaba la explanada del colegio. Era más que difícil lograr encontrar a la pequeña Aly. Me ponía en las puntas de los pies para tratar de ver a Aly. Me imaginaba a Adam en estas circunstancias con su poca tolerancia seguramente al inicio salía echando humo de aquí.
Hasta que finalmente vi esos inconfundibles cabellos castaños, tan parecidos a los de su hermano mayor.
_____: ¡Aly! —llame y las otras madres de familia voltearon a verme ¿Qué? ¿Todas se llamaban Aly? Estúpidas...— ¡Aly! —llamé una vez más y logro verme. Una enorme sonrisa se coló en su rostro.
Aly: ¡Volviste! —grito corriendo hacia mí con los brazos abiertos
_____: ¡Sí! ¿Me extrañaste? —pregunte abrazándola y rio
Aly: Mucho, Mucho.
_____: Yo también los extrañe mucho —rió de nuevo.— Vamos por tu hermano —aún faltaba Dylan.

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Dylan: ¡Volviste! —al igual que Aly me dio un efusivo abrazo.— Te extrañamos mucho, no era divertido sin ti —despeine su cabello cariñosamente
_____: Pues ya no se aburrirán más. —Llegamos a casa, ambos corrían a mi alrededor de mi preguntándome que a que jugaríamos.— Primero vamos a comer y luego jugamos —les dije abriendo la puerta.
Dylan: Adam querrá que hagamos tarea —Dijo Dylan y Aly lo secundo.
_____: Pues entonces comeremos, hacen tarea y después jugamos ¿está bien?— aceptaron no muy alegremente.
Adam: ¿Cómo les fue? —Pregunto Adam bajando las escaleras
Dylan/Aly: Bien —contestaron seriamente a coro y subieron corriendo las escaleras.
Adam: Lo vez —hizo una mueca extraña— Me odian.
_____: No seas tonto —Bese su mejilla y subí detrás de ellos.— ¿Por qué están enojados con Adam? —les pregunte y ambos se sentaron frente a mí en la cama, ninguno hablo solo miraban hacia abajo.— Él está triste, dice que ustedes están molestos con el ¿es verdad?  —Aly respondió que si con la cabeza.
Aly: Nos gritó muy feo. —una lagrima resbalo por su mejilla
Dylan: Nosotros solo queríamos saber dónde estabas —agrego Dylan.
_____: Ay pequeños —sabía que era mi culpa— Adam los quiere mucho, y le duele demasiado que ustedes no le hablen —ambos se miran con arrepentimiento.— Si les grito fue porque tal vez no se encontraba bien en ese momento... así que —canturreé— Quiero que bajen y le den una sonrisita a su hermano ¿está claro? —ambos rieron ante mi tono militar al terminar la oración.
Dylan/Aly: Está claro —dijeron ambos con el mismo tono haciendo un saludo con la mano tal y como los soldados.

Playing With Your Heart (Adam Levine)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora