Morir ignorado por un volcán

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Plinio el viejo siempre lo supo, la naturaleza los quiere a todos de vuelta al polvo y lo comprendió más claramente cuando, impresionado por el volcán Vesubio en plena erupción, murió en horribles convulsiones, tal vez por los gases tóxicos o tal vez por un infarto.

Sin embargo, nunca pudo abrazar a la naturaleza como se esperaría de un gran investigador natural como él.

Lo normal es que los investigadores, quienes desde siempre han estado cerca del abrazo de la naturaleza caigan en sus garras victimas de su propia curiosidad, pero generalmente no es así.

Lo saben incluso aquellos locos turistas que decidieron ponerse a bailar a la orilla de un volcán, seguros de que si algo les pasaba, la culpa seria del volcán, la naturaleza o alguna deidad relacionada, pero, mientras bailaban, patearon una piedra, que reboto en la cara de uno de los sujetos.

El camarógrafo, quien vio lo sucedido, corrió a ayudar, pero dejo tan cerca la cámara del flujo de lava, que la batería exploto causándoles graves quemaduras en diversas partes del cuerpo.

Intentando apagar el fuego, los demás usaron todo lo que tenían a mano, pero no se dieron cuenta de que el fotógrafo tenía baterías de repuesto en su abrigo, las cuales también se recalentaron y explotaron en conjunto, dejando gravemente heridos a todos.

Cuando el guía al fin logro alcanzar a estos muchachos imprudentes, no pudo más que llamar por ayuda para recoger, dos muertos y tres heridos.

El volcán, por su parte, los ignoro por completo mientras hacían sus tonterías.

De hecho, los sensores reportan que fue su periodo de más baja actividad desde que lo documentaban. Eso, excepto un pequeño temblor que coincidía con lo que capturo la cámara, casi como riéndose de la imprudencia de estos estúpidos jóvenes.

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Nota del autor

La historia aquí presente es ficticia, pero bien pudiera pasar por un documental sabiendo lo estupida que puede llegar a ser la gente XD


Los frutos del tiempo. Relatos cortosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora